jueves, 29 de junio de 2023

Candidatura salvadora

Por Luis Manuel Aguana

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He recibido algunas consultas de amigos en el exterior, solicitando mi opinión acerca del registro en la plataforma técnica dispuesta para eso por la Comisión Nacional de Primarias (CNP), habida cuenta de la decisión de esa CNP de “autogestionar” el voto de los ciudadanos. Tal vez no sea yo la persona más apropiada para esa consulta, al haber expuesto públicamente mi opinión en contra de ese proceso de primarias que pienso coadyuva, no solo a generar otra vez una falsa expectativa en la gente de que “esta vez sí saldremos del régimen”, sino a legitimar con nuestra presencia en elecciones un nuevo fraude electoral por parte de quienes controlan el sistema de contar votos. Sin embargo, aun así, pienso que es importante que las personas posean la mayor cantidad de información posible para tomar la mejor decisión a favor de sus intereses.

Desde que anunciaron que el CNE no tendría injerencia en las primarias, la gente se sintió más cómoda en suministrarle sus datos a la CNP. Sin embargo, no debemos olvidar que ese capítulo del CNE todavía no ha terminado. Hasta el último momento el régimen tendrá algo que decir en ese proceso. Lo que sucedió fue que los Rectores del CNE fueron “renunciados” por el régimen, y la CNP decidió “autogestionar” el proceso y no seguir esperando debido al cronograma ajustado que tenían. Pero eso no significa que un nuevo CNE no decida, al entrar en funciones, luego de cualquier sentencia del TSJ del régimen frente a ese proceso, obligar a la CNP a entregar los datos que hayan recogido hasta ese momento para la celebración de las primarias.

Debo admitir que es un escenario hipotético, pero que puede ser muy posible por la larga experiencia que tenemos con la tiranía. El otro escenario es que no se celebren primarias por falta de recursos, o que los recursos que puedan reunir antes de octubre no les alcance para unas primarias como las que pretenden realizar, y decidan otro mecanismo a última hora (¿consenso?) entre los participantes inscritos. Entonces, los datos recogidos hasta ese momento quedarían en manos de alguien (no se sabe de quién) de la oposición oficial, dispuestos allí para ser posteriormente utilizados para cualquier antojo electoral.

En el caso de realizarse las primarias, alguien debería, en buena ley, hacerse responsable de los datos opositores, destruyendo o borrando lo que haya que destruir y borrar para no correr el riesgo de ir a parar en manos de la tiranía, como efectivamente lo hizo la Comisión de Primarias del año 2012, que responsablemente quemó los cuadernos electorales al finalizar el proceso, aun siendo amenazados por el régimen.

Debido a que en Venezuela no existe ninguna regulación en materia de protección de datos (¡no hay siquiera Estado de Derecho!), queda de los electores de la oposición en cualquier parte del mundo confiar en quienes administran ese proceso en la CNP (ver Primarias y protección de datos, en https://ticsddhh.blogspot.com/2023/06/primarias-y-proteccion-de-datos.html) y esperar lo mejor en sus actuaciones. Entiendo que muchos opositores en Venezuela y en el exterior ya se están registrando. Si esos venezolanos todavía creen que un candidato que salga de esas primarias hará alguna diferencia en el 2024 de lo que ha ocurrido hasta ahora con los procesos electorales conducidos por el régimen, regístrense y voten en ese proceso.

No deseo ser pesimista o transmitir pesimismo. Simplemente, expongo los hechos sin generar falsas expectativas. Escribí una tesis de doctorado alrededor de la protección de los datos de los ciudadanos en Latinoamérica, proponiendo una metodología para medir el fenómeno, y como era de esperar, Venezuela resulta el caso más grave en la protección de los datos de sus ciudadanos (ver Tesis de Doctorado de MSc. Lic. Luis Manuel Aguana, EL USO DE LAS TECNOLOGÍAS DE INFORMACIÓN Y COMUNICACIONES (TIC) PARA EL CONTROL POLÍTICO Y LA LIMITACIÓN AL DERECHO A LA PRIVACIDAD: DESARROLLO DE INDICADORES PARA SU MEDICIÓN Y SU APLICACIÓN EN AMÉRICA LATINA, en https://tinyurl.com/5eh9v7a5). Allí encontrarán suficiente información para que ustedes saquen tus propias conclusiones.

Ahora bien, más allá de que los venezolanos se inscriban para votar en esas primarias, y que todos deseemos fervientemente que el candidato escogido tenga las mejores intenciones de plantarse ante el régimen para cobrar efectivamente el resultado, sería muy ingenuo de nuestra parte creer que el solo acto cívico de votar e irnos a nuestras casas será suficiente para que la pléyade de criminales que detentan el poder en Venezuela se separen de él cuando eso les representa perder la libertad o la vida.

El acto electoral es una acción CIVILIZADA, propia de ciudadanos que entienden que es el pueblo el que mayoritariamente decide quién debe conducir el Estado. Lamentablemente, ese no es el caso en Venezuela. Hemos sido testigos, a lo largo de estos muy duros 23 años, de cómo la tiranía ha ignorado olímpicamente ese principio democrático fundamental. ¿Por qué el régimen se comportaría de una manera distinta en esta nueva oportunidad? ¿Debido a qué los opositores somos mayoría? No podemos llevar esa pretensión hasta ese extremo.

Si bien es cierto que es importante demostrar al mundo por los votos que los venezolanos nos hemos decantado por un rechazo mayoritario y contundente ante quienes nos desgobiernan, no es menos cierto que esa demostración ya la hicimos en el pasado de la misma manera en dos Consultas Populares, en 2017 y 2020, sin que eso moviera ni un milímetro fuerza alguna de afuera ni de adentro del país. ¿Existe ahora algún indicio que señale lo contrario para el 2024?

Los venezolanos de nuevo seguimos esperando, y esta vez de las manos de una candidatura salvadora,  que alguien resuelva por nosotros lo que cada uno no ha afrontado desde la perspectiva de nuestra propia y terrible realidad. Y la realidad indica la necesidad de profundizar en la lucha dura y consistente, impulsada por un movimiento de movimientos ciudadano decidido, constante y permanente de resistencia civil organizada, que no se engañe a sí mismo en los términos y maneras que se requieren para enfrentar a una tiranía como la que tenemos, que es única en el mundo, dispuesta a pasar por encima de nosotros a cualquier precio para no desalojar el poder. De verdad espero que quien se lleve la victoria  en ese papel de marras no tenga el mismo destino histórico que han tenido todos los salvadores…

Caracas, 29 de Junio de 2023

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana

jueves, 22 de junio de 2023

La “casta política” de Venezuela

Por Luis Manuel Aguana

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A algunos de mis lectores les ha parecido odioso que me refiera a la precandidatura de María Corina Machado (MCM), como “oposición radical”, sin señalarla a ella directamente, en las notas donde refiero al tema de las primarias de la oposición. Eso tiene una razón. MCM no es la única persona en Venezuela que desprecia el comportamiento de la oposición oficial, ni la única con planteamientos distintos al formulado por ella para resolver el problema de Venezuela.

Pero ciertamente, MCM ha logrado a través del proceso de primarias aglutinar a la oposición radical que pone en tela de juicio el comportamiento de quienes tradicionalmente nos han representado en la oposición, y que lamentablemente ostentan nuestra representación oficial opositora dentro y fuera del país, a través de ese antro en que se ha convertido la Asamblea Nacional de 2015, que desnaturalizó la lucha de los venezolanos que sin ninguna aspiración ni interés de ninguna especie, verdaderamente deseamos salir cuanto antes de esta tragedia.

Javier Milei, uno de los principales candidatos a la presidencia en Argentina, bautizó en su país a ese tipo de grupo político, con importantes semejanzas en su perfil y actuación a los opositores que operan en Venezuela, como la “casta política”, definiéndolos claramente como “aquellos que están en política y son inmorales”, siendo este el término más utilizado por Milei en su campaña, que lo ha diferenciado claramente de quienes estando en la oposición y en el gobierno, de acuerdo a su criterio, han hundido a la Argentina.

Algo semejante podría ser aplicable en Venezuela. El término “casta política” como lo utiliza Milei en Argentina ha sido tan claro que ha definido perfectamente a aquellos que han utilizado la política como modo de vida, olvidándose de las necesidades de su pueblo. Podríamos identificar sin mucha explicación quienes pertenecen a esa “casta política” en Venezuela.

Dicho en estos términos, el efecto producido por MCM en el país no le pertenece a ella, sino a todos los venezolanos que llegamos al llegadero de despreciar esa “casta política” responsable de todo lo que ha pasado en Venezuela con la combinación nefasta de la oposición y régimen, viendo en ella el mismo fenómeno de “que se vayan todos” salvador observado en Hugo Chávez Frías en 1998, por supuesto conservando las distancias.

Eso explica el efecto espuma de su precandidatura en las primarias, porque no solo suma a quienes tradicionalmente la habían apoyado en sus aspiraciones, y que no reflejaban previamente más de un dígito en las encuestas de preferencia, sino a todos aquellos del espectro electoral que no le ven salida al régimen sin salir también de la “casta política”, que somos la mayoría. ¿Es eso bueno o malo? Si salimos del régimen con eso, ¡por supuesto que es muy bueno!

Pero no estamos en 1998. Hay un Poder Electoral secuestrado por una tiranía, y hay una oposición en bloque en contra de que MCM llegue a Miraflores, aun cuando eso represente una opción para salir del régimen.

Es esa misma "casta política" que no piensa en Venezuela, sino en sus propias aspiraciones de poder, la que hará todo lo que sea necesario para impedir que la precandidatura de MCM llegue a convertirse en candidatura frente al régimen. Es esa misma mezquindad, como la demostrada por Henrique Capriles al referirse a lo de las “Primarias VIP”, lo que hará que su despreciable partido no mueva ni un dedo para ayudar a poner los centros de votación que necesita la Comisión Nacional de Primarias para que se realicen las primarias. De hecho, ningún partido de ese “status quo” opositor ayudará a ese proceso, ni en gente ni en dinero.

¿Cuál debería ser el comportamiento lógico de una “oposición unida” en contra del régimen? Que renuncien todos los partidos a sus pretensiones candidaturales y decidir por aclamación a favor de MCM como la candidata opositora, y comenzar a luchar desde ya juntos por unas condiciones electorales transparentes para las elecciones en el 2024.

Pero eso no pasará. Nuestra experiencia histórica, a pesar de existir algo que se llamó Pacto de Punto Fijo, cuando los principales dirigentes políticos, estadistas conscientes del momento histórico, pensaron primero en el país y no en sus partidos. No pasará porque esa dirigencia política está tan comprometida en sus intereses vinculados con la tiranía, conocedora de todos sus secretos, que morirían antes que la población los perciba verdaderamente en su horrible y terrible realidad, impidiendo que puedan seguir viviendo de la política.

En esas circunstancias tan tétricas y que dicen mucho de quienes hacen política en este país, nos encontramos hoy los venezolanos. En consecuencia, todos aquellos que dicen que “a los partidos no le quedará otra alternativa” que apoyar a MCM, no han entendido lo que ha ocurrido en Venezuela en los últimos 20 años, minimizando la gravedad del problema opositor venezolano. MCM se quedará sola en las primarias porque esos partidos NO concurrirán ni colaborarán absolutamente en nada para que se den unas elecciones primarias donde saben que ella ganaría de largo, convirtiéndose en los principales saboteadores de ese proceso.

En Argentina es muy posible que Milei como fenómeno electoral logre vencer a esa “casta política” en las elecciones de octubre de 2023, al tener identificado perfectamente contra quien lucha, pero nosotros en Venezuela ni siquiera nos hemos percatado de que verdaderamente la tenemos, y en consecuencia ¿cómo podremos vencerla para sacar al país de este caos? ¿Se terminará convirtiendo la CNP en un árbitro entre MCM y la “casta política” de Venezuela, para definir el contendor del régimen en el 2024? Si no lo han pensado, es bueno de que comiencen a hacerlo, porque del resultado de eso va a depender el futuro de todos los venezolanos.

Caracas, 22 de Junio de 2023

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana