Por Luis Manuel Aguana
Es increíble la imaginación de los delincuentes del régimen.
Ahora los sapos se convirtieron en algo llamado “Patriota Cooperante”, y con
los cuales el régimen instruye los expedientes de los estudiantes detenidos en
las protestas de calle. De acuerdo a la noticia de primera página de El
Nacional, “Son personas que llegan a
relacionarse con los ciudadanos cuya propiedad es luego objeto de allanamiento,
al punto de que logran tomar fotografías, entrar a las viviendas de las
personas y recabar información personal…” (ver noticia en http://www.el-nacional.com/politica/identidad-protegida-cooperante-incrimina-ciudadanos_0_402559891.html).
Al utilizar estos sapos en los expedientes que se instruyen,
y que incluso podrían no existir porque no están identificados, el régimen
tiene carta blanca en su utilización de la justicia para perseguir opositores y
detener a quien le venga en gana en ocasión de las protestas, no solo de los
estudiantes, sino de la sociedad civil. Incluso allanar las viviendas de
cualquier persona con la excusa que uno de esos “patriotas cooperantes” o sapos
le pareció adecuado hacerlo, y acusó a alguien de “conspirar” en contra del
régimen del Ilegitimo.
Con esta práctica aberrante se inaugura la época del “sapeo”
persecutorio del régimen en sus más variadas expresiones. Si mi vecino
simpatizante del régimen me ve reunir con alguien que no le guste, me “sapea” a
las autoridades y el no estará identificado en el expediente. También podría
venirme a buscar la policía política porque alguien del régimen no le gustó
algo de lo que escribí y me monta un expediente indicando que un sapo, o ahora
un “patriota cooperante” inexistente, me vio protestando en la calle o haciendo
cualquier cosa que el gobierno considere “golpista” ¿qué tal?
Por supuesto que habrá sapos a sueldo. Alguien que desee
redondearse la arepa en una época tan difícil como esta se enrolará de sapo o
“patriota cooperante”. Y los veremos en los edificios, y en nuestros círculos
de cercanos. Todo el mundo desconfiará de todo el mundo porque cualquiera puede
ser un “patriota cooperante” pagado por el régimen. En la nota de El Nacional se
indica que “un “patriota cooperante”
acusó a Rodolfo González, un piloto retirado de 67 años de edad, de haber
participado en reuniones conspirativas”. A partir de hoy todos los
venezolanos formalmente somos culpables de algo y estamos expuestos a
detenciones y allanamientos arbitrarios a la carta del régimen.
Al abrir la Caja de Pandora del “sapeo” en Venezuela,
Nicolás Maduro y sus amos de La Habana pretenden que los venezolanos tengamos
el pánico que los cubanos tienen de sus propios vecinos, tal y como lo describe
muy bien el bloguero cubano Yusnaby Perez en su nota “Los CDR en Cuba” (ver http://yusnaby.com/yusnaby-perez-los-cdr-en-cuba/).
Con ese miedo tienen sometida a la población. De allí el apresuramiento de
comenzar con la práctica a como de lugar en este momento.
Aunque los abogados de Derechos Humanos adviertan, como es
natural, de la inconstitucionalidad de esta nueva práctica del régimen, todos
en Venezuela sabemos que este problema que tenemos NO ES DE LEYES, ES UN
PROBLEMA POLITICO. Dejó de ser de leyes desde hace tiempo. Por eso el régimen
le metió el acelerador a la verdadera cara del castro-comunismo, tratando de
crear las condiciones para hacer viable su Plan de la Patria. La única cosa que
lo ha detenido ha sido la protesta en la calle y quiere pararla como sea,
porque precisamente tienen eso, miedo. Pero creo que se equivocaron de nuevo.
Si por miedo fuera esta protesta se hubiera acabado desde
hace semanas y no tendríamos hasta hoy 43 muertos, 2.590 detenciones y 130
presos. La gente está consciente que esta escalada comunista se detiene ahora
con calle o no se detiene. Pero los únicos que no están conscientes de eso son
los que están sentados en la Mesa de Dialogo y que al parecer desean seguir
viviendo en la extensión de la cuarta que no es otra cosa que la quinta. Y por
eso temen que cuando se acabe la quinta, ellos también se acaben como
consecuencia natural. Y no les falta razón…
Pero este nuevo giro del régimen al institucionalizar el
“sapeo” dentro de los grupos de protesta puede lamentablemente tener otra
consecuencia insospechada, descrita bien por Victor Hugo en su novela inmortal
“Los Miserables”. En la barricada de París el niño de la calle Gavroche se da
cuenta que el policía Javert se encuentra infiltrado entre los sublevados.
Inmediatamente lo capturan y someten diciéndole que morirá dos minutos después de
que caiga la barricada. Nótese que Victor Hugo da cuenta de cómo se resolvía el
problema de los sapos en ese entonces.
Afortunadamente para Javert, el protagonista Jean Valjean le
pide a los sublevados ajusticiar al preso y en medio del desorden de la
barricada le concede la libertad. Los sapos o “patriotas cooperantes” corren ahora
el riesgo no tener la misma suerte de Javert en caso de ser descubiertos
precisamente porque al abrir la Caja de Pandora del “sapeo”, la violencia que
han desatado es tan libre como el miedo que quieren imponer…
Caracas, 6
de Mayo de 2014
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana