miércoles, 18 de marzo de 2020

Cuarentena genocida

Por Luis Manuel Aguana

Mucho me ha llamado la atención que en un país con un sistema de estadísticas epidemiológicas completamente destruido intencionalmente, aparezcan de la noche a la mañana los principales voceros del régimen de Nicolás Maduro Moros a decirle al mundo que en Venezuela hay X, Y, Z o W casos comprobados de contagio del virus COVID-19, ¡y les crean! ¿En base a qué? ¿Cómo el mundo – y nosotros – podríamos creer que eso sea cierto? Y es claro que no lo es. En Venezuela al régimen no se le puede creer absolutamente nada de manera objetiva y menos en el sensible caso de las estadísticas sanitarias. Se han dedicado a perseguir a los médicos que digan o insinúen algo relativo al tema desde que comenzó la crisis del COVID-19 mundialmente.

Y efectivamente en un país donde desconocemos los casos reales de muertes por malaria (paludismo), porque el régimen esconde las cifras y le miente a las organizaciones internacionales de salud, siendo ésta una endemia muy conocida por nuestros países desde hace décadas, de la noche a la mañana ¿cómo salen los usurpadores a decir con toda propiedad que hay X casos comprobados de COVID-19 en todo el país, una enfermedad completamente nueva, teniendo una red de información epidemiológica destruida, sin médicos, sin hospitales dotados, sin nada? La respuesta es que simplemente no lo saben, ni nunca lo sabrán. Imagino que todas las mañanas se levanta Jorge Rodríguez y se inventa un numero para elaborar el parte médico para consumo de los pendejos.

Pero aunque no sepan las cifras reales, allí está la gente muriendo, ya no por la nueva enfermedad sino por la destrucción que ellos mismos han ocasionado al sistema de salud venezolano que nos ha puesto en la situación, no ahora sino desde hace años, de crisis humanitaria que estamos padeciendo antes de que apareciera ese virus chino solo-mata-gente, sin que el régimen todavía lo reconozca, impidiendo criminalmente la ayuda humanitaria. Entonces nos aplican sin más las mismas medidas de aislamiento que están aplicando el resto de los países a sus ciudadanos, sin tener en cuenta en la mas mínima consideración las particularidades de nuestra grandísima situación indigente producto de nuestra crisis humanitaria. Esto es, el régimen de Nicolás Maduro Moros nos está aplicando una cuarentena genocida, que en nuestro caso será peor que la enfermedad.

Sin agua ni electricidad en todo el país, sin combustible, sin comida que adquirir con el sueldo mínimo mas bajo del planeta, el régimen pretende que los venezolanos nos quedemos en nuestras casas a esperar que el COVID-19 no se propague. Los venezolanos medio sobreviven con dos y tres trabajos solo para poder comer, y para ello se ven forzados a salir a las calles. Eso no tiene color político. Es una situación que nos a afectado a todos los que vivimos en Venezuela. Y aunque el régimen ha manipulado la entrega de la comida políticamente con su Carnet de la Patria, el venezolano medio ha sobrevivido los seis dígitos inflacionarios provocados por ellos debido a su vocación trabajadora. Ahora esto no se podrá hacer después de las medidas que el régimen ha tomado. Y yo me pregunto, ¿será posible que el régimen haya resuelto la vieja paradoja de mantener la mujer borracha y el barril lleno de vino al mismo tiempo?

Esto lo digo porque si hasta el socialista Pedro Sánchez entendió que para mantener viva la economía de España había que inyectarle mas de 200 mil millones de Euros “para salvar el país de la crisis económica y social derivada de la emergencia sanitaria del coronavirus”, (ver Rescate económico: el gobierno quiere sortear la crisis del COVID-2019 con 200.000 millones”, en
https://www.lavozdelsur.es/rescate-economico-el-gobierno-quiere-sortear-la-crisis-del-covid-2019-con-200-000-millones/), entonces ¿qué podremos esperar nosotros con este régimen que nos hambrea con un salario mínimo de 3 dólares mensuales?

El régimen de Nicolás Maduro Moros, por obra del COVID-19 se encuentra entonces en una disyuntiva sumamente grave si pretende conservar su estabilidad: o deja que los venezolanos se sigan resolviendo como lo están haciendo hasta ahora, lo cual significa que tengan la movilidad necesaria para hacerlo, creando en consecuencia las condiciones para que se propague con voracidad el COVID-19, que solo Dios sabe hasta donde ha llegado en Venezuela, o pone los reales para que continúen en sus casas, como lo esta haciendo el socialista Pedro Sánchez. Como creo que no pueden hacer ni lo uno ni lo otro, tendrán que comenzar a lidiar con la desobediencia a esa cuarentena genocida porque nadie se suicida solo porque el régimen se lo ordene, por mas seguidor del régimen que sea. Y ese es el escenario que comenzaremos a ver en los próximos días, si no es que ya comenzó.

¿Que harán Padrino y el resto de sus matones armados? ¿Ordenarán disparar en contra de un pueblo hambriento y enfermo? Posiblemente, ya lo han hecho antes. Pero ¿podrán hacerlo de una manera consistente y simultánea en todo el país, y en especial en contra de SU PROPIA GENTE? Buena pregunta. Y ya no estamos hablando solo de opositores, sino de cualquier persona que desee simplemente alimentar a su familia. Allí se incluye el pueblo que todavía se llama a si mismo “chavista”. Porque, o los matan de hambre en sus casas, sin agua y sin luz, o los mata el virus o el régimen afuera en las calles intentando ganarse la vida. Esa decisión solo será de ellos, y no creo que los venezolanos tengan vocación suicida y se dejen matar pasivamente.

Por obra de una condición externa, una pandemia, el rebaño de corderos en que se han convertido los venezolanos se estarán ahora preguntando si deciden ir a un matadero por mantener una cuarentena genocida, quedándose en sus casas sin tener como sostenerse allí, o deciden si vale la pena arriesgar la vida enfrentando al virus y al régimen. Creo que un pueblo llevado a ese extremo no dudará en preferir arriesgarse. Es cuestión de vida o muerte, y las probabilidades van a favor de ese riesgo porque si logran sobrevivir al COVID-19, le sobrará energía para llevarse al régimen por delante...Es hora que los pilares que aun sostienen al régimen recapaciten, o los agarra el chingo o los agarra el sin nariz. No hay forma de escapar de la disyuntiva. Si me lo permiten, Maduro no vale esa pena….

Caracas, 18 de Marzo de 2020

Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana

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