Por Luis Manuel Aguana
Que complicado se pone intentar
escribir de una realidad que cambia cada hora, cada minuto. Pareciera que
fueron el año pasado eventos que tienen solo días de haber ocurrido. Es por eso
que se hace más difícil porque ahora de lo que se trata es de identificar
tendencias y hechos que no se ven a simple vista. ¿A dónde nos llevara esta
fractura irreversible de la oposición oficial? ¿Qué tan grave es y qué
consecuencias tendrá eso para Venezuela?
Tengo la teoría –aún por
comprobarse- de que ese terremoto del 15 de Octubre todavía no termina (ver
Terremoto político, en http://ticsddhh.blogspot.com/2017/10/terremoto-politico.html).
El deslizamiento de las placas tectónicas políticas de Venezuela no solo derribó
el edificio de la MUD sino que sus ocupantes se fueron corriendo buscando
refugio para las edificaciones del régimen.
El común de la gente piensa continuar
en la pachanga electoral, y los partidos de la extinta MUD seguirán reclamando
los votos opositores “as usual” haciéndole la comparsa al régimen, en una
suerte de huida hacia delante de la oposición colaboracionista. Y la gente
votará y votará hasta las Presidenciales el año entrante, con declaraciones de
los voceros de esa oposición de que su “lucha será por unas mejores condiciones
electorales” para elegir Presidente (ver Ramos Allup llama a fortalecer la
imagen unitaria y procurar mejores condiciones electorales, en https://www.lapatilla.com/site/2017/11/03/ramos-allup-llama-a-fortalecer-la-imagen-unitaria-y-procurar-mejores-condiciones-electorales/).
¡Por Dios! Me reiría de eso si no fuera tan patético. Eso era lo que pedíamos
antes de la elección de Maduro y la MUD no nos paró ni medio, por no decir lo
que corresponde (A la sociedad democrática venezolana ante el llamado a
elecciones el 14 de abril de 2013, en http://declaraciondecaracas.blogspot.com/2013/03/ante-las-elecciones-del-14-de-abril.html).
Ese es el lamentable camino que les quedo después del terremoto, pensando que
saldrán con bien de eso.
Pero lo grave no es eso. Es que
para poder sostener ese parapeto electorero deberán proceder a montar la
pantomima de un nuevo CNE, esta vez desde la Asamblea Constituyente
fraudulenta, porque ahora la gente no se va a tragar a Tiby Lucena de nuevo, so
pena de dejar los centros vacíos en una nueva elección. Y ya lo están
negociando con el régimen. Ese es el costo del refugio luego del terremoto. Y
el régimen impondrá su 3 a 2, ahora sin Tiby, y con algunas de las “reptoras”
actuales, en una composición tramposa de nuevo.
La ex MUD abre de esa manera un
nuevo período de convivencia, esta vez manifiesto con el régimen. Ambos
luchando por sobrevivir en tiempos donde es imposible una convivencia, a menos
que te hayas pasado con todo y pertrechos para el otro bando. Los venezolanos
deben saber que eso que se llamaba oposición oficial ya no lo es. Ya es el régimen
disfrazado de oposición. Y si deciden votar en ese parapeto electoral que
monten, estarán contribuyendo a alargar el sufrimiento que vivimos en este
país.
El régimen tratará desesperadamente
ser reconocido internacionalmente y para ello se gastará hasta el último dólar,
que debiera estar destinado a nuestra comida y medicinas, en la ex MUD y a todo
aquello que le intente dar legitimidad a sus actuaciones, alargando la agonía
de todo el mundo. Vano intento. Ya está condenado. Ya Venezuela es un Estado
fallido con una tiranía narco militarizada y terrorista al mando. Y eso tendrá
consecuencias para los que se abrazan a él buscando un oxigeno que ya se acabó,
como la ex MUD. Y esa charada de que no voy a las Municipales pero si a las
Presidenciales “buscando mejores condiciones electorales” no es más que un
embuste que se están metiendo ellos mismos y peor aún a los venezolanos que de
buena fe aun cree en ese liderazgo.
Pero lo que hacen es volver sobre
el interminable ciclo de la historia, que si no la conoces, la repites. Ramón
J. Velásquez, citado por Simón Alberto Consalvi en su biografía de Juan Vicente
Gómez indicaba: “Tenía razón Cipriano Castro cuando al dirigirse al Congreso Nacional
en su mensaje de 1903 afirmó que nada le enorgullecía tanto como “la gloria de
haber vencido al famoso caudillaje histórico, muerto por mi propia mano, en el
mismo campo de batalla al filo de mi espada, porque dejó así allanado el camino
de una paz, duradera y fecunda”.(…). A La Victoria concurrieron como a un
cementerio de elefantes, todos los viejos prestigios militares de Venezuela.
Los que durante 50 años habían dictado la ley, y dividiéndose a ratos en
oposición y gobierno, habían mantenido el control absoluto del poder político y
del dominio militar. Cuando se dispersen, cumpliendo la orden general del 2 de
noviembre de 1902, dictada por Matos en el cuartel de San Mateo, va en camino
del olvido total…” (1).
Nosotros no tendremos que matar a
nadie “en el mismo campo de batalla al
filo de mi espada” como hizo Cipriano Castro con la ayuda de Gómez, pero la
historia nos enseña que si deben desaparecer políticamente estos personajes que
impiden que el país evolucione a un nuevo siglo y que por décadas han “dictado la ley, y dividiéndose a ratos en
oposición y gobierno, habían mantenido el control absoluto del poder político y
del dominio militar” después que esta debacle pase. ¡Y pasará! ¿Quiénes
quedarán de pié? Solo aquellos que verdaderamente interpreten el tiempo
histórico en el cual viven.
El régimen y su oposición –que
ahora son dos caras de la misma moneda- abiertamente esperan que los
venezolanos les compremos esa nueva fachada. ¿Esperará Rosales que los zulianos
le compren que el gobierno no apoya su nueva candidatura “opositora” cuando lo
dejaron participar, levantando su inhabilitación política? ¡Ramos Allup y
Rosales al menos deberían tener la decencia de inscribirse en el PSUV!
Los acontecimientos políticos
estarán cada vez mas sesgados a la inviabilidad del modelo político comunista y
terrorista del régimen. Y aquellos que estén viviendo una relación de simbiosis
mutualista asqueante con el gobierno (ver Simbiosis, en http://ticsddhh.blogspot.com/2012/12/simbiosis.html)
tendrán invariablemente como consecuencia sufrir su mismo destino. Ojala nos
hagan ese favor de no despegarse de ese tronco agonizante, le ahorrarán a
Venezuela muchos años de sufrimiento futuro…
Caracas, 7 de Noviembre de 2017
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana
(1) Juan Vicente Gómez,
Biografía, Simón Alberto Consalvi, 2007. Libros El Nacional, ISBN
978-980-388-716-2. Págs. 65-66, Caracas-Venezuela