Por Luis Manuel Aguana
En un pequeño país, de cuyo nombre no quiero
acordarme, un perverso Comité Nacional de Elecciones (CNE) preparó un fraude
masivo en contra de su oposición colaboracionista. El arreglo era que ella
aceptara los resultados pero tenían un problema técnico. Era necesario que
todas las Actas de Escrutinio coincidieran con el resultado final en la totalización,
de manera tal que todo el país aceptara sin chistar los resultados.
Había maquinas computadoras en todas las mesas
de votación que contabilizaban los votos. El perverso CNE de ese país tenía un
reglamento electoral que fue modificado de manera ilegal pocas semanas antes
del proceso electoral, pero eso no le importó a nadie. Allí existía un
artículo, donde expresamente se indicaba que las mesas debían sortearse después
de que todas hubieran cerrado en el centro electoral porque solamente se abrirían
para auditoría un 54% de ellas, dejando cerradas el 46%.
Así convencieron a los electores de ese
pequeño país de que si se contaba el 54% y se contrastaba con el resultado de
la máquina, todo sería transparente (¿?). Vana ilusión ya que los inocentes electores
no contaban con la astucia del CNE que encontró una manera de modificar las
Actas de las mesas que no serían auditadas a favor del dictador de ese país y a
quien el Jefe del CNE reportaba.
Fue así como idearon este sencillo procedimiento de 10 pasos para engañar a todo el mundo, con la colaboración de los ingeniosos técnicos informáticos de un país que los había invadido algunos años antes. Y así, como se los estoy contando, se lo plantearon al Jefe del CNE quien maravillado dio su aprobación:
ANTES DEL DIA DE LAS ELECCIONES
1.- Se establecen secretamente en una Sala
Técnica en el CNE, previo a las elecciones, los resultados deseados para todas
las mesas por cada máquina. Se utiliza un programa que genera números para cada
máquina en todo el país, con la oposición colaboracionista siempre en minoría;
2.- Cada conjunto de números se inserta en un
programita que imprime “solo resultados” en exactamente el mismo formato que lo
hace el programa de la máquina electoral y que fue auditado por la oposición;
3.- Se establece la logística para que cada
máquina de votación posea ese programita, que será activado a voluntad del
operador de la máquina de votación al momento del cierre de la mesa.
EL DIA DE LAS ELECCIONES – CENTROS AL CIERRE
DE LA MESA
4.- El operador pone a funcionar el programita
que imprime las actas adulteradas con los resultados establecidos al cierre de
la mesa, SOLAMENTE SI SABE PREVIAMENTE QUE NO SERA AUDITADA. Esto se logra con
la violación del artículo del reglamento electoral mencionado, sorteando
primero y cerrando la mesa después (eso se logra con el auxilio de gente muy
violenta en los centros). Los resultados de la mesa igualmente serán
transmitidos;
5.- Avisa a la Sala Técnica via celular que la
máquina con el ID correspondiente logró realizar el procedimiento alternativo;
6.- Si el operador NO LOGRA SABER si su mesa
será auditada, deberá correr el procedimiento regular, sin el programita.
7.- Si NO HAY TESTIGOS DE LA OPOSICION EN EL
CENTRO se corre el procedimiento alternativo en todas las mesas.
EL DIA DE LAS ELECCIONES - SALA TECNICA DEL
CNE
8.-
Como ya los resultados deseados de cada Mesa se hallan previamente
almacenados en una base de datos alternativa, los operadores de la sala reciben
las llamadas o mensajes de los operadores de las máquinas de los centros a
nivel nacional acerca de cuáles maquinas corrieron efectivamente el
procedimiento alternativo;
9.- Los operadores de la Sala Técnica proceden
a sobreponer los resultados recibidos validos de las Mesas NO AUDITADAS de todo
el país, en la base de datos de resultados en el lugar correspondiente, con los
nuevos valores que ya fueron impresos en las mesas con el procedimiento
alternativo en el cierre;
10.- Al momento de la totalización,
coincidirán perfectamente los resultados de cada mesa, tanto los de las mesas
auditadas como los de las no auditadas, con las Actas automatizadas de
escrutinio. Fraude Consumado.
Observaciones:
a.- No necesitan cambiar los votos almacenados
en las máquinas. De hecho el programita no tocaría nada en la máquina de
votación, solo se utilizará el impresor del equipo. Los resultados que se
grabaron en el transcurso del acto de votación siempre se transmitirán en todos
los casos, ejecutándose normalmente esa parte del proceso. Asimismo no
necesitan alterar los resultados en el camino hacia el CNE;
b.- Los resultados que se imprimieron en las
Actas de Escrutinio coincidirán en todas las máquinas con los resultados
finales dados por el proceso de totalización del CNE;
c.- No hay manera de conseguir ese programita
en las máquinas porque puede esfumarse luego de corrido;
d.- No hay auditoría que pueda impedir al CNE
colocar un programita escondido dentro de miles dentro de una computadora como
lo es la máquina de votación. Incluso el programita lo puede llevar el mismo
operador de la máquina en su kit de trabajo e instalarlo cuando arme el equipo.
e.- No hay nadie de la oposición
colaboracionista que garantice que la base de datos de Actas recibidas de los
centros no se toque después que lleguen las Actas a los servidores del CNE.
f.- Mientras más votantes fantasmas haya en la
base de datos del registro de votantes de ese pequeño país, más votos chimbos
habrá para repartir en las Actas a favor del dictador.
Cualquier parecido con la realidad de personas
e instituciones, vivas o muertas, reales o ficticias en la República
Bolivariana de Venezuela es pura coincidencia y producto de una ferviente
imaginación, aun cuando esa realidad sea superada por la espantosa situación de
este pequeño país de cuyo nombre no quiero acordarme…
Caracas, 2 de Febrero de 2013.
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana