jueves, 21 de junio de 2012

Tras la huella de las huellas

Por Luis Manuel Aguana

El CNE puso a correr a todo el mundo por las huellas dactilares faltantes para el próximo proceso electoral. La definitiva imposición de un modelo técnico de votación innecesario, que ha generado las suspicacias de todos, prevaleció por encima de todas las objeciones. Como ya he señalado en otras oportunidades, están aplicando la misma que aplicaron en el 2004 cuando se impusieron por primera vez las captahuellas, generando toda clase de retrasos al proceso y que al parecer es lo que también están buscando en esta oportunidad. Tendremos los venezolanos que armarnos de la paciencia de esa ocasión y esperar horas para ejercer nuestro derecho al voto.

Ahora bien, el proceso de las esperas se complicará con el anunciado faltante del 15% de las huellas del nuevo sistema SAI que se aplicará, de acuerdo a lo informado por Carlos Quintero, Director de Informática del CNE, a Vicente Bello del Comando Electoral de la oposición. De acuerdo a ese porcentaje, faltarían por capturar 2.835.083 huellas, basándonos en un padrón electoral de 18.900.055 personas.

El CNE ha informado de un operativo para capturar las huellas faltantes, pero como todos sabemos, lamentablemente ocurrirá lo que siempre ocurre con estas cosas: faltarán huellas para el proceso por diferentes motivos, ya bien sean técnicos y humanos, dejando un porcentaje que puede ser bien alto, al que se le dificultará su voto, trancando de esa forma las colas de las mesas. Bastará que una sola de esas personas no sea “leída” por el lector cazahuella para que el proceso subsiguiente retrase una cola en varios minutos, entre volver a intentarlo, desistir, llenar su planilla y volver para votar. Porque no es que esa persona dejara de ejercer su derecho, todo lo contrario. No se le puede impedir votar porque una máquina diga que no está registrada su huella y a su vez ésta sí se encuentre en un cuaderno y posea su cedula de identidad. Con lo cual una persona NO REGISTRADA es un potencial retraso para las colas.

En consecuencia, el tema está de nuevo en retrasar que votemos, dándole tiempo al gobierno, que si sabrá de las transmisiones del cierre de las mesas antes que la oposición-igual que en el 2004-, para que se ejecuten los planes de despliegue del oficialismo. Y ya indicamos en este blog porqué lo sabrán. Entonces, guerra avisada no mata soldado.

¿Qué podemos hacer nosotros, los ciudadanos, ante esta clara estrategia ventajista del gobierno? En primer lugar, impedir que las colas se retrasen, si existe algo que todos nosotros podamos hacer para que eso no ocurra. Mi sugerencia inmediata es que todo el mundo llame al CNE al 0800VOTEMOS (8683667) para consultar el estatus de su huella en el organismo y concurrir al centro más cercano de su domicilio que publicará el organismo electoral e IR A ACTUALIZAR SU HUELLA, en el caso de que le digan que lo haga. Esto, más que publicidad gratuita al CNE, es una vacuna para evitar que alguno de nosotros se convierta en un factor de retraso y seamos quienes le demos al gobierno la posibilidad de ralentizar las colas el 7 de Octubre. Nos conviene a todos hacerlo.

En segundo lugar, de ser alguno de nosotros “premiado” por la cazahuella, tomárselo con soda, morderse la lengua y salir inmediatamente de la cola para permitir que el siguiente pase, sin pérdida de tiempo. El placer venezolano de discutir de porqué no estoy, no está permitido en esta oportunidad. Los retrasos serán capitalizados activamente por el gobierno con lo cual cada uno de nosotros debe ser un agente de agilización de las colas que se armarán porque todo el mundo saldrá masivamente a sacar este bastardo de la Presidencia de la Republica.

Voy ahora con lo que si puede y debe hacer el Comando Electoral de la Mesa. Hay serias dudas, bien expresadas por Ludwig Moreno de Voto Limpio, en el sentido de porqué, en lugar de llamar a quienes tienen problemas con las huellas- ellos tienen hasta nuestros teléfonos celulares-, van a poner las cazahuellas abiertas al público para la captura, dejando la posibilidad de registrar las huellas de los multicedulados a quienes posiblemente se les creó una cédula sin estar presentes, por lo cual no se les capturó la huella para el SAI. Es una preocupación muy válida. Mas sin embargo, no objeto el hecho de que se coloquen los puntos de captura de huellas al público Esto ES NECESARIO porque por su declarada incompetencia, no previeron en la compra de esa tecnología que se garantizara el traspaso de las huellas que ya ciertamente habían capturado en previos procesos electorales. Lo que me preocupa es que no se lleguen a realizar las auditorías de huellas e ir con este sistema antes del cierre del RE.

Un auditoría básica es la de comprobar, sin lugar a dudas, que haya un solo registro de huella por persona. Es decir que no hayan dos números de cedula con la misma huella. Eso mataría al multicedulado inmediatamente. Esa auditoría es computacional y debe ser realizada con presencia de testigos técnicos de los participantes del proceso, con programas abiertos verificables por todos.

Eso sí se puede hacer y se debe exigir, como entiendo que ya están haciendo los técnicos electorales del Comando Venezuela sobre la base de los principios de unicidad (lo que ya indiqué, una-huella-un-elector), universalidad y patrón estándar de calidad. Desde aquí me uno a esa exigencia al CNE: No se puede ir a ese proceso con el SAI sin esa auditoría previa al cierre del RE. Sin eso, el gobierno nos mete a los multicedulados del inflado del RE y posiblemente por allí se vaya un buen porcentaje de votos ilegales para el gobierno.

Otra importante exigencia es el precintado de la tinta indeleble. Esa es otra seguridad adicional del proceso para que no se vote más de una vez. Aun no ha habido respuesta del CNE a este requerimiento realizado por las ONG’s del tema electoral durante el Seminario de El Nacional el 23 de Mayo. Sin embargo, no somos nosotros desde la acera de la sociedad civil quienes deben hacerlo, es el Comando Electoral de la Mesa. Si lo han hecho al CNE, no lo sabemos. Pero si no lo han hecho, es hora de ponerse las pilas y hacerlo. Es sumamente importante tener esa seguridad adicional, que se hace insustituible si no se logra realizar la auditoría de huellas por alguna razón.

Todos desconfiamos de este proceso y debemos llenarnos de auditorías y controles para poderlo tragar. Sin embargo, lo más importante es que vayamos a él decididamente. La proeza de sacar a este dictadorzuelo con votos será digna de contarse en el futuro como solo se ha contado la gesta libertadora. Nos podremos quejar de la forma pero el fondo es infinitamente más importante. Convirtámonos en uno solo para lograrlo…

Caracas, 21 de Junio de 2012

Blog: http://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana

viernes, 15 de junio de 2012

Cheque en blanco

Por Luis Manuel Aguana

Hubo una época en que la gente confiaba en las otras personas, al punto que con su sola firma cualquiera podía retirar el dinero de los bancos. Es decir que un papel sin valor se convertía en uno con el valor que anotaba el dueño de la firma y éste era capaz de pagar con ese papel porque las personas eran honorables y tenían credibilidad.

Con el tiempo, los estafadores acabaron con eso. Suplantaron las firmas de las personas honorables y cobraban su dinero. Entonces empezaron los controles. No era suficiente la sola firma, había que demostrar que quien firmaba, no sólo era el dueño de ese papel, sino que también debía demostrar que había “fondos” detrás de esa firma. Y se construyó, sobre algo que debía ser sencillo que era la confianza y la honorabilidad de una persona, toda una plataforma técnica complicadísima dirigida a sustituir lo que es humanamente insustituible: una persona honesta y honorable.

De ésa misma época salieron los contratos de palabra. Si alguien decía que cumpliría con alguna obligación o acuerdo, no era necesario que se hiciera ningún contrato. Bastaba la palabra. De allí el término “hombre de palabra” que se le acuñaba a alguien que cumplía lo que decía, sin más. La vida se tornaba así sencilla y más humana. Pero como con el tiempo estas personas se hicieron cada vez más escasas, la gente se vio en la necesidad de sustituir “la palabra” por la garantía de cumplimiento. Y surgieron los abogados cuyo trabajo consistía en redactar documentos que sustituían la honorabilidad y la palabra de una persona, porque así se “garantizaba” el cumplimento de los acuerdos.

Parecía que antes las cosas eran más sencillas cuando la gente tenía credibilidad y cumplía. Se usaba la expresión “dar un cheque en blanco” cuando por la confianza que se le tenía a la persona, se le extendía ese papel firmado sin colocar nada en él para sólo ser llenado posteriormente con el monto y el beneficiario. Ahora los bancos están matando a los cheques como reliquia del pasado, en beneficio de las tarjetas electrónicas. Ya la confianza quedó como una característica más propia de los sistemas tecnológicos que como una cualificación moral de las personas.

Cuando mencioné en mi nota anterior en este blog (ver “El otro Foro” http://ticsddhh.blogspot.com/2012/06/el-otro-foro.html) que me había sentido bien satisfecho con la explicación técnica de cómo se asegura con el nuevo SAI el secreto del voto y que no tenía razones para dudar de quienes dijeron allí haber visto el código de esos programas, lo hice basado en esa confianza que se daba cuando en la antigüedad se cerraba un trato con un apretón de manos, de buena fe. Yo no he visto esos programas, ni necesito verlos si existe esa confianza. Y es así, como todos los venezolanos lo estamos haciendo, confiando en que se están haciendo todas las cosas bien para que nuestros votos sean cuidados como corresponde. Pero la gran pregunta que muchos de nosotros nos hacemos todavía es: ¿es suficiente lo que se está haciendo? La respuesta es una sola: nunca es suficiente con este gobierno delincuente.

Abierta la discusión pública acerca de las condiciones electorales, es un hecho que le estamos dando al Comando Venezuela y a sus técnicos electorales un cheque en blanco. Estamos confiando que los procedimientos que están adoptando para defender el voto, son suficientes. Y allí es donde se plantea la discusión.

No es que el Comando Venezuela y sus técnicos nos estén embaucando y estén vendidos. Si pensáramos eso, entonces abandonemos esta discusión y sigamos otro camino. Muchos de nosotros nos hemos paseado por esa posibilidad en algún momento. El gobierno está lleno de dinero para comprar a quien sea, a cualquier costo. Y ciertamente hay personas dentro de ese grupo técnico que bien valdría la pena de investigar para ver si han cambiado sus condiciones de vida, y que ciertamente no deberían estar allí, pero están. Pero esa, aunque importante, no es la discusión aquí.

La discusión aquí, a mi modo de ver, no es si el gobierno a través de su Ministerio de Elecciones-CNE, nos vaya a hacer trampas. Lo van a intentar, no me cabe duda. El solo hecho de haberse gastado 45 millones de dólares en equipo electoral innecesario nos da cuenta de esto. Y habrán comprado las voluntades técnicas y no técnicas necesarias para intentar un fraude. La discusión aquí es si hemos peleado los suficientes controles técnicos y procedimentales para detectar los comportamientos fraudulentos que sabemos que se presentarán en el proceso del 7 de Octubre y aplicar con fuerza los que se han conseguido.

Ya nos pasaron el “strike” de las captahuellas pegadas a la máquina electoral. Eso, de suyo, generará una desconfianza a votar de los empleados públicos, aunque los técnicos digamos una y mil veces que se protegerá el secreto del voto. Han logrado, hasta ahora, lo mismo que logró Jorge Rodríguez cuando las introdujo por primera vez en el Revocatorio, quebrar la confianza. Y además, esos aparatos innecesarios provocarán un colapso en las colas similar al del año 2004.

Una de las propuestas hechas el 23 de Mayo por las ONGs en materia electoral en el Foro de El Nacional fue precintar las botellas de tinta. ¿Qué pasó con eso? También se sugirió una auditoría rápida al RE de un pequeño subconjunto, estadísticamente seleccionado, para detectar las fallas denunciadas. Asimismo hubo otra hecha desde este blog en relación a las claves de acceso de los datos encriptados de la data de transmisión a la finalización del proceso, para evitar interferencia extraña. Muchas sugerencias de parte de la sociedad civil y de nada de eso se ha sabido que hayan hecho algo, por lo menos solicitarlo e informarlo públicamente.

Es increíble lo que ha hecho el candidato en tan poco tiempo en la calle. En la marcha de presentación ante el CNE se pudo constatar lo que ha calado esa candidatura en la gente como una promesa de un futuro mejor. Capriles se ha engrandecido, mucho más allá que cualquier otra opción que hayamos tenido en el pasado. Sólo esperamos que ese cheque en blanco dado por este pueblo noble a los técnicos para cuidarle los votos, en una confianza que solo asemeja a aquella que se daba en el pasado a la gente honorable, no sea cobrado por manos inescrupulosas, escamoteando esa genuina alegría de esperanza que ha contagiado el candidato a todos los venezolanos. Y si eso pasa, todos sabremos a quien ir a buscar…

Caracas, 15 de Junio de 2012

Blog: http://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana