Por Luis Manuel Aguana
El impacto causado en el país por el “Manifiesto a
la Sociedad Democrática Venezolana y a su Fuerza Armada Nacional” firmado por
un inmenso grupo de venezolanos (ver y firmar el Manifiesto en http://www.gopetition.com/petitions/manifiesto-a-la-sociedad-democr%C3%A1tica-venezolana-y-a-su.html)
ha sido de una importancia trascendental, no solo por su contenido y su exhortación,
sino porque el llamado ha removido la fibra esencial del venezolano en relación
a invasión manifiesta del régimen castrocomunista cubano a nuestro país. Ha
sido un campanazo que está despertando conciencias. El régimen no perdonará
eso.
Se han escrito toneladas de papel acerca de la injerencia de Cuba
patrocinada por el gobierno y pareciera que hasta hoy nos estamos desayunando
con eso. Tal ha sido el despertar de conciencias. El Movimiento que comienza a
partir de este momento, de rescate, en primer lugar de nuestro país caído en
manos extranjeras, luce como de prioridad absoluta frente a cualquier otro
problema. Hay que salir primero de la invasión comunista de los Castro para
luego ocuparnos del resto de los problemas, pareciera ser la consigna. Y
cuidado si con salir del primero se empiezan a resolver los segundos.
Esto pone de manifiesto un juego político enteramente distinto al que se
había jugado hasta ahora. Convoca a la sociedad venezolana a organizarse frente
a un invasor que, cual parásito, se ha adosado a la yugular del país y no la
soltará tranquilamente porque en ello se le va la vida. Es por eso que a partir
de ahora las cosas no seguirán iguales en Venezuela.
Ante esta perspectiva muchos venezolanos se están organizando en todo el
país, lo que tarde o temprano obligará al régimen a quitarse la careta
democrática que han lucido internacionalmente y a comenzar la persecución de personas.
Y aunque digamos que nuestra protesta siempre será pacifica, ellos buscarán la
manera de endilgar violencia a nuestras acciones.
No deseo ser aquí profeta del desastre. Es simplemente la dinámica de
este nuevo escenario: un gobierno entregado, un invasor claramente descubierto,
al punto que da directamente órdenes desde su país a partir del 10E, una oposición
“formal” postrada, esperando la migaja electoral que le puedan entregar y
pensando en los pájaros preñados de ganar una contienda electoral presidencial
en ese tablero.
La mesa servida pues para una insurgencia, manifiesta por un lado y
clandestina por el otro, porque alguien le tiene que hacer oposición real al
régimen del invasor, como constitucionalmente TODOS estamos en el DEBER de
hacerlo, de acuerdo al Art. 333 de la Constitución.
Y en medio de todo eso varios salimos a exigir Elecciones Auténticas. Algunos
dirán, ¿Pero bueno, y si estamos en un régimen de facto, invadidos por un país
extranjero, con las autoridades controladas, que caso tiene exigir Elecciones Auténticas?
A esos les digo que ese podría ser Talón de este poderoso Aquiles y la solución
posible de este complicado problema.
Si bien es cierto que Chávez ha importado el modelo cubano de gobierno
no ha socavado todavía nuestro modelo constitucional completamente. Los venezolanos
hemos sido duros de cambiar. Por más mensajes comunistas las 24 horas del día,
los 7 días de la semana, por parte del Sistema de Medios Públicos, aun los
venezolanos no han perdido su quintaesencia democrática. Aun protestamos
democrática y pacíficamente en las calles. Aun quienes dicen estar con “El
Comandante” y se visten de rojo en sus protestas, mantienen un alto grado de
conflictividad y no se creen las soluciones comunistas del gobierno. Estaremos
invadidos pero no hasta el grado de creer que ese sistema “socialista” nos
resolverá los problemas.
Sin embargo, la exigencia de Elecciones Auténticas no puede funcionar
sola. Amerita de un movimiento político nacional que crea en ella. Si la MUD y
la oposición “formal” defiende a capa y espada lo que ha hecho el CNE,
desestimando y descalificando a quienes nos hemos atrevido a indicar que el sistema
electoral y el CNE están en manos cubanas, y que se ha hecho fraude técnico
continuado con complicidad opositora, entonces
la solución de este problema se halla muy lejos. La oposición seguirá “perdiendo”
elecciones infinitamente, tal vez de una manera deliberada.
Entonces si unimos el Manifiesto que expresa una lucha opositora real y
verdadera en contra de la invasión castrocomunista en nuestro país y en nuestras
instituciones,-en especial el CNE- con la reconstrucción del sistema electoral,
expresado en los documentos publicados ayer por los integrantes del Proyecto
EVA (ver “NO a un nuevo Proceso Electoral
Viciado” en http://declaraciondecaracas.blogspot.com/2013/01/no-un-nuevo-proceso-electoral-viciado.html
y “Elecciones Auténticas – Una Exigencia
Impostergable”, en http://declaraciondecaracas.blogspot.com/2013/01/elecciones-venezolanas-autenticas-una.html
puede bajarse este documento completo desde https://docs.google.com/file/d/0B6yI0gUROWzDYVdjanFORjdrVlU/edit)
entonces se puede forzar una salida pacífica con la confluencia de todos los
factores políticos del país. ¿Qué es difícil? ¡Claro que lo es! Por ello se requiere
que TODOS los factores democráticos del país asuman e internalicen que existe
el problema expresado en el Manifiesto y actúen en consecuencia de una manera
única.
En ese sentido, el día
de hoy, durante el Foro de El Nacional “La Injerencia Indebida de Cuba en
Venezuela”, el Dr Enrique Aristiguieta Gramcko, personalidad que encabeza el
Manifiesto a la Sociedad Democrática venezolana, expresó que el gobierno de
transición que nace el 23 de enero de 1958 se constituye con la intención de
llamar a un proceso electoral limpio y transparente, cosa que ocurrió en 1959
con la elección de Rómulo Betancourt como primer Presidente de la democracia.
No quiero terminar esta nota sin referirme a los tiempos que viviremos después
del campanazo del Manifiesto, que al parecer hizo despertar a todo el mundo,
aunque ya algunos habíamos madrugado. Durante el mismo Foro mencionado, una voz
de la experiencia de la Venezuela contemporánea como la de Hector Perez Marcano,
protagonista de la clandestinidad de Acción Democrática, indicó que los únicos partidos
que hicieron resistencia clandestina al régimen de Perez Jimenez fueron AD y el
Partido Comunista de Venezuela, pero que recibían línea de su fundador desde el
exterior de actuar solo con URD y COPEI, partidos que hacían vida política abierta
en Venezuela, ya que AD estaba proscrito.
Sin embargo, Perez Marcano indicaba que los únicos que se restearon en
eso fueron AD y el PCV, porque el primero solo conseguía apoyo en el segundo para
esos difíciles menesteres, al margen de que puntualmente hubiera dirigentes de
los otros partidos presos por el régimen militar. Tal vez eso se debió a las raíces
comunistas originarias de AD que hacían que ambos partidos compartieran riesgos
comunes.
Lo interesante de esa aseveración histórica es que cuando se presenta
una situación de crisis como esta no todo el mundo la enfrenta de la misma manera,
siendo necesario encontrar desde donde antes no existían, las entrañas
necesarias para abordar el lance. Alguien una vez me dijo que el venezolano es
del tamaño del compromiso que se le presenta y nuestra historia lo ha validado
una y otra vez. Esta vez no será diferente…
Caracas, 24 de Enero de 2013.
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana