Por Luis Manuel Aguana
Demasiadas señales para ser
ignoradas. El chavismo abierto y encubierto desea regresar en sus múltiples
facetas al gobierno usando la transición, con la ayuda de la oposición oficial.
No, no se asombren. No es una actitud de apartheid político la que estoy
tratando de aplicar aquí. Es solo la advertencia de quien siendo un observador
externo advierte que no se puede componer un país utilizando quienes fueron los
responsables directos de su destrucción. No existe tal cosa como “chavismo
democrático”. Eso conceptualmente es un oxímoron, que de acuerdo al
RAE significa: “1. m.
Ret. Combinación, en una misma estructura sintáctica, de dos palabras o
expresiones de significado opuesto que originan un nuevo sentido, como en un
silencio atronador”.
Sin embargo, la oposición oficial, que es como he llamado en esta
tribuna a todos aquellos factores políticos que aun se empeñan en hacer
oposición bailando pegados con la dictadura, por aquello de que en Venezuela
“no podrá existir” una transición sin el gobierno, insisten en tratar de
colearnos el chavismo –la tesis de los enclaves autoritarios de Henry Ramos
Allup- en la fase “Gobierno de Transición” de la famosa trilogía “Cese de la Usurpación-Gobierno de
Transición-Elecciones Libres”. Desde aquí responsablemente les
advierto: la mejor manera de comprarse un fracaso seguro durante la transición
de Juan Guaidó es meter al chavismo en cualquier fase del proceso. Y tengo la
agria impresión de que eso no es gratis. El chavismo ha amasado tanto dinero
que bien se pueden comprar no solo un puesto en lo que viene sino el Gobierno
de Transición completo si se lo proponen. Y no es solo un decir…
Y la plataforma política
que están usando se las proporcionó la MUD en su relanzamiento opositor, con el
nombre de Frente Amplio (tan amplio que incluye al chavismo) Venezuela Libre en
marzo de 2018, con los dos actos realizados en el Aula Magna de la UCV donde
buscando desesperadamente la reconexión con el país, se bañaron de “sociedad”
civil coleando al chavismo light en la fiesta de relanzamiento (ver Dos actos,
un mismo propósito: el relanzamiento de la MUD, en http://ticsddhh.blogspot.com/2018/03/dos-actos-un-mismo-proposito-el.html).
Sin ir muy lejos e
ilustrando el punto anterior, en el acto celebrado en la Sala de Conciertos de
la UCV el 14 de febrero, donde diversos sindicatos pidieron al Presidente
Encargado Juan Guaidó instalar una “mesa tripartita” para el rescate de las
escalas salariales y mejorar las condiciones laborales (ver noticia en http://efectococuyo.com/principales/trabajadores-piden-mesa-tripartita-a-guaido-para-abrir-dialogo-social/)
algunos representantes de los trabajadores presentados al público en ese acto
forman parte activa de ese chavismo cuya voracidad destruyo a las instituciones
que ahora dicen querer rescatar, como en el caso del Metro de Caracas que es un
ejemplo que conozco perfectamente. Voluntad Popular como partido organiza
dentro de ese Frente amplio ese evento y le entrega al chavismo, encubierto por
una lucha por sacar a Maduro, la lucha sindical sin percatarse que le está
poniendo la soga al cuello a futuro al Presidente Encargado, ¿qué tal? Mayor
estupidez imposible.
Si ese es el ejemplo
del resto de los sindicatos y trabajadores de las organizaciones presentados en
ese encuentro, el gobierno de Juan Guaidó estaría operando sobre una bomba de
tiempo durante la transición. Solamente con eso el Gobierno de Transición estaría
montado en un caos laboral. ¿Qué le costaría a los sindicatos del chavismo
desestabilizarle el gobierno a Juan Guaidó? Nada, si les dan la apertura desde
ahora mismo como lo están haciendo.
Lo que debería pasar
es que las autoridades que designe Juan Guaidó en cada institución sean capaces
de garantizar elecciones sindicales libres al momento inmediato del “Cese de la
usurpación” y que exista una legitima representación de los trabajadores en
cada una de esas instituciones, cosa que ha sido imposible desde que Chávez y
Maduro llegaron al poder, robándose las elecciones de los trabajadores en cada
Empresa e Institución del Estado. De allí que esos sindicatos estén como están
ahora. Allí lo que hay es un nido de delincuentes y ladrones que se han llevado
el dinero de los trabajadores y a los que nadie le ha podido poner control. La
única manera de rescatar esa paz laboral para que exista estabilidad del
gobierno de transición es poner en su justa dimensión la representación de los
trabajadores.
¿Cuál es ahora la
estrategia de aquellos que se sienten perdidos porque el pueblo decidió
expulsarlos del gobierno, dándole el respaldo masivo a Guaidó y a una
transición inevitable? Infiltrar y hacer inviable lo que viene. Y lo están
logrando con la pequeña ayuda de aquellos que creen que sin el chavismo no se
puede gobernar. Mas les vale a Juan Guaidó y al G4 de la Asamblea Nacional
recapacitar en esa decisión de macro política. El chavismo no puede estar en la
transición so pena de hacer ingobernable el país y hacer regresar lo que los
venezolanos les ha costado sangre en las calles. Replicaríamos en un santiamén
la experiencia de Nicaragua y Daniel Ortega con cualquier representante de ese
chavismo que en este momento se encuentre financieramente preparado para
asaltar el poder de nuevo. Y hay unos cuantos, comenzando por Rafael Ramírez…
Un ejemplo de la instrumentación
de esta política incluyente del chavismo en el Gobierno de Transición lo representa
Stalin González de UNT: “Gobierno de Transición en Venezuela incluirá a
chavistas y militares” (ver noticia en https://www.cubanet.org/noticias/stalin-gonzalez-gobierno-transicion-venezuela-incluira-chavistas-militares/):
“Sí pensamos que el chavismo y los
militares deben ser parte de ese gobierno de transición (…) Hay que darle
espacio al chavismo, que no es Maduro, porque tiene que haber estabilidad
política”, dijo González a la agencia británica”. Esto no es más que la
doctrina de la transición de Henry Ramos Allup en acción, que incluye dejar las estructuras del
régimen intactas: “…el régimen
transicional significa: leyes de perdón y olvido, ley de punto final,
comisiones de la verdad, reparación de victimas, procesos especiales
–mediatización de la justicia- que es la justicia transicional, y soportamiento
y aceptación de lo que se denominan enclaves autoritarios, que son las
instituciones del antiguo régimen, para señalarlos de alguna manera, que uno se
calaría en un régimen nuevo. Es decir Altos Mandos militares, Tribunal Supremo,
etc., etc., etc..” (ver Ramos Allup habla sobre la “transición”, en https://youtu.be/zzudMxJGnVU, min
0:52). Que lamentable ver un joven como González ponerse la piel arrugada de un
viejo, en lugar de tener ideas renovadoras y propias de alguien de su
generación.
Pero lo realmente terrorífico de
esta política en acción fue lo expresado por Francisco Sucre de Voluntad
Popular el 12 de febrero en representación de… ¡Juan Guaidó! al momento de
reunirse con el Alto Mando italiano en Roma: “Francisco Sucre, delegado enviado Roma en representación del
presidente de la Asamblea Nacional Juan Guaidó, sostuvo este martes que el
mandatario venezolano Nicolás Maduro, puede participar en unas eventuales
nuevas elecciones en el país. “El señor Maduro es libre de
presentarse en esas elecciones, no como presidente en ejercicio sino como ex
presidente de la República. Si lo postula su partido por supuesto lo
aceptamos”, dijo el parlamentario durante una conferencia de
prensa. “No queremos sustituir una intolerancia con otra intolerancia”,
recalcó.” (ver Francisco Sucre: Maduro podría participar en unas eventuales
nuevas elecciones, en http://talcualdigital.com/index.php/2019/02/12/francisco-sucre-maduro-podria-participar-en-unas-eventuales-nuevas-elecciones/).
De verdad que me gustaría saber que piensa el Presidente Encargado de estas
declaraciones.
¿Será que nadie le ha informado a
Francisco Sucre que Maduro es convicto a pasarse 18 años y tres meses de
prisión por delito de Corrupción Propia y Legitimación de Capitales, tiene
doble nacionalidad y de paso esta señalado por narcotráfico por la DEA y el
Vice Presidente de los Estados Unidos? (ver Pence: Investigaciones de la DEA
apuntan a la narcodictadura de Maduro, en https://www.diariolasamericas.com/eeuu/pence-investigaciones-la-dea-apuntan-la-narcodictadura-maduro-n4171128).
¿Será que nadie le ha dicho a Francisco Sucre que MADURO NO ES NI FUE PRESIDENTE
DE LA REPUBLICA y mucho menos ex Presidente porque las elecciones de 2013 y
2018 fueron un fraude? Maduro NO PUEDE PARTICIPAR en ninguna elección ni para
concejal porque deberá estar preso para ese entonces. Los casos de González y
Sucre fueron motivo de especial atención de mi amigo Antonio Sánchez García en
su extraordinario artículo de hoy Tiranía, Crisis y Transición en https://www.lapatilla.com/2019/02/17/tirania-crisis-y-transicion-por-antonio-sanchez-garcia-sangarccs/
que les recomiendo ampliamente.
Entonces, las señales
que nos están mandando desde la oposición oficial antes de comenzar la trilogía
son muy preocupantes, e imposibles de ignorar. Si algo se debe acelerar, además
del “Cese de la Usurpación” que toda Venezuela espera con ansia, es la
liberación de Juan Guaidó de toda atadura partidista, como se solía hacer con
los Presidentes de la democracia para que tuvieran la libertad de garantizar a
todos los venezolanos un gobierno de equilibrio estable. Si Guaidó sigue
prisionero de la fauna que hemos descrito, que no siga repitiendo la trilogía
porque una transición con chavismo es solo un oxímoron…
Caracas,
17 de Febrero de 2019
Email: luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana