Por Luis Manuel Aguana
Los nuevos
nombramientos realizados por el Presidente Encargado Juan Guaidó apuntan a una
reafirmación de la ruta que lleva a un acuerdo electoral con el régimen de
Nicolás Maduro Moros. Ya sean abiertos o encubiertos, esos acuerdos parecieran
estar más cerca de lo que la gente supone. ¿Y por qué lo digo? No es un secreto
para nadie que el partido Voluntad Popular ya está en campaña electoral. Si no,
que lo digan los envases de leche con identificación de VP que están
repartiendo, en una asombrosa manifestación de populismo exacerbado, solo
comparable con el mismo régimen. (Asimplevista.com, VP reconoce la veracidad de
alimentos con su logo y rechaza esa práctica, en https://www.asimplevista.com/aqui/vp-rechazo-imagenes-sobre-presunta-entrega-de-alimentos-con-logo-del-partido/).
Aunque la
organización política negó oficialmente la práctica de entregar alimentos a la
población, lo cierto es que para los venezolanos no es nuevo este tipo de
argucias, donde se manipulan sin escrúpulo alguno y con fines políticos, las
necesidades más sentidas de la población. Sin embargo lo importante allí, no es
la leche que repartieron, es la solución que la oposición oficial le está dando
a la crisis venezolana, comenzando por el partido del Presidente Encargado, que
ignora por completo la urgencia de vida de los venezolanos, así como la
estructura criminal de quienes están ejerciendo ilegalmente el poder en
Venezuela.
Al parecer los
Estados Unidos están más conscientes de eso que la oposición oficial cuando les
exige a través de las declaraciones públicas de sus voceros para Venezuela que
Maduro tiene que estar fuera del poder antes de proceder a una elección presidencial
en nuestro país, estableciendo de esa manera un mayor reconocimiento al
Estatuto de la Transición del que ha demostrado hasta ahora tener quienes
inventaron ese instrumento. Los norteamericanos tienen más claro el mantra que
ellos. Y ese es precisamente el problema que ahora nos ocupa.
En nota de la
periodista Sabrina Martín del PanamPost, Elliott Abrams, enviado para Venezuela
de la Casa Blanca, declaró que “…la Casa Blanca
no le dará su respaldo a unas elecciones en el país suramericano si en la
boleta hay alguno de los dos hombres que se disputan el poder: Maduro o Guaidó.
El diplomático estadounidense indicó que si ellos quieren postularse, primero
tendrían que dejar el cargo para evitar que haya peleas sobre si se manipuló la
votación” (ver PanamPost, EEUU: no apoyaremos elección entre Maduro y
Guaidó bajo condiciones actuales”, en https://es.panampost.com/sabrina-martin/2019/08/28/eeuu-maduro-guaido-elecciones/).
Y ahora yo me
pregunto, ¿es que los Estados Unidos, que siempre habían estado en contra de un
proceso electoral con el régimen por criminales, ahora si lo acepta pero sin
Maduro? ¿Cómo es eso? ¿Qué paso en el medio del camino que el régimen dejo de
ser para EEUU un atajo de delincuentes que usurpan el poder y no lo entregan a
su legitimo sucesor, Juan Guaidó, investido como Presidente Encargado hasta
producirse unas elecciones libres desde el 23 de Enero de 2019?
Responder a esa
pregunta es sumamente importante porque en ello se va la estabilidad de
Venezuela por un caño en las próximas semanas cuando la oposición oficial
anuncie al país “que se llegó a un acuerdo con el régimen” para ir a unas
elecciones sin cambiar absolutamente nada en las condiciones electorales, salvo
el cambio facial de los Rectores del CNE, y sin desmontar la Asamblea Nacional
Constituyente ilegitima. ¿Es ese el “cese de la usurpación de la trilogía?
Tengo la
lamentable impresión que la oposición oficial volvió a convencer a los Estados
Unidos como lo hicieron el 30 de Abril de que los delincuentes se irán sin más
solo porque ellos creen que ganaran unas elecciones. Diosdado y Maduro deben
estar muertos de la risa. La contraoferta norteamericana fue que si ya
negociaron elecciones con el régimen entonces en la papeleta no pueden ir ni
Maduro ni Guaidó. Pero es que Guaidó no estaba allí en primer lugar para ser
candidato de nada, como equivocadamente se distorsionó este cuento. Guaidó
debía recibir el cargo de acuerdo al Artículo 233 Constitucional para llamar a
unas elecciones libres, transparentes y autenticas luego de un periodo que
llamamos transición, y posterior a que Maduro y sus delincuentes desalojaran el
poder.
Se ha confundido
de tal manera a los venezolanos que ya la gente cree que Guaidó es candidato
presidencial en unas elecciones que nadie entiende porque se las están metiendo
al país por los ojos con programa de gobierno incluido (Plan País). ¿En qué
loquera estamos? ¿A los venezolanos se les olvidó que Maduro y su régimen
–ambos- se tienen que ir primero antes que esas elecciones puedan darse? ¿Qué
se debe hacer una fumigación de todas las alimañas que hay en el CNE antes de proceder
a realizar cualquier elección?
Pero lo peor no es
eso. El país implosiona por todos los costados. Las soluciones deben darse
inmediatamente, no para dentro de 6 meses o más, que es lo que nos pretenderán
vender con unas elecciones con el régimen, cuando es ahora mismo que la gente y
en especial los niños, se mueren de hambre y de mengua en los hospitales. Que
la hiperinflación está acabando ahora mismo con el ya menguado bolsillo de los
venezolanos que no pueden comprar nada para llevar a sus mesas. Es por eso, por
si no lo recuerda VP o el resto del G4, que tenía que haber un cese inmediato
de la usurpación, para que el Presidente Encargado Juan Guaidó comenzara un
gobierno que corrigiera esos problemas. ¡Juan Guaidó no tiene ningun sentido fuera
de ese contexto! ¡Eso es lo que hay que entender!
Pero no,
lamentablemente vemos al Presidente Encargado en una comparsa electoral que nos
anuncia a gritos que el régimen esta a la espera de una elección acordada con
ellos. ¿Quién ha ganado con ese dialogo? ¿Es que la oposición cree de verdad
que el régimen delincuente de Nicolás Maduro Moros les entregará el poder
electoralmente así nada más, después de todo lo que ha pasado en Venezuela?
Responsablemente
debemos recordarles a los dirigentes políticos que han distorsionado toda esta
historia a favor de ir a unas elecciones con el régimen de Maduro, que los
norteamericanos han rechazado desde un comienzo esta “solución” a la crisis
porque no es verdaderamente una solución, ya que con eso no saldremos del régimen
castro-chavista-madurista enquistado en Venezuela.
Los
norteamericanos saben a profundidad la naturaleza criminal de quienes gobiernan
Venezuela (con implicaciones y lazos internacionales incluídos) y han tratado
de convencer sin éxito a la oposición oficial que sin salir antes del régimen
jamás habrán elecciones libres. Sin embargo lamento decir que para EEUU resulta
completamente intrascendente lo que nos suceda aquí adentro con tal y que no
seamos una amenaza para la región y para su seguridad nacional. Si la oposición
oficial les promete que con irse a la cama con Maduro se resuelve el problema
regional, ellos no pondrán ninguna objeción tal como paso el 30 de Abril.
Lamentablemente se
equivocan de nuevo y esa equivocación la pagaremos todos los venezolanos y a la
sazón los mismos Estados Unidos también porque al no resolverse el problema,
como creemos que va a pasar, la situación se agravará, y tendrán necesariamente
que ocuparse unilateralmente del problema, y lo que están tratando de evitar creyéndoles
a los irresponsables del G4, lo tendrán acrecentado en el cortísimo plazo con peores
consecuencias para los venezolanos y para ellos como guardianes del hemisferio,
y por supuesto a un costo muchísimo más alto para todo el mundo.
Se equivocan porque
una farsa electoral como la que están planteando en la oposición oficial, engañando
a la población de que eso constituye el “cese de la usurpación”, no resuelve
inmediatamente la hiperinflación producto del régimen que todavía se encuentra
mandando en Miraflores, el hambre y las enfermedades de los más necesitados, la
crisis del sector eléctrico, la crisis hospitalaria, la crisis del transporte,
la crisis de la comida, etc., etc., etc., generando una aceleración a la crisis
regional provocada por el éxodo masivo de aquellos que solo esperan este ultimo
chance para no irse del país. Esto les dará la excusa perfecta para marcharse
porque esas elecciones las guisará el régimen de nuevo a su favor.
Y ustedes dirán ¿y
entonces cuál es la solución? Todo esto mis queridos amigos solo se resuelve de
manera inmediata con una intervención de carácter humanitario, con la solicitud
del R2P a la Comunidad Internacional, y la aprobación del 187#11 Constitucional
en la Asamblea Nacional. Pero para eso hace falta que resolvamos primero un
verdadero “cese de la usurpación”.
Desde la Alianza
Nacional Constituyente-ANCO, propusimos una vía inmediata, express, para resolver
ese “cese de la usurpación” a través de un Plebiscito que entregue el poder al
sucesor legítimo que el pueblo decidió el 23 de Enero de 2019 para que cumpla
con su mandato Constitucional de un Gobierno de Transición y Elecciones Libres,
con el apoyo de una fuerza que nos respalde internacionalmente. Ignorar la
propuesta porque estamos a punto de unas elecciones que negociaron a expensas
de la credibilidad ingenua de los venezolanos, no significa que no exista como
solución para Venezuela (que no para los intereses de muchos de la oposición
oficial) aun cuando estemos todavía a tiempo para aplicarla…
Caracas, 30 de Agosto de 2019
Email:
luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana