Por Luis Manuel Aguana
Como lo reseñe en mi nota anterior los acontecimientos van
rápido. En efecto, ocurrió lo que esperaba sin ser el profeta Dos Santos. Se
derramó sangre de los venezolanos, siendo la represión más violenta en el
interior del país. Noticias provenientes del Zulia dan cuenta de la paliza casi
mortal que le propinaron los colectivos violentos del régimen al Padre Palmar
en el Zulia. Los casos de Zulia, Barinas, Apure, Mérida, Sucre, Táchira, Nueva
Esparta y Aragua confirman la violencia sin límites con la cual el régimen a
través de la Guardia Nacional, no desperdició la oportunidad para ofrecer “gas
del bueno” y perdigones a las manifestaciones pacíficas de la “Toma de
Venezuela” a contravía de las disposiciones legales que lo prohíben de manera
expresa.
Pero, ¿cuál fue el balance de ese primer día de
manifestaciones en la calle de la oposición, más allá de la violencia esperada
del régimen? A mi juicio sumamente deficiente, y no precisamente por la
cantidad de personas en la calle. De acuerdo a una nota periodística de Tal
Cual, la dirigencia de la MUD no estaba clara en cual era el siguiente paso a
seguir (ver Los secretos de la tarima de la MUD en la Toma de Venezuela, en http://www.talcualdigital.com/Nota/134077/los-secretos-de-la-tarima-de-la-mud-en-la-toma-de-venezuela).
Por un lado María Corina Machado decía que había que
continuar la marcha hacia Miraflores, mientras Henry Ramos Allup indicaba
“juicio político” y marcha a Miraflores la semana entrante. Por otro lado
Lilian Tintori, Diana D’Agostino y Maria Corina Machado discutían de la
conveniencia de marchar al Palacio Federal Legislativo, mientras Juan Guaidó de
Voluntad Popular, intervenía diciendo que esa marcha a Miraflores “no estaba dentro del acuerdo”. Todo eso
ocurría montados en una tarima frente a la multitud.
Esa política, al mero estilo de Chávez de decidir cosas
trascendentales frente a las cámaras, sin estudio ni discusión previa, porque “se
me acaba de ocurrir”, es lo que nos ha llevado de fracaso en fracaso en 18
años. El solo hecho de haber dicho que se “iría a Miraflores” el 3 de Noviembre,
aparte de ser de una ingenuidad criminal, por decir lo menos, traduce una
improvisación intolerable de aquellos que dicen conducir la oposición de
Venezuela. Pero si es de otro modo, sería la mayor traición hecha a los
venezolanos en lo que va del presente siglo.
¿Qué esperaban que hiciera el gobierno ante semejante
anuncio? ¿Quedarse de brazos cruzados? Posiblemente tengamos una suspensión de las
garantías constitucionales o un estado de excepción en Caracas ese día o antes.
Pareciera que tenemos al frente de la conducción política opositora a un atajo
de novatos justo en el momento político más crucial de nuestra historia contemporánea,
donde el país pide a gritos dirección, firmeza y seriedad en las actuaciones de
los dirigentes políticos. Que falta nos hacen un Betancourt, un Villalba o un
Caldera.
Pero seguimos entrampados en el problema. Debo insistir en
la conclusión de mi nota anterior (ver De un Revocatorio muerto a un Acuerdo
incompleto, en http://ticsddhh.blogspot.com/2016/10/de-un-revocatorio-muerto-un-acuerdo.html).
Si lo que busca la oposición oficial reunida en la MUD es negociar con el
régimen, utilizando a la población como carne de cañón, están partiendo del
supuesto equivocado de que el régimen le importa derramar sangre. Lo han
demostrado más de una vez, en especial el 2014. Incendiaron y pusieron en
estado de sitio al Estado Táchira, mataron gente, hirieron y encarcelaron a
cientos de manifestantes en todo el país. ¿Por qué cree la MUD que ahora será
diferente?
Se me hace muy sospechoso que esa “marcha a Miraflores” sea
lo último que esgrima nuestra oposición luego del fracaso del Referendo
Revocatorio. Razón tienen quienes aseveran que el nivel de improvisación del 26
de octubre se asemeja al que hubo el 11 de abril de 2002, con la diferencia que
en esa oportunidad la gente no esperó por ningún dirigente opositor y se fue
sola al Palacio de Misia Jacinta, sin saber que los esperaba un pelotón de
fusilamiento.
Y digo muy sospechoso porque estoy convencido que ese
dialogo está siendo buscado con la misma desesperación tanto por el régimen
como por la oposición oficial y se le monta un teatro a la multitud para
justificar que si se quiere marchar pero el régimen se opondrá violentamente,
por lo que hay que negociar con ellos una “salida” conveniente para ambas
partes. La oposición intenta, como ya se rumorea insistentemente, una
mega-elección a mediados del año 2017, con la amenaza de continuar en las
calles. Esa estrategia opositora de presión de diálogo tiene la grave
desventaja de que en el ínterin se muere gente a manos del régimen, sin contar
con el hecho de que dialogar con delincuentes es rechazado abiertamente por los
venezolanos. El único dialogo posible debe ser entre los mismos venezolanos a través
de sus representantes legítimos. Hay que rechazar entonces ese diálogo ensangrentado.
¿Qué hacer? Al régimen le importa un pito seguir matando
gente en las calles. Nuestra propuesta es convocar al Poder Constituyente
Originario. ¿Y cómo se hace eso? Organizándonos para recoger muchísimo más del
15% de manifestaciones de voluntad establecido en el Artículo 348
constitucional para la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente de carácter
Originario. Y al tenerlas, exigir de quienes tienen la responsabilidad
constitucional de acatar las decisiones del Depositario de la Soberanía, las
Fuerzas Armadas, dispongan de lo conducente para que esa convocatoria se haga
efectiva de acuerdo con las reglas que ese mismo Soberano haya ordenado en su
convocatoria, sin la intervención de los Poderes Constituidos.
De nuevo, convocar primero al Depositario de la Soberanía y exigir
después pacíficamente su cumplimiento y por encima de los Poderes Constituidos,
a quienes constitucionalmente les corresponde obedecer. Hay que esgrimir, no
una convocatoria multitudinaria de un día, sino 7 millones de firmas como mínimo
-que fue la votación del 6D- para luego manifestar pacíficamente el acatamiento
de esa voluntad popular por parte de la Fuerzas Armadas.
En este punto –si han llegado tan lejos leyendo- habrá
muchos de ustedes que dirán, “este tipo si es ingenuo creyendo que los
militares harán caso a eso”. Se sorprenderían. Las Fuerzas Armadas no son solo
su Alto Mando corrupto. Ya se demostró el 6D-2015 cuando los militares
torcieron el curso de los acontecimientos aceptando la voluntad de la mayoría
en las elecciones parlamentarias (ver ¿Ganó la MUD o perdió el Gobierno?, en http://ticsddhh.blogspot.com/2015/12/gano-la-mud-o-perdio-el-gobierno.html).
De ese modo no seríamos nosotros quienes pongamos el pecho
para que nos disparen los colectivos armados del régimen en una marcha a
Miraflores, sino los militares poniéndole orden al caos, que estoy seguro harían
si se demuestra con firmas fuera de cualquier duda, que existe la voluntad
mayoritaria de los venezolanos de un cambio en paz, dándole un curso constitucional
a un llamado Constituyente.
En la Alianza Nacional Constituyente (http://ancoficial.blogspot.com/) ya
tenemos las Bases Constituyentes de ese llamado, la Planilla de Recolección de
Firmas y los procedimientos para la convocatoria. Y aunque falta la voluntad de
quienes aún persisten en dialogar con delincuentes, insistiendo que el RR fue
el último recurso, no así la de aquellos que si creemos que el Pueblo de
Venezuela es capaz de resolver sus diferencias en paz, utilizando el verdadero último
recurso: la decisión final del Depositario de la Soberanía de convocarse para
una Asamblea Nacional Constituyente de carácter Originario. Ese es el único y
verdadero diálogo, cualquier otro es un engaño a la población y viene
completamente manchado de sangre.
Caracas, 28 de Octubre de 2016
Blog: http://ticsddhh.blogspot.com/
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana