Mostrando entradas con la etiqueta De la Dictadura a la Democracia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta De la Dictadura a la Democracia. Mostrar todas las entradas

miércoles, 2 de abril de 2014

¿Y dónde está el piloto?


Por Luis Manuel Aguana

Tomo prestado el título de esta nota de la excelente película de principios de los años 80’s (¡Airplane! en idioma original) protagonizada por Leslie Nielsen y Peter Graves, donde se parodiaba la tragedia de un avión, que sin control de nadie, llega al final a aterrizar por casualidad, luego de las mil peripecias de pasajeros y tripulantes.

Me vino a la memoria esta comedia luego de contemplar la tragedia de lo que nos está pasando, que como en la película de Nielsen, nadie al parecer controla la insurrección que ha comenzado, ni quien la dirige ni mucho menos que alguien pueda aterrizar este avión donde todos los venezolanos somos los aterrorizados pasajeros. Esto es algo tan serio que merece una reflexión, aunque lo acompañemos con una parodia.

Es de suponer que el régimen es el primer interesado en saber quién controla lo que sucede. De hecho todo este gorilismo militar demostrado en contra de los estudiantes, Leopoldo Lopez, los Alcaldes opositores, María Corina Machado y todo aquel que luzca dirigir esta insurrección, está condenado sin juicio alguno dictatoriamente. Justamente están en la búsqueda de esa inteligencia, de esa sala de control que no aparece por ninguna parte. Y una cosa es que no la encuentren y otra muy diferente es que no exista.

Lo que sabemos los ciudadanos comunes es que hay un gravísimo problema que lo representa la permanencia en el poder de este régimen, al que hay que a todas luces desalojar de una manera No Violenta y constitucionalmente. Pero de allí a que alguien controle lo que debe hacerse para que eso pase, qué aplicar en cada caso y cuando, qué pasará después y quiénes serán los pilotos que aterricen el avión, hay muchísimo trecho. Entonces tiene que existir esa inteligencia. Y si no la hay, alguien debe crearla así la busque el régimen después debajo de las piedras…

De acuerdo a Gene Sharp (referenciado en los Apuntes para una Lucha No Violenta  http://ticsddhh.blogspot.com/2013/01/apuntes-para-una-lucha-no-violenta-ii.html), hay 4 tareas fundamentales que realizar para poder salir con éxito de este régimen: a) Fortalecer a la población en su determinación de luchar, en la confianza en sí misma y en sus aptitudes para resistir; b) Fortalecer grupos sociales e instituciones independientes; c) Crear una fuerza poderosa de resistencia interna; y d) Desarrollar un amplio y concienzudo Plan Estratégico global para la liberación y ejecutarlo con destreza.

De allí subrayo en especial la última, a mi parecer la más importante: UN PLAN ESTRATEGICO. Obviamente ese Plan debe ser ejecutado por personas en Resistencia Civil. No indicaré aquí que debería contener ese Plan pero es claro que debería contestar preguntas como las formuladas anteriormente. No es posible mantener la Resistencia Civil sin ese Plan y ALGUIEN lo debe formular y ejecutar con la destreza que indica Sharp.

Una oposición entregada y colaboracionista obviamente no es quien lo hará. Tampoco deberían hacerlo solamente los estudiantes sino conjuntamente con otros factores de la sociedad consustanciados con esa Resistencia Civil interna. Las personas inspiradas en las ideas de Sharp que iniciaron el movimiento de resistencia que terminó en la Plaza Tahrir seis años más tarde, con la salida de Mubarak en Egipto, tuvieron un Plan y mucha pero muchísima paciencia para ejecutarlo. Eso es lo que tenemos que hacer aquí.

Cuando observo que los gochos están planteando una valiente y heroica insurrección civil en el Táchira pero esta no es seguida por el resto del país de la misma manera, esto es un claro indicativo que no hay un movimiento organizado de Resistencia Civil con un Plan en la mano. ¡Y así somos los venezolanos!

El 11A-2002 una poderosa manifestación hizo caer al dictador de Miraflores pero quienes estaban allí no tenían un Plan de qué hacer, con las consiguientes nefastas consecuencias. De hecho creo que nunca pensaron que el dictador caería y la improvisación se adueño de la situación dejando al azar los acontecimientos que siguieron después. Esto es lo que nadie en un movimiento de Resistencia Civil con un mínimo de organización debe permitirse. La Junta Patriótica Estudiantil y Popular podría ser el germen de esa organización pero requiere de la fuerza que solo puede darle la sociedad civil organizada, gremios, y otros factores consustanciados con la idea de resistir de una manera No Violenta al régimen.

Cuando indiqué en mi ponencia en la Cátedra Pio Tamayo del 31-3-2014 (ver http://ticsddhh.blogspot.com/2014/03/el-largo-camino-de-las-guarimbarricadas.html) que no desestimaba ningún método de protesta sino evaluar la efectividad de ellos en relación con otros métodos internacionalmente conocidos de Lucha No-Violenta, implicaba igualmente que todo método que se aplique debe enmarcarse en un Plan con una estrategia. Trancazos, barricadas, marchas, o cualquier acción deben estar dentro de un PLAN que controle alguien. Y ese alguien debe establecer riesgos y aplicabilidad, evaluando la posible violencia que vendrá del régimen, e incluso si hay que hacer una retirada estratégica a favor de un mejor posicionamiento futuro, siempre dentro de un marco de Lucha No Violenta. Si no es así el avión se estrella sin piloto y con todos nosotros adentro…

Don Rafael Grooscors me indicaba que esta situación se origina por lo que él llama la falta de una "estrategia insurreccional contra un orden histórico" en Venezuela. Y en efecto eso es en resumen lo que hace falta, una ESTRATEGIA INSURRECCIONAL. Y como en la física, en la política tampoco existen los vacíos. Algo los llena. Esta forma de lograr a bandazos algo que naturalmente debe tener un control, hace que la solución tarde en llegar, origine más víctimas de las que debiera y cuando llega es la peor de todas. Es como la parodia que me cuenta Don Rafael, semejante a la de la película de Nielsen, que bien podría pasar en Venezuela si los factores que están en la calle hacen caso omiso de estas tareas fundamentales que enumera Sharp.

Un avión se estrella en la selva y solo sobrevive un mono que iba en el aparato. Al buscar al sobreviviente los rescatistas tuvieron que buscar a un traductor de señas para que el mono dijera lo que pasó. Y esto fue lo que contó: el piloto y el copiloto se unieron a una pequeña fiesta con las aeromozas y se emborracharon con ellas hasta desmayarse. Y a la pregunta obvia de los asombrados rescatistas, ¡¡¡¿¿¿Y quién piloteaba el avión???!!! Su respuesta con señas no se hizo esperar, ¡Pues yo!...

Caracas, 2 de Abril de 2014

Twitter:@laguana

domingo, 1 de diciembre de 2013

Espíritu Autoconvocado



Por Luis Manuel Aguana

La agresión de los colectivos comunistas armados a la manifestación pacífica de los Autoconvocados el 30N es un guión bien conocido desde los tiempos de las Camisas Pardas de la Alemania Nazi y las Camisas Negras fascistas de Mussolini en los años 20s. Al igual que sus predecesores, los agresores del 30N son especialistas en intimidación y asesinato en contra de sus oponentes políticos.

Los vimos actuar antes cuando bandas igualmente armadas asesinaron a Maritza Ron de Torregrosa el 16 de agosto de 2004 en la Plaza Francia de Altamira, e hirieron de bala a otras 12 personas incluyendo al entonces Diputado Ernesto Alvarenga, durante la protesta por el fraude electoral del Referéndum Revocatorio. Y sus asesinos, unos individuos fotografiados al momento de disparar en contra de la multitud, fueron perfectamente identificados, pero absueltos por ese delito y están en libertad.

Esa es la experiencia que tenemos con las bandas armadas del gobierno que atacan a las manifestaciones pacíficas de la oposición. Tienen patente de corso para actuar con violencia ante la vista cómplice de las autoridades policiales. Y esa es la verdadera cara del régimen que enfrentamos, mostrada aquí en su justa dimensión y en toda su magnitud. A eso es a lo que nos enfrentamos y nos oponemos. No hay cuentos de camino, esa es la dimensión real del comunismo que tenemos al frente.

Antes de comenzar la agresión, varios manifestantes expresaron en la Plaza Venezuela en un improvisado altavoz su indignación ante el régimen y su intención de seguir protestando. Y ese es el ánimo verdadero. Y el régimen ha tomado en serio la protesta de los Autoconvocados porque un movimiento como ese, en esencia, no obedece a los lineamientos de unos partidos que tienen controlados por el bolsillo con el juego electorero. La protesta es fresca, libre y sobre todo muy seria. No es una comparsa-fiesta donde se oye música ni gente bailando. Lo que se ve es gente indignada y arrecha por lo que pasa en Venezuela. Y a eso el régimen no solo le teme sino que le aterroriza.

El régimen le da terror que esa protesta continúe y crezca. Por eso enviaron a un pelotón muy grande de motorizados armados, encabezados por los Tupamaros, que fueron fotografiados portando uniformes y banderas, con fusiles automáticos, a pesar que la manifestación no era muy grande. A ese nivel le temen al pueblo en la calle. ¿Harán lo mismo que hicieron en el 2004 en contra de una masa indefensa? ¿Dispararán como lo hicieron contra Maritza Ron y Ernesto Alvarenga? Por lo pronto golpearon a los manifestantes y nos hicieron abandonar el lugar.

Las protestas autoconvocadas tienen un espíritu diferente. La gente no está en la calle siguiendo a un líder que “pescuecea” en una tarima compitiendo por hablar. Está en la calle protestando por la salida de un régimen comunista. Por eso es un error intentar acallar eso con violencia al puro estilo de los Camisas Pardas Nazis o sus contrapartes Negras fascistas italianas. No porque en esta oportunidad se impusieran, sino porque es ingenuo pensar que la próxima manifestación no será mayor precisamente por eso. Allí justamente es donde comenzará la espiral porque si creen que la gente se amedrentará es que no han conocido la historia de esta gesta desde que el régimen empezó a quitarse la careta democrática.

Y no es que aquí haya héroes ni mucho menos. Sino que ya existe la convicción manifestada allí de volver a salir a las calles una y otra vez sin miedo, a protestar por lo mismo y pacíficamente, y ahora será en una proporción cada vez mayor en la medida que el gobierno muestre su temor enviando motorizados para amedrentar las manifestaciones pacíficas. Mientras más envíen, más gente saldrá. ¿Intentarán agredir a cada vez a más personas cuando las manifestaciones sean multitudinarias? ¿Cuántos motorizados necesitaran cuando eso ocurra?

El 11 de Abril de 2002 pistoleros y francotiradores en Puente Llaguno dispararon en contra de una manifestación desarmada. Eso no lo olvidaremos nunca. Una de las razones por las cuales el régimen nunca soltará el gobierno- y menos por elecciones-, es por las cuentas pendientes de esa investigación que algún día habrá de darse en Venezuela en relación a lo que pasó allí. Mientras eso llega, el gobierno deberá pensar muchas veces antes de enviar a esos Tupamaros a disparar sobre la multitud indefensa. Sin embargo, aquellos que manifestamos debemos tener muy claro que al concurrir a protestar pacíficamente nos estamos exponiendo a ese riesgo. Es por eso que a esas manifestaciones no se puede ir en una tónica festiva ni familiar.

Y eso es lo que verdaderamente moverá lo que tiene que moverse. El espíritu de los autoconvocados va en sintonía con el malestar que siente el venezolano por lo que está pasando en el país. No sigue lo electoral aunque los convocados puedan estar en simpatía con los partidos. Va en el sentido de la protesta real y pacífica, sin distingo de ideologías, de hombres y mujeres, de todos los venezolanos dignos, cuya esencia hemos descrito como Rebelión Civil (ver Rebelión Civil en http://ticsddhh.blogspot.com/2013/11/rebelion-civil.html) cuando Alberto Carnevali convocó a los venezolanos a luchar contra una dictadura en Venezuela.

Podría calificarse que en este momento esas manifestaciones autoconvocadas en las calles y plazas todavía son embrionarias. Por eso es que el gobierno las quiere matar o amedrentar mientras sean pequeñas. Pero ya comenzaron e irán creciendo porque las cosas empeorarán. Tal vez puedan disolver alguna manifestación en una que otra ciudad, pero disolverlas  a TODAS en todas partes les será bien cuesta arriba. No tienen tantas motos ni Tupamaros. Y cuando sea mucho más robusta intentarán acallarla con las Fuerzas Armadas. Sería interesante ver a los militares en el mismo predicamento del 2002. Así que será bueno que fueran pensando desde ahora que es lo que harán para que no les caiga de sorpresa.

Por nuestra parte quedará hacer resistencia civil. Ya la estamos haciendo al protestar pacíficamente por un cambio. Y esa es la lucha, no otra. A eso es a lo que nos está llevando el régimen y pretenden acallarlo con miedo como en Cuba. A los cubanos del G2 que planifican estas agresiones: recuerden que su historia no es la nuestra y pueden salir con las tablas en la cabeza. No se vayan a creer que intentar cambiar la Constitución y el sistema democrático a la brava tratando de imponer un sistema comunal o comunista no significara para ellos un costo. Lo va a tener, pero no con los mismos resultados. Solo con un espíritu autoconvocado como el que hemos visto a partir del 9N y el 30N dificulto mucho que lo vayan a lograr. Este es solo el primer encuentro…

Caracas, 1 de Diciembre de 2013

Twitter:@laguana

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Indefensión Aprendida


Por Luis Manuel Aguana

Como bien decía Charito Rojas en un reciente artículo (El Follón nacional http://www.noticierodigital.com/2013/11/el-follon-nacional/) estamos metidos en un follón de proporciones gigantescas. Pero luego de una impecable descripción de los responsables y sus nefastas prácticas Charito nos dice que “no hay peor diligencia que la que no se hace” invitándonos a votar masivamente como si lo electoral fuera un oasis de Walt Disney donde se pueden conservar espacios y funcionara en una Venezuela distinta, sin percatarse que todo eso que explicó extraordinariamente bien en el mismo artículo TAMBIEN se encuentra en el sistema electoral venezolano. Y entonces ¿en qué quedamos?

Eso es como seguirle poniendo la otra mejilla a los criminales que te montan en un tren como ganado para llevarte a los campos de concentración donde indefectiblemente sabes que terminarás en un horno a gas. ¿Qué nos pasa a los venezolanos? Nos matan en las calles, ya no podemos comprar comida porque no hay y nos encontramos envueltos en la inflación más gigantesca que este país haya vivido, de manos de los ladrones más grandes que jamás hayan administrado el erario público y aquí la respuesta es “hay que votar masivamente” como indica Charito Rojas y un sinfín de gente más.

Y no es que esa conducta sea equivocada en un contexto racional. El problema es que YA NO ESTAMOS EN UN CONTEXTO RACIONAL. Es como cuando uno ve en esas películas de la Segunda Guerra Mundial cuando paraban a los judíos cual muñecos con un militar alemán apuntándoles con una pistola en la sien y ni siquiera hacían el amague para tratar de quitársela al asesino que igualmente peleando les quitaría la vida. ¿Qué nos pasa a los venezolanos?

Pues bien, al parecer la respuesta han tratado de encontrarla los científicos desde esa época en que los judíos se dejaban matar como moscas sin hacer nada para evitarlo. Los analistas indican que si al menos esa gente se hubiera sublevado en los campos de concentración probablemente habrían matado a mucha gente pero no a 6 millones de personas que voluntariamente se metieron en las cámaras de gas.

Y la respuesta al parecer apunta a un concepto que recientemente me llegó del Profesor Carlos Lee de la UNIMET, en un video titulado “Respuesta a el porqué la gente no reacciona y acepta con pasividad perderlo todo” (verlo en http://www.youtube.com/watch?v=N9Zlfs9NUEs&feature=em-share_video_user). Los psicólogos lo denominan desamparo aprendido o “Indefensión Aprendida”.

La teoría y el concepto fueron desarrollados por Martin E. Seligman, psicólogo y escritor norteamericano a finales de los años 60`s. Seligman halló que la Indefensión Aprendida “es la condición psicológica en la cual un ser humano o un animal ha aprendido a actuar o comportarse sin defensa alguna en una situación particular –usualmente, después de experimentar alguna incapacidad para evitar una situación adversa–, aún cuando tiene el poder para cambiar esas circunstancias desagradables o incluso dañinas” (ver Seligman, La Indefensión Aprendida en http://mystikeepopteiapsicologia.blogspot.com/2013/02/seligman-la-indefension-aprendida.html).

Este científico realizó un experimento revelador: “Dentro de una caja de laboratorio, un perro era expuesto a shocks eléctricos que no podía evitar. En cambio, en otra caja, otro perro sí que podía interrumpir esos shocks pulsando una palanca. Más tarde, los perros eran situados sobre una superficie electrificada de la que podían escapar simplemente saltando una barrera. El perro que había podido controlar los shocks la saltaba, mientras que el otro perro, en lugar de buscar la salida exitosa a la situación adversa, permanecía aguantando las descargas de manera pasiva. Había, pues, “asimilado” su indefensión” (ver Martin Seligman en http://disenosocial.org/indefension-aprendida/).

Desde ese punto de vista los venezolanos hemos sido expuestos masivamente a shocks que no hemos podido evitar: violencia desatada de la delincuencia que nos mata a diario, bandas armadas del régimen, deterioro brutal de la calidad de vida, falta de vivienda, hiperinflación, corrupción del régimen, amenazas, desempleo, cierre de empresas, saqueos y violación de la propiedad privada, impunidad, corrupción judicial, presos políticos, narcotráfico, fraude electoral, colaboracionismo de la dirigencia opositora, invasión extranjera de la mano del régimen, militarismo, desabastecimiento y colas para comprar lo mas mínimo de la dieta diaria. Y la lista sigue interminable porque esta es muy corta.

Eso no solo equivale al experimento de Seligman con sus perros sino a un plan extraordinariamente bien concebido para lograr que los venezolanos no busquen una salida exitosa a esta situación adversa. Se quedan recibiendo y recibiendo shocks eléctricos porque han asimilado y aprendido un estado de indefensión. En lugar de buscar la manera correcta de deshacernos de quien nos electrocuta, somos llevados mansamente a las urnas electorales en la aspiración de que luego de esa nueva “elección”, conducida por un régimen corrupto y tramposo, las descargas sean al menos de menor intensidad.

Y dentro de este estado de indefensión no termina de nacer la oposición correcta que comience a dar los primeros pasos para salirse de la caja de Seligman y decirle al régimen que nos desgobierna ¡YA BASTA!, rompiendo el cerco del campo de concentración y exigiendo un nuevo estado de cosas.

Sin embargo, afortunadamente están apareciendo manifestaciones que van en esa dirección y que el régimen y la oposición conchupante se han encargado de ocultar y banalizar respectivamente. Estas son las concentraciones “autoconvocadas” que se dieron el 9N y ahora el 30N. Esto no es más que el comienzo de algo que puede durar mucho o poco y que dependerá de que tanto los venezolanos estemos conscientes de lo que nos está pasando y al menos actuar de una manera coherente en relación a eso.

No es una conducta racional votar dentro de este estado de cosas aun sabiendo que todas las instituciones, en especial la electoral, están completamente podridas por un régimen que se quiere perpetuar a costillas de nuestra “indefensión aprendida”. Lo que cabe aquí es protestar, de ser posible TODOS LOS DIAS en todas las plazas. Inicialmente lo estaremos haciendo “autoconvocados” en los días que se vayan pautando pero en la medida que el régimen apriete su vocación comunista no tendremos otra alternativa que apretar nuestra protesta cívica en Lucha No Violenta para salirnos de la caja de Seligman, actuando como hombres y mujeres libres sin indefensión alguna.

Caracas, 27 de Noviembre de 2013

Twitter:@laguana

martes, 26 de noviembre de 2013

Rebelión Civil


Por Luis Manuel Aguana

Agradezco al Dr. Alfredo Coronil Hartmann por la publicación en su blog Para rescatar el porvenir, de un importante documento histórico, que no por tener casi 61 años, no está menos vigente. Su autor, Alberto Carnevali, dirigente político en la clandestinidad y Secretario General de su partido, fue el responsable de dar la respuesta política al fraude perpetrado por la dictadura de Perez Jiménez en el proceso para elegir la Asamblea Constituyente en 1952.

Les invito, como bien lo hace también el Dr. Coronil Hartmann, a leer el documento completo titulado “A la Rebelión Civil llama Acción Democrática” fechado el 24 de Diciembre de 1952 (ver http://pararescatarelporvenir.blogspot.com/2013/11/a-la-rebelion-civil-llama-accion.html).

Impresiona el parecido de la circunstancia histórica que se vivió en aquella época que relata con precisión Carnevali, con la realidad que estamos viviendo los venezolanos de estos tiempos. Una dictadura que se roba las elecciones, atropellando la voluntad de un pueblo que quiere un cambio y pretende esconderse detrás de las Fuerzas Armadas para perpetuarse en el poder.

Y ellas, aun sabiendo que se ha perpetrado un fraude electoral descarado, sostienen al dictador. El llamado es entonces al rescate civil de la institucionalidad, propiciando “de la manera más resuelta un permanente estado de rebelión civil, una indesmayable ofensiva de oposición popular, que mantenga agresivos y encrespados los ánimos de todos los venezolanos contra la humillación de que somos víctimas para impedir en todo momento que la dictadura de Pérez Jiménez se estabilice sin resistencia. Una rebelión de opinión que obligue a las fuerzas armadas –mediante la poderosa presión de todos- a libertarse también ellas del deshonroso  dominio personalista y sanguinario de Pérez Jiménez, o que logre abrir ancho cauce para el estallido de una vasta e incontenible insurrección popular, a fin de que sean las honestas manos del pueblo las que despedacen implacablemente el ya desquiciado aparato inmoral del absolutismo.” (Negritas y subrayado nuestro).

Si cambiamos del párrafo anterior el nombre de “Perez Jiménez” por el del Ilegitimo  que nos desgobierna ahora, el comunicado bien lo pudo escribir Alberto Carnevali para la sociedad venezolana de la actualidad.

Carnevali describe un gobierno que se roba las elecciones donde eran mayoría la suma de las fuerzas opositoras, que discrimina políticamente y mantiene presos políticos, que posee bandas policiales que atropellan hogares y vejan familias, que entrega nuestros recursos y asesina a dirigentes, modificando a su favor los resultados electorales. Y para rematar este panorama, la alta oficialidad de las Fuerzas Armadas está consciente que el gobierno ha perdido las elecciones pero lo sigue sosteniendo en el poder, ¿no les parece a ustedes que ese cuadro es idéntico al que estamos presenciando en la Venezuela del 2013 después del 14A?

La única diferencia aquí estriba en que Carnevali, en nombre de su partido, exhorta al resto de los factores políticos a trabajar conjuntamente para la recuperación de la soberanía y llama a hacer causa común con todos los hombres y mujeres de la nación, sean estos pertenecientes o no a partidos políticos. Un llamado de esta naturaleza es impensable en la Venezuela de hoy por parte de una dirigencia partidista que ha hecho causa común con el régimen para ser beneficiarios de las limosnas que este les dispense después de unas elecciones con resultados cantados.

Es claro que debemos ubicarnos en el tiempo donde organizaciones políticas de la talla moral de la Acción Democrática de 1952 tenían ascendencia cierta para hacer un llamado de esa naturaleza. Alberto Carnevalli, sucesor en el puesto de Leonardo Ruiz Pineda, asesinado por los esbirros de la dictadura, desde la resistencia convocaba a lo que podría llamarse la sociedad civil de entonces a rebelarse contra ese estado de cosas.

Y tenía moral suficiente con que hacerlo. No solo estaba arriesgando su vida, sino que había trazado una raya entre lo que era y no era aceptable para un país. No me imagino a Alberto Carnevali llamando a participar de nuevo en otro juego electoral de la dictadura luego de ese fraude en descampado de un régimen perfectamente caracterizado. Por eso es que hay que aprender de la historia y de la moral política de los verdaderos liderazgos.

Venezuela se encuentra en una encrucijada muy grave en donde quienes deben asumir su responsabilidad han desmerecido la herencia histórica de hombres como Alberto Carnevali y Leonardo Ruiz Pineda. Dirigentes como ellos construyeron nuestra institucionalidad política y condujeron el proceso que terminó con la dictadura de Marcos Perez Jiménez.

El día de hoy nos toca a todos seguir ese ejemplo pero solitarios porque lamentablemente ya no contamos  con esa dirigencia política que sabia diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto. De tenerla, desde hace tiempo hubieran desempolvado este comunicado, dando un paso al frente para conducir de nuevo una gesta de emancipación de un régimen que ha hecho tanto daño a los venezolanos. De esa herencia solo nos queda entonces la Rebelión Civil.

Sin embargo, si bien es cierto que los partidos políticos han sido secuestrados por su dirigencia, como en el caso del partido de Carnevali,  pactando y negociando con el régimen su permanencia, ese no es el caso de su militancia, ni de los hombres y mujeres del pueblo venezolano que fueron convocados una vez en 1952 para salirle al paso a una dictadura que le niega hoy una medida humanitaria a un preso político que se muere de mengua en sus cárceles.

Si en 1952 existió una organización de la población que fue capaz de luchar cívicamente contra ese régimen, sin contar con Internet, ni SMSs, ni Twitter, ni videos digitales, ni correos electrónicos ni globalización de la información, no veo porque nosotros no podamos hacerlo aun mejor. Se requiere entonces de esa conciencia ciudadana de aquellos tiempos, que invocó Alberto Carnevali:

“…debemos iniciar con audacia una implacable ofensiva de rebelión civil en todos los campos de la vida nacional. Todos los partidos, todos los hombres y mujeres, todos los venezolanos dignos debemos desatar una coordinada y certera acción multitudinaria hasta lograr oponer a la tiranía en la mortal disyuntiva de reconocer la soberanía nacional o aniquilar sangrientamente a todo el pueblo venezolano. Actuaremos realistamente. Con clara conciencia de que nuestro poder no es otro que el gran poder de un pueblo enardecido porque se le ha vejado y se le ha humillado brutalmente. Actuaremos sin la menor vacilación. Sabedores de que el pueblo no tiene armas de guerra porque siempre confió ingenuamente en que las armas de los cuarteles eran para defenderlo y ahora están siendo utilizadas en su contra. Pero convencidos de que la gran tragedia política que entristece a la nación por permitir plantearse el dilema simplista de combatir con armas o no combatir…”

Este llamado a la Rebelión Civil abierta de la sociedad en contra de la dictadura, así como el llamado a “una rebelión de opinión que obligue a las fuerzas armadas –mediante la poderosa presión de todos- a libertarse también ellas del deshonroso  dominio personalista y sanguinario”, tiene plena vigencia en Venezuela y debemos reivindicarla todos en honor del legado de venezolanos íntegros como Alberto Carnevali. Esa vigencia es lo asombroso de quienes entienden su momento histórico.

Gracias a los medios de difusión con los que ahora contamos es posible hacerles llegar a miles de ciudadanos un mensaje como este, así como otros muchos de igual tenor. Imagínense las limitaciones de comunicación que tenían en 1952, que compensaban con papeles escritos con estas ideas, y con mucha gente dispuesta a distribuirlo a riesgo de su seguridad personal. Ese es el espíritu y la memoria histórica que debemos rescatar aquí.

Esa “coordinada y certera acción multitudinaria” ya se está manifestando en las calles. La vimos el 9N, la veremos de nuevo el 30N y la seguiremos viendo hasta que nos liberemos de esta nueva dictadura, ya no por la acción de los partidos sino porque el venezolano no se ha dejado someter nunca por autoritarismos, y además porque, como concluía Carnevalli, “Contamos en resumen, con preciosos factores humanos y morales suficientes para dotar nuestra capacidad de combate de un poderío mil veces más fuerte que las mas aceradas corazas del despotismo.”. Entonces, ¿Qué estamos esperando?

Caracas, 26 de Noviembre de 2013

Twitter:@laguana