Por Luis Manuel Aguana
Aclaratoria importante: la
perspectiva de todos los Ejes que serán descritos en esta y en las próximas
notas es aquella de quien esto escribe. Es la visión de un venezolano, como
ustedes, interesado en su país y que ve en ese Proyecto un posible enfoque el
problema y su solución. De esta manera empiezo dando mi opinión acerca de cada Eje
de ese Proyecto presentado al país (ver Proyecto País – MID Táchira en https://docs.google.com/file/d/0B6yI0gUROWzDLXdIMzljSFVtWmc/edit?pli=1).
Escribiré en primera persona ya
que es más fácil describir el punto. En el año 2006 participe en la fundación
del Consejo Comunal (CC) de la comunidad donde vivo, luego de la aprobación de
la Ley de los Consejos Comunales de ese año. Fui, conjuntamente con otros
vecinos, promotor de ese Consejo Comunal a contrapelo de la tesis de muchos de
que no debíamos “hacerle el juego al gobierno”.
Resido en una urbanización que
particularmente no se caracteriza de ser afecta al oficialismo y las razones
que convencieron a la comunidad para la fundación de ese CC fueron
fundamentalmente el hacerle un frente civil a cualquier atropello chavista,
como en efecto ocurrió posteriormente, con una participación vecinal mayoritaria.
Fundamos el CC, no porque
creyéramos que esa ley fuera legítima (de hecho es inconstitucional) sino
porque había la necesidad de poseer la entidad vecinal que representara
realmente, con los votos de los propios vecinos, el sentir de la comunidad,
independiente de quienes ocuparan los cargos de Alcaldes, Gobernadores y
Concejales.
Se trataba pues de fundar, basados
en la participación de la comunidad, el “ente legal” que nos representara.
Posteriormente, como esperábamos, no fuimos “legalizados” de acuerdo a la Ley de
los CC del 2010, así como muchísimos CC en todo el territorio nacional, por no
ser considerados “del proceso”, ni socialistas, razón por la cual muchos de
ellos de “corte socialista” están representando ilegalmente a sus comunidades
sin contar con sus votos vecinales, porque se han impuesto a través de una Ley
inconstitucional.
Hago esta acotación inicial porque
así como en mi comunidad, la mayoría de los vecinos no se identificaban con el
proceso chavista y no fuimos “reconocidos”, otras comunidades afectas al oficialismo
si lo hicieron de manera legítima, es decir con los votos de sus comunidades.
El chavismo distorsionó el
abordaje del problema comunitario intentando desmontar la figura constitucional
del Municipio a favor de una entelequia que no está en la Constitución, en un
intento de abordar los problemas de las comunidades y de controlar el país de
una manera centralizada a través de un supuesto Poder Popular inconstitucional,
dependiente del Presidente de la Republica. Perverso, ¿verdad? ¡Utilizar las
necesidades de la gente para inocular el comunismo a través de una forma administrativa
cubana, justo en la médula!
De esta manera el gobierno
distrajo ilegalmente recursos del Situado Constitucional para entregárselos
directamente a las comunidades través de estos Consejos Comunales, y por
supuesto, sólo a aquellos “reconocidos” por su Ley irrita. Y aun cuando haya
podido tener una remota intención positiva de entregar directamente recursos a
las comunidades para que estas atendieran sus propios problemas, estos recursos
nunca se concretaron en obras sino que fueron a parar sin ningún control a los
bolsillos de quienes controlaban esos CC.
Entonces, por una parte se
debilitó a la Institución municipal y constitucional que tiene las estructuras
fundamentales para atender la situación de los municipios y de las personas que
viven en él, sustrayéndole sus recursos, y por otra se creó una estructura político-clientelar
del partido de gobierno que solo atiende a líneas que no tienen nada que ver
con sus comunidades. Toda una distorsión inaceptable que ha sido una de las
causas más importantes del agravamiento de los problemas más cercanos de las
comunidades: mantenimiento de su infraestructura física, seguridad, servicios
de aseo y agua, etc.
¿Cómo enfrentar eso? ¿Cómo desmontar
esa estructura viral que ha corrompido la manera de administrar de los problemas de la gente? La
respuesta sigue siendo acercar el poder al ciudadano, pero con un enfoque
completamente diferente al planteado por el régimen. Si el Artículo 158 de la
Constitución establece “La descentralización como política nacional, debe
profundizar la democracia acercando el poder a la población”, no le deja más
recursos a las regiones que “el producto de la venta del papel sellado y
estampillas” (Art. 164-a).
Y eso es una clara deformidad de
la actual Constitución. No se puede concebir tener el poder político-Alcaldías
y Gobernaciones-, sin disponer de los recursos independientes del poder central
que desarrollen las regiones. No puede ser que el país entero dependa de un
solo funcionario-el Presidente de la Republica- para funcionar y desarrollarse.
Y este es un asunto que debe ser encarado por el poder constituyente si los
representantes de la ANC de verdad representan a las Regiones, los Estados y los
Municipios.
En este sentido el Proyecto País plantea
tres requerimientos:
1) Autarcía para los Estados, lo
que implica la asignación constitucional de los tributos que se generen
localmente: IVA, Impuestos de Sucesiones y Donaciones, 50% de los gravámenes de
importación y exportación, impuestos sobre transacciones inmobiliarias, 50% del
ISLR, impuesto al capital y a la producción, impuestos territoriales sobre
predios rurales, impuestos de Notarías y Registros. Deberá establecerse un mecanismo
que compense a aquellos Estados que no generen suficiente ingreso a su población
por su estadio de desarrollo hasta que estos se balanceen adecuadamente.
2) Descentralización
Constitucional de Competencias: Profundizar el proceso de descentralización,
llevando a las Regiones y Estados el régimen de administración de las minas de
minerales no metálicos, el Sistema Financiero Público, transferencia de la
propiedad de tierras baldías a los Estados Regiones y Municipios, con la
eliminación subsecuente del INTI. Transferencia de los inmuebles propiedad de
la Nación a los Estados, Regiones y Municipios (con excepción de aquellas de
valor estratégico y Seguridad del Estado).
3) Autonomía Regional, con la
transferencia definitiva a los Estados, Regiones y Municipios de: Educación
Cultura y Recreación; sistemas de abastecimiento de aguas blancas y servidas;
Ambiente y Recursos Naturales; Urbanismo y Ordenación del Territorio; Régimen y
aprovechamiento de las salinas y ostrales; Administración de los puertos y
aeropuertos; Creación del Sistema Universitario Regional y OMPSU Regional;
Organización de la Policía Estadal y Municipal; Sistemas de salud y seguridad
Social; Administración de los sistemas de energía eléctrica; Construcción de
viviendas, producción agrícola, ganadera y pesquera y forestal; Administración
de las vías terrestres Estadales; Administración de Sistemas de Transporte
Masivo; Administración del Espectro Electromagnético a nivel regional;
Constitución Regional aprobada por el Parlamento Regional; Creación del Fondo
de Compensación Territorial coordinado por el Senado de la República. (Tomado del Proyecto País – MID Táchira)
Este Eje reafirma el poder político
y económico de las Regiones, Estados y Municipios, dándoles poderes reales para
la administración a su nivel de los problemas de la gente. Nada de echarle la
culpa al gobierno central de si hay o no agua, o si las calles están rotas, o
si no hay seguridad en ellas, o si no hay luz. Eso deberán reclamarlo los
ciudadanos a sus Alcaldes y Gobernadores en un acomodo real de las
responsabilidades de los administradores regionales.
Sin embargo, esto no es
suficiente. Partiendo que la unidad fundamental de administración es el
Municipio-porque es lo constitucional y universalmente aceptado-, se deberá
realizar un estudio a nivel nacional de la verdadera situación de la población
y ubicación de las personas estableciendo los Municipios necesarios para cada
Estado. La actual estructura de 335 Municipios a nivel nacional esta
desactualizada y debe ser revisada profundamente para generar una nueva más
acorde con las necesidades de la población. De allí el planteamiento de segundo
Eje del Proyecto: El Municipio Fuerte
que revisaremos en la próxima nota.
Caracas, 24 de Junio de 2013
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana