Por Luis Manuel Aguana
Lo que hago cuando dos amigos entran en conflicto es tomar
como criterio los principios que subyacen en la disputa y decidir en
consecuencia. Y cuando ese conflicto se puede resolver apelando a esos principios,
ambos obtienen lo que desean sin salir perjudicados en sus posiciones
fundamentales.
Mi profesor de Negociación Internacional, el recordado Dr. Carlos
Guerón, indicaba que uno no podía discutir de Dios con el Ayatollah Komeini.
Ese era el extremo. Nunca llegarías a nada haciendo eso, con lo cual se debía
apelar a los intereses que ambos tuvieran en común si ambos estaban de verdad
interesados en llegar a acuerdos.
Me afecta en lo personal el conflicto generado entre la
Cátedra Pío Tamayo y las autoridades de la UCV en relación a la utilización de
los espacios de la Sala E de la Universidad, porque son dos amigos de quienes
nadie puede dudar institucionalmente que estén luchando para vencer las
sombras, como lo reza el Himno Universitario de nuestra Alma Mater.
Todos estamos en conocimiento del conflicto que se ha
generado por la infeliz respuesta de la Prof. Antonieta Alario, Gerente de
Información, Conocimiento y Talento (SFM: 012014, 7-07-2014) al calificar a la
Cátedra Pio Tamayo y sus integrantes como un “ente externo a la Universidad”. Y
es aquí donde creo que reside en centro de toda esta discusión.
La CPT definitivamente NO ES un ente externo de la
universidad, ES LA UNIVERSIDAD MISMA, en su esencia mas profunda, en su razón
de ser, en sus fines y propósitos, y cualquier disputa de menor jerarquía como
lo es la contratación de un empleado debe estar supeditada a esos fines últimos
por los cuales el Libertador la creó como Universidad Central en 1826 o aun más
atrás, desde 1721cuando el Rey la crea como Universidad Pontificia de Caracas,
actual UCV. Toda la comunidad universitaria, y en especial sus niveles
gerenciales, deben manejar ese concepto y circularlo por sus venas como la
sangre misma de la esencia del ser universitario, en especial si se trata de la
UCV.
Es posible, para darle el beneficio de la duda a la Prof.
Alario, que ésta “quiso decir” que la CPT u otra persona no podía,
ADMINISTRATIVAMENTE hablando, ser parte contratante desde el punto de vista
laboral, porque sería considerada otro patrono dentro de la universidad y que
eso le podría acarrear problemas a la institución en el futuro con la persona
al poder asumir esta una condición de empleado universitario. Esa hubiera sido
una respuesta comprensible.
Ahora bien, ¿qué hacer? La UCV no puede echar simplemente a
la basura 30 años de discusión profunda de los problemas del país por una
disputa pendeja por un empleado que “no se puede” financiar porque hay
problemas presupuestarios. ¿Qué es más importante? ¿Los fines últimos por los
cuales la UCV se creó y sigue en pie después de casi 300 años o la burocracia
que la tumba? Somos los universitarios verdaderos quienes debemos dar respuesta
a esa interrogante.
Si el Vicerrector Académico, de quien dependen esos
espacios, la Rectora, o cualquier autoridad universitaria pueden pagar a un
vigilante que se niega a abrir la Sala E “por órdenes superiores”, bien pueden
pagar también a aquel que tenga la llave y se responsabilice por el cuido de
las instalaciones, dándole continuidad a una obra que no es ya de la UCV sino que
pertenece a todos los venezolanos.
Invito a mis amigos de la CPT y en especial a las
autoridades universitarias a pensar como ucevistas. Ambos tienen un interés
común, darle luz al conocimiento, venciendo las sombras de la ignorancia y el
obscurantismo. Creo de verdad que la disputa no es en contra de la UCV como
institución que “le niega” un espacio a la CPT. Es en contra de las sombras que
de tanto vivir asediando a nuestra universidad ya la están penetrando en las conciencias
de algunos que se dicen ucevistas, así ocupen posiciones de importancia dentro
de nuestra universidad. A esos son los que en realidad debe ahora vencer la
Casa que Vence las Sombras con la Cátedra Pío Tamayo al frente, al ser ésta una
parte muy importante de esa Casa. No duden nunca que Pio Tamayo como héroe insigne
de su tiempo vencerá de nuevo las sombras…
Caracas,
22 de Julio de 2014
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana