jueves, 10 de octubre de 2024

Entre cohabitadores te veas

Por Luis Manuel Aguana

English versión 

¿Es posible alguna negociación con el régimen de Nicolás Maduro Moros después del 28 de julio? La pregunta viene a cuento porque se están cocinando  posibles “soluciones” en el exterior a la crisis política venezolana, que pasan por la figura de “compartir” el gobierno del país con una tiranía que se robó las elecciones el 28 de julio. Y de allí la pregunta: ¿es todavía posible una negociación como la que planteara hace dos años Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos, OEA? Efectivamente, en julio de 2022, Almagro planteaba directamente un Gobierno Colegiado con la narco-tiranía de Nicolás Maduro Moros, basándose en la supuesta imposibilidad de removerla en una negociación:

El objetivo de la salida de Maduro transformó a cada negociación en un juego de suma cero que terminaba siendo imposible: ni la salida de Maduro en una negociación ni una elección que pudiera significar su salida. Como todavía parece ser irrealista ese objetivo de algunos, entonces una negociación en ese contexto obviamente no puede ser cómo se saca a Maduro, sino cómo sigue. Esto implica cohabitación. La cohabitación es un ejercicio para el cual no he visto prácticamente a nadie preparado en Venezuela. Pero eso lo hace aún más necesario, en el sentido de que implica un ejercicio de diálogo político real, de institucionalidad compartida, de poderes del Estado compartidos.” (ver Luis Almagro, El infierno del sendero que jamás se bifurca, en https://www.cronicas.com.uy/contratapa/el-infierno-del-sendero-que-jamas-se-bifurca/).

Publiqué dos notas en reacción a esa propuesta (ver Las 4 etapas del artículo de Almagro, en https://ticsddhh.blogspot.com/2022/07/las-4-etapas-del-articulo-de-almagro.html, y De Peñalver a Almagro, todavía no somos suizos, https://ticsddhh.blogspot.com/2022/09/de-penalver-almagro-todavia-no-somos.html) sugiriendo la inviabilidad cultural de semejante curso de acción. Todavía pienso exactamente igual y más aun, luego del drástico cambio en el contexto político venezolano desde el 2022.

Si en aquel momento en que el Secretario General de la OEA proponía esa solución,  al menos esta podría ser discutible EN ESE MOMENTO porque no había sido posible llegar a ninguna salida con el régimen debido a que, como el mismo Almagro indicaba en su artículo, “Es muy difícil ir a un proceso electoral dudoso que simplemente asegure la continuidad de lo que tenemos ahora con legitimidad inexistente o dudosa (pero que obviamente espera contar con la complacencia de muchos —el azúcar pica los dientes—)”.

Pero TERMINAMOS YENDO A ESE DIFÍCIL PROCESO ELECTORAL mencionado, pero en los términos del régimen, sin garantía alguna el 28 de julio de 2024, y la oposición resulto victoriosa con mayoría abrumadora, como se ha demostrado ampliamente, dejando muy atrás el lugar común que se recitaba como un mantra en el exterior de que estábamos polarizados. Ya demostramos que no existe tal polarización y toda Venezuela rechaza el régimen nefasto de Nicolás Maduro Moros. Y aun así se mantiene en el poder por la fuerza.

Sin embargo, de nuevo, esta propuesta de cohabitación con Gobierno Colegiado fue sacada del baúl en fecha reciente por Gonzalo Koncke, jefe de Gabinete de Luis Almagro en la Organización de Estados Americanos, OEA, de acuerdo a declaraciones realizadas por Koncke al Director de Infobae América, Laureano Pérez Izquierdo:

 "Y por otro lado, hemos insistido en el Gobierno Colegiado, como única forma de gobierno de transición democrática en Venezuela. El juego del todo o nada es equivalente a nada para el pueblo. Cuando uno percibe que todo el mundo quiere el 100% en Venezuela se da cuenta donde radica el problema político. Por supuesto esto requiere trabajo y no es de generación espontánea. Fundamentalmente porque nadie está dispuesto a compartir nada." (ver Infobae, Gonzalo Koncke: Pedir que en Venezuela detengan la tortura, los asesinatos y las desapariciones sin pedir justicia es un contrasentido, en https://www.infobae.com/venezuela/2024/10/07/gonzalo-koncke-pedir-que-en-venezuela-se-detengan-la-tortura-los-asesinatos-y-las-desapariciones-sin-pedir-justicia-es-un-contrasentido/).

En este punto debemos recalcar que la solución de “cohabitación” con Gobierno Colegiado expuesta por Luis Almagro en el contexto político de 2022, no debe ni puede ser la misma si se realiza luego de un golpe de Estado a la Soberanía Popular perpetrado por el narco régimen de Nicolás Maduro Moros y rechazado por gran parte de la Comunidad Internacional. Koncke se quedó con la propuesta de Almagro de 2022 sin considerar los graves hechos acaecidos en Venezuela en la madrugada del 29 de julio de 2024, ampliamente registrados por la observación de la ONU y el Centro Carter. ¿Y si no puede ni debe ser la misma, que hay detrás de todo eso?

La respuesta nos viene de Colombia. Gustavo Petro eludió la propuesta del Congreso de su país de reconocer a Edmundo González Urrutia como vencedor indiscutible de las elecciones venezolanas del 28 de julio, indicando “…El congreso de Colombia, por ordenamiento constitucional, no puede exigirle al presidente posiciones en materia de política internacional. La proposición es una solicitud y la estudiaré dentro de las decisiones que tengo que tomar siempre consultando, antes que nada, el interés general de la sociedad colombiana.(ver post de @petrogustavo del 25 de septiembre en X (Twitter), en https://x.com/petrogustavo/status/1838926295603855448).

¿Y qué es para Petro “el interés general de la sociedad colombiana” para Venezuela? Adivinaron, la cohabitación con Nicolás Maduro Moros. Petro se niega a reconocer la voluntad popular de los venezolanos y presenta su propia propuesta de cohabitación para salvarle el cuello a Maduro -y en cierta medida su propio cuello- en los siguientes términos:

La idea central del gobierno colombiano consiste en que el oficialismo y la oposición en Venezuela lleguen a un acuerdo para compartir el poder. Inspirado en la experiencia del Frente Nacional en Colombia, el presidente Petro ha señalado que este modelo podría ser una solución transitoria para Venezuela. Según lo planteado, el acuerdo de cohabitación tendría una duración de seis años, con periodos de tres años para cada facción, bajo la supervisión de organismos internacionales y el compromiso de realizar elecciones transparentes. Este plan contempla el levantamiento progresivo de las sanciones internacionales impuestas a Venezuela, a cambio de garantías políticas y de gobernabilidad que beneficien tanto al chavismo como a la oposición.

Para asegurar la viabilidad de la propuesta, el gobierno colombiano está buscando el respaldo de actores internacionales clave. Entre los involucrados en las gestiones se encuentran el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y países como Cuba, China y Rusia, quienes juegan un papel relevante en la política venezolana. También se espera la participación de la Organización de Estados Americanos (OEA), cuyo secretario general, Luis Almagro, ha expresado un interés creciente en la idea de un gobierno compartido en Venezuela, pese a su postura crítica anterior frente al régimen de Maduro. La cohabitación, como sugiere Almagro, no es un ejercicio sencillo, pero es fundamental para establecer un diálogo real y una institucionalidad compartida que beneficie a todos los actores políticos” (ver El Venezolano- Colombia, Plan de Petro para una transición democrática en Venezuela, en https://elvenezolanocolombia.com/2024/10/el-plan-de-petro-para-una-transicion-democratica-en-venezuela/) (resaltado nuestro).

¿Es posible “compartir el poder” con quienes fueron barridos por el pueblo venezolano en unas elecciones y dieron un golpe para mantenerse allí? Solamente en la mente acorralada del Presidente colombiano, que requiere de Maduro para sostener un estado de cosas en la región. Y ese estado de cosas no puede ser otro que la guerrilla, el narcotráfico y la postración económica de los venezolanos, todos ellos aliados naturales del Presidente Petro. No creo que en el interés del pueblo colombiano, como argumento de su post del 25 de septiembre, se encuentre la profundización de la migración venezolana hacia las fronteras de Colombia y la misma presencia de Petro en el poder.

Nótese que Petro busca apoyos a esa propuesta en China y Rusia (¡vuelven a salir esos países!), miembros permanentes del Consejo de Seguridad y Luis Almagro en la OEA, quien ya se pronunciara en el 2022 con relación a ella, y aparentemente también ahora a través de su jefe de gabinete, Gonzalo Koncke, quien hiciera esa declaración por la OEA. Tal vez a esa propuesta de Petro se sumen Brasil y México, quienes todavía insisten que Maduro muestre unas actas que solo probarían que perdió las elecciones y que debe entregar el poder.

Nos estamos viendo entonces entre cohabitadores internacionales que aún persisten en ignorar una realidad evidente, buscando estirar la presencia de Maduro en el poder, a costa y contravía de lo que decidimos lo venezolanos el 28 de julio de 2024. Si la dirigencia opositora en manos de María Corina Machado es consistente con la promesa de hacer respetar el resultado del 28 de julio, no tendremos que preocuparnos por lo que Petro proponga o deje de proponer.

Pero si por alguna razón nos salimos un milímetro de eso en una negociación, al estilo de los antiguos negociadores de la Plataforma Unitaria, que le entregaron todo al régimen, comenzando por reconocerlo, pisaremos esa concha de mango, porque el mundo se volcará hacia ella debido a que “eso es lo que quieren los venezolanos” en el ánimo generalizado de la Comunidad Internacional de “terminar con el conflicto” de Venezuela. ¡Cuidado con eso! Esta triste propuesta de Petro nos recuerda que ya es hora de un cambio radical de las caras negociadores de la nueva oposición del 28 de julio…

Caracas, 10 de Octubre de 2024

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana

jueves, 3 de octubre de 2024

El escenario final

Por Luis Manuel Aguana

English versión

Al mejor estilo de los policías de las series de investigación criminal, los venezolanos deberíamos preguntarnos a quién beneficia el fracaso de María Corina Machado (MCM) y Edmundo González Urrutia (EGU) en poder cobrar la elección del 28 de julio, juramentando a EGU el 10 de enero de 2025. Porque de eso es lo que se trata aquí, tanto en Venezuela como en España, porque el problema venezolano cruzó el famoso charco desde que EGU salió de Venezuela.

De allí que los venezolanos debamos tener mucho cuidado al leer opiniones, tanto de aquí como de España o cualquier otro lugar socialista del mundo, al situar adecuadamente esta controversia. El problema NO ES si EGU sea un héroe o no porque decidió salir del país, como consecuencia de una extorsión en toda regla perpetrada sobre su persona, en los predios del territorio diplomático español en Venezuela, por funcionarios venezolanos, en presencia y/o presunta complicidad del embajador del Reino de España en Venezuela, en representación de su gobierno, ni que haya “puesto su situación personal por encima de la lucha política en su país”, como lo expresara la Sra. Ana I. Sánchez, prominente militante de los socialistas españoles, en un reciente artículo de opinión (ver Ana I. Sánchez, El Nacional, “El lío de Edmundo”, en https://bitlysdowssl-aws.com/opinion/el-lio-de-edmundo/).

El problema ES que Edmundo González Urrutia, con todos los achaques de salud que pueda tener como cualquier persona de su edad, ES el Presidente Electo de los venezolanos, y los que se dicen socialistas en Venezuela se robaron la elección, aunque sus contrapartes españolas, como la Sra. Sánchez puedan repetir una y mil veces que “no va a ser la solución para Venezuela”. Esa es una materia que decidimos los venezolanos el 28 de julio de 2024, y cuyo resultado está demostrado desde el mismo día siguiente con las Actas publicadas por la oposición en la web, y que ahora se encuentran físicamente y en original, en poder del Centro Carter en los EEUU, como fuera informado al mundo por Jennie Lincoln, durante su presentación en el Consejo Permanente de la OEA, lo que representa la prueba física contundente de la victoria de EGU en las elecciones de Venezuela, para cualquier país que desee constatarla (ver cuenta de X de @mariacorinaya en https://x.com/MariaCorinaYA/status/1841497501158756749).

Entonces ubiquémonos en el escenario correcto. ¿Cuál es el interés de la Sra. Sánchez del PSOE español de desacreditar a EGU, que no sea la protección del gobierno de Pedro Sánchez para no reconocer a EGU, intentando convencer al mundo que nos olvidemos de que no será posible su investidura el 10 de enero de 2025 porque “no va a ser la solución para Venezuela”? Más bien la Sra. Sánchez debería recordar que el Parlamento de su país reconoció políticamente a EGU como Presidente Electo, cosa que ya debería estar haciendo el gobierno de su partido, el PSOE, encabezado por Pedro Sánchez. Intentos de desprestigio como ese vendrán con más fuerza los días venideros desde ambos lados del charco.

Desacreditar a EGU es el primer paso para hacer fracasar la única posibilidad que tenemos de salir de dos cánceres al mismo tiempo: el régimen de Nicolás Maduro Moros y su oposición complaciente, que requieren de una MCM derrotada el 10 de enero, para convencer luego a los venezolanos que volver al terreno electorero con el régimen para las elecciones regionales de 2025, es la única opción que nos queda, visto “el fracaso de la oposición radical de MCM” de investir a EGU como Presidente de Venezuela.

Parte de esa estrategia se centra en lograr que EGU se “juramente” fuera de Venezuela, bajo los auspicios de una oposición vendida y forme un “gobierno en el exilio” desde donde saldrían recursos interminables de los gobiernos y la diáspora para sostener políticos vividores de nuestra tragedia en el exterior para la cruzada de “recuperación de nuestro país”. Así de claramente identificados están esos vividores que casi que lo gritan a viva voz cuando extorsionaron a EGU para salir del país, ayudando así al régimen y a su oposición complaciente. EGU tendrá que decidir entonces como querrá morir, si como Presidente Electo luchando por llegar a Venezuela para hacer efectivas unas elecciones que le dimos a ganar los venezolanos a instancias de MCM, o medrando en el exterior siendo otro Guaidó más, como marioneta manejada por unos vividores.

A aquellos que se encuentran desesperados porque aún no le ven “el queso a la tostada” a la salida de EGU y la clandestinidad de MCM les pregunto lo siguiente: ¿Cuánto tiempo lleva MCM en la conducción de la oposición venezolana frente al régimen de Nicolás Maduro Moros? Algunos de ustedes me responderán, “desde las primarias del 22 de octubre de 2023”. Y yo les respondería que están equivocados. MCM tiene las riendas de la oposición desde que arrancó la campaña electoral para las elecciones del 28 de julio, que fue cuando se empezaron a tomar las decisiones duras para ganar la elección en todo el país, en contraposición a los partidos tradicionales, incluyendo el famoso impasse con el CNE acerca de quién sería el candidato frente al régimen.

La presencia de MCM fue determinante, desde decidir quién estaría en las mesas hasta la defensa de los resultados y la decisión final del candidato EGU, producto de una negociación impuesta por el régimen con la MUD/PU porque rechazaron la candidata escogida por ella, la Dra. Corina Yoris. ¿Y eso cuando fue? Hace poco más de 6 meses. Ese es el tiempo que hemos tenido una verdadera oposición frente al régimen del castro-chavismo-madurismo. Una oposición que quiere salir de esta pesadilla, no una que quiere convivir con ella y que ha despreciado el liderazgo de MCM. Y con todo y eso muchos esperan resultados instantáneos frente a los más de 20 años que ha tenido la oposición oficial para sacar al régimen, incluida la elección mayoritaria de diciembre de 2015 donde los venezolanos le dieron a los 4 partidos del G4 el control del Poder Legislativo, el mayor Poder Público del país. ¡Por favor!

Y esto sin contar que en todo este tiempo la MUD/PU ha sido la que ha negociado con el régimen en todas las instancias, incluido Barbados, así como en todas las mesas de negociación que se han montado a solicitud de la Comunidad Internacional. ¿Se ha manifestado el liderazgo nacido en las urnas de las primarias del 22 de octubre, más allá de defender las elecciones que ganamos todos los venezolanos el 28 de julio? ¿No, verdad? Pues eso es lo que tiene que cambiar, y es precisamente lo que ese liderazgo moribundo, después del desguace del 22 de octubre, intentará impedir que cambie a toda costa. Para ellos es un problema de supervivencia. Lo lamentable es que en esa supervivencia se llevan por delante las aspiraciones de cambio político del pueblo venezolano, que por eso precisamente confió en el liderazgo de MCM.

Es la supervivencia de ellos frente al bienestar colectivo de los venezolanos al salir del régimen. Así de grave es. Así que no hay que equivocarse en donde están puestos los intereses de todos los actores de esta tragedia. Y lo más importante: ¡en dónde están los del pueblo venezolano! Este es el escenario final de cara al 10 de enero de 2025, donde se está dando la lucha a muerte entre quienes buscamos cambiar la manera de hacer política en Venezuela y aquellos que pretenden dejarla tal y como está, con el régimen incluido, para su beneficio y supervivencia política futura. Es por eso que salen y seguirán saliendo opiniones interesadas, con la ayuda del socialismo mundial, intentando crear una narrativa derrotista entre quienes resultamos vencedores el 28 de julio. ¡Mayor desparpajo, imposible!

Nunca antes, con tan poco tiempo, y con el liderazgo político correcto, se había llegado tan lejos en el reconocimiento del pueblo opositor venezolano como mayoría, sin discusión frente al régimen que gobierna Venezuela, y con las pruebas en la mano. Ya es hora que nos lo vayamos creyendo. Ese es el primer paso para atrevernos a terminar lo que comenzó con un deseo profundo de cambio el 22 de octubre y que aún no se desarrolla completamente porque se lucha en dos frentes simultáneamente, el régimen y su oposición cohabitante.

Si no permitimos que nos roben la representación que dimos el 22 de octubre, y eso se traduzca firmemente en decisiones de negociación conducidas internacionalmente por la representación legítima del pueblo ganador de las elecciones del 28 de julio, no solo EGU se juramentará el 10 de enero de 2025 en el Palacio Federal de Venezuela, sino que tendremos la oportunidad de adecentar posteriormente, y en un nivel nunca antes visto, la política como actividad al servicio del ciudadano.

Caracas, 3 de Octubre de 2024

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana

viernes, 27 de septiembre de 2024

Venezuela, la certeza de la incertidumbre

Por Luis Manuel Aguana

English versión

¿Deberíamos preocuparnos por el futuro cercano de la situación política del país? Cualquiera podría decir, ¿Qué clase de pregunta es esa? ¡Claro que deberíamos estar preocupados! ¿Y si yo les dijera que con o sin esa preocupación, el destino que tiene Venezuela no puede ser otro que el de ser libres? La gesta libertaria de Venezuela es una herencia histórica que, querámoslo o no, llevamos a cuestas los venezolanos, desde hace más de 200 años. Forma parte de nuestra manera de ser y de actuar. ¿No se han dado cuenta de que en toda nuestra historia, por más que algún gobernante haya querido someter a los venezolanos, ha salido tarde o temprano con las tablas en la cabeza? Ese es la característica de “cuero seco” que nos atribuyo Antonio Guzmán Blanco hace más de 100 años.

Entonces, la pregunta aquí no es si corregiremos o no el error monumental de nuestra historia que significo Hugo Chávez en 1998, sino en qué momento y cómo. En ese contexto, podemos tener la certeza del desenlace. Lo que nos causa preocupación es la incertidumbre de no saber cuándo y cómo será. En la historia cercana del siglo XX, con Juan Vicente Gómez, la cosa tardó 27 años, terminando con la muerte del dictador, no sin antes de muchos intentos, incluidas invasiones externas como la expedición del Falke. En el caso de Marcos Pérez Jiménez tardamos 10 años, menos tiempo pero con el auxilio de las FFAA.

La situación que nos ha tocado vivir desde hace más de 25 años igualmente tendrá un final con el consiguiente resurgimiento del país, como ocurrió antes. No es un deseo, es una certeza. Sin embargo, debemos reflexionar un poco acerca de cuánto y cuando hemos avanzado en ese objetivo, y las razones de los diferentes fracasos. Soy un convencido de que el régimen no hubiera durado lo que ha durado sin la ayuda de la oposición comprada y cohabitante. En otras palabras, no hemos tenido una oposición verdadera –o no hemos tenido oposición alguna- que conduzca al triunfo real del pueblo opositor. Sería innecesario reseñar en esta nota la cadena de errores cometidos, por acción u omisión, por quienes se dijeron opositores en todos estos años, porque ya lo he hecho de alguna manera en este blog al menos en 14 de esos 25 años.

En esta ocasión, diferencia de las anteriores oportunidades, tenemos una oposición con la vocación que se requiere frente al régimen, liderada por María Corina Machado (MCM), quien ha demostrado sin lugar a dudas estar al nivel del problema que tenemos. Se podría estar en desacuerdo con su historia pasada, pero lo indiscutible es que ha llevado este conflicto a un nivel que podemos decir con confianza, que tenemos la oportunidad, nunca antes más cercana, de resolver el problema político del país. Y en el caso negado de perder esa oportunidad, los venezolanos ya se han dado cuenta cabal de quienes han sido los traidores y del tenor que se requiere de quienes deben conducir esta lucha.

Hoy se ha avanzado, como nunca antes, desde el proceso de primarias del 22 de octubre de 2023, siendo que por primera vez el régimen se encuentra arrinconado y a la defensiva, llevándose a todos por delante, atropellando más aún los Derechos Humanos de quienes se le oponen. Ese es el mejor indicador del avance opositor.

Un indicador incontestable es la declaración de 31 gobiernos de países que al margen de la 79º Asamblea General de la ONU, se reunieron para dialogar sobre la grave y urgente situación presentada por Venezuela, en apoyo al respeto de los principios democráticos y el ejercicio de los Derechos Humanos en nuestro país, y en el que se exhorta a iniciar “conversaciones constructivas e inclusivas sobre una transición con garantías para ambas partes a fin de resolver el estancamiento político del país y restaurar las instituciones democráticas pacíficamente de conformidad con la legislación venezolana, así como con la voluntad del pueblo expresada a través de sus votos el 28 de julio. Permanecemos junto a los millones de venezolanos que siguen arriesgando sus vidas y su bienestar para exigir un futuro más democrático, próspero y seguro para ellos y para su país” (ver Departamento de Estado de EEUU, “Comunicado conjunto sobre la situación en Venezuela”, 26 de septiembre de 2024, en https://www.state.gov/translations/spanish/comunicado-conjunto-sobre-la-situacion-en-venezuela/) (resaltado nuestro).

¿Dónde se halla la incertidumbre? Tenemos la certeza de que esa oposición derrotada, deseosa de recuperar una confianza que los venezolanos le quitamos, por corrupta y cohabitante, influya para que Edmundo González Urrutia (EGU), y en consecuencia MCM, fracasen en el intento de recuperar el país, dinamitando la toma de posesión de EGU en enero de 2025, y desacreditando el liderazgo opositor bien ganado de MCM en las urnas. Se puede tener la certeza de esa incertidumbre.

La oposición oficial comenzó ya una lucha intestina en Venezuela (caso PJ y Capriles) para ver quién luce mejor frente al régimen para unas elecciones regionales el 2025, y seguir sobreviviendo a costa de nuestras desgracias con el régimen a la cabeza. Mientras 31 gobiernos le dicen a Maduro que deponga su actitud y respete la voluntad de los venezolanos del 28 de julio, la oposición oficial se comienza a cuadrar con el régimen para unas elecciones regionales, siendo esta la primera beneficiada del fracaso de EGU y MCM. Mayor contradicción imposible, que comprueba lo que siempre muchos  sostuvimos: que realmente NUNCA fueron oposición. ¿Seguiremos los venezolanos en ese juego electorero del régimen que solo alimenta la desgracia y el continuismo?

El régimen, en su desesperada búsqueda de la “normalidad” post 28 de julio, hará lo imposible para detener el avance internacional del cerco que paso a paso se le ha construido y que continuará cerrándose todos los días. Cada día hay un éxito nuevo en la dirección del reconocimiento internacional de EGU como Presidente Electo. Prácticamente, la noticia internacional más importante de estos días han sido los pronunciamientos en la 79º Asamblea de la ONU de los presidentes a favor del respeto de la Soberanía popular y los Derechos Humanos en Venezuela, comenzando por el del mismo Presidente de los EEUU, Joe Biden.

El peor error que podemos cometer es acelerar algo que se está desarrollando exitosamente. El mundo ya sabe que el régimen no es viable y cada día que pasa vamos consiguiendo más apoyos, como el del reciente pronunciamiento del Senado colombiano instando al Presidente Petro a reconocer a EGU como Presidente Electo (ver EGU y MCM le agradecieron al Senado de Colombia su apoyo, en https://www.costadelsolfm.org/2024/09/25/edmundo-gonzalez-y-maria-corina-machado-le-agradecieron-al-senado-de-colombia-su-apoyo/).

Pero si eso no es suficiente, sumamos la declaración de ayer del Secretario de Estado de los EEUU, con la Ministro de Asuntos Exteriores de Argentina, Diana Mondino, en el Hotel Palace de Nueva York el 26 de septiembre, indicando “Venimos aquí unidos en el compromiso de defender los derechos humanos del pueblo venezolano, y comprometidos a lograr un esfuerzo inclusivo, liderado por venezolanos, para restaurar el futuro democrático de esa nación. Eso significa insistir en que Maduro entable un diálogo directo con la oposición democrática unida de Venezuela que conduzca a un retorno pacífico a la democracia. Estados Unidos y sus socios están plenamente dispuestos a apoyar este proceso” (ver Declaraciones del Secretario de Estado de EEUU, Antony J. Blinken en una reunión ministerial sobre la urgente situación de Venezuela, en https://www.state.gov/translations/spanish/declaraciones-del-secretario-de-estado-de-ee-uu-antony-j-blinken-en-una-reunion-ministerial-sobre-la-urgente-situacion-en-venezuela/).

Una solución violenta no le conviene ahora a nadie, salvo a los que viven de ellas y azuzan los odios de las personas para vender armas o su conocimiento de matar. La última vez en que Venezuela se metió de lleno en una espiral de violencia acabamos con el país, y murió un tercio de la población. Podría argumentarse en contra que logramos salir del dominio español y liberar un territorio que se convirtió luego en 5 naciones, a un costo que todavía algunos consideran demasiado elevado, incluyendo la destrucción del sueño unitario de Bolívar. De esas 5 naciones solamente Venezuela quedo arrasada en gente e infraestructura productiva, y no salimos de abajo hasta encontrar petróleo.

Pero aunque la Guerra de Independencia fuera en defensa propia -no tuvimos alternativa- de acuerdo  al historiador español Fernando Olivié, citado por Enrique Tejera París, en su obra Venezuela y el Dios de los borrachos (1), debió ser evitada: “En vez de enviar a América a diplomáticos y hombres de Estado –que tampoco había muchos- Fernando VII y su gobierno enviaron a Morillo con 10.000 soldados, pero hasta la misma elección de Morillo fue un error”. De acuerdo a Tejera París, “Con semejante monarca no había arreglo ni negociación posible. Nuestra guerra de independencia era inevitable, por defensa propia”.

Pero ahora si tenemos alternativas, porque el mundo y el siglo son diferentes. Contamos con un Presidente Electo que tiene los votos de los venezolanos, y una causa sostenible y compartida cada vez más por la Comunidad Internacional. Y si finalmente no hay arreglo ni negociación posible con quienes ahora secuestran el país, la negociación todavía sería viable con los países que los sostienen en el poder. Y esos países acabarán comprendiendo, que más les vale trabajar para el futuro en sus intereses, con un gobierno legítimo en Venezuela que con una mafia que el mundo cada vez más rechaza  plenamente.

Como decía Gustavo Herrera, venezolano insigne, Canciller, Ministro de Educación y Ministro de Fomento en 1943, citado por Tejera París en la obra arriba mencionada: “No se preocupen tanto, porque a Venezuela la protege el Dios de los borrachos”. No solo estoy seguro de eso, sino de nuestra condición resiliente y libertadora, incapaz de ceder, y que ojalá nunca llegue a manifestarse con violencia, porque la última vez que ocurrió eso, la onda expansiva de esa confrontación no solo aniquiló a un tercio de nuestra población sino a la totalidad de los que quisieron someternos…

Caracas, 27 de Septiembre de 2024

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana

(1) Tejera París, Enrique, Venezuela y el Dios de los borrachos, Editorial Libros Marcados, Primera Edición, Marzo 2007, ISBN 980-6933-16-8

domingo, 22 de septiembre de 2024

La oportunidad de Edmundo

Por Luis Manuel Aguana

English versión

Todavía me es difícil de entender por qué sigue siendo más importante para todo el mundo la explicación de las razones que llevaron a Edmundo González Urrutia (EGU) a salir de Venezuela, que abordar el inmenso número de posibilidades positivas que su salida del país tiene y puede tener para los venezolanos, para la materialización del resultado real de las elecciones del 28 de julio. Pareciera que una parte de la opinión pública encontrara algún avance a nuestro principal problema –salir del régimen-  revisando el detalle de la extorsión de la cual fue objeto EGU para que firmara cualquier cosa que le pusieran al frente para resguardar su vida y la de su familia.

¿Qué parte no entendieron de que un EGU muerto o encerrado en una tumba del régimen, hubiera significado que no valieran nada los 25 asesinatos y más de 2.000 detenciones arbitrarias cometidas después del 28 de julio? ¡Claramente que hubo un delito al extorsionarlo con su seguridad y la de su familia para entregarle un salvoconducto para salir del país! Y que debía estar fuera para resguardar lo que algunos no quieren o no les da la gana todavía entender, por un sinfín de mezquinas razones: ¡QUE EGU ES EL ÚNICO DEPOSITARIO de la Soberanía Popular expresada el 28 de julio! ¡Sin él no hay nada que cobrar!

Y en el medio del océano de los más atroces delitos cometidos por este régimen a través de sus principales representantes en más de 25 años, ¿por qué todavía se sigue insistiendo en cómo EGU salió de Venezuela? ¡Es por eso por lo que seguimos en esta lucha! ¡Por la restitución de las libertades y el Estado de derecho! Claramente, a la vuelta de la legalidad en el país se deberán determinar las respectivas responsabilidades de los actores de este lamentable episodio, tanto de venezolanos como de extranjeros y abrir los procesos penales correspondientes.

Pero aquí voy a lo que considero más importante de este impasse de la lucha política: ¿Qué interés podía haber en desprestigiar o minimizar el carácter de EGU en esta situación, colocándolo como un cobarde o de supuesta “marioneta” de unos vividores de la política venezolana o española? ¿Quién o quiénes están detrás de todo esto que aún continúan echándole leña a ese fuego, y que no salgamos de esta discusión estéril? A eso es lo que los venezolanos tenemos que ponerle el ojo. Las envidias se han puesto al rojo vivo y hay mucha gente de la vieja política que prefiere destrozar lo que se ha alcanzado, a permitir que se siga avanzando en la recuperación del país, con la conducción de un liderazgo distinto.

¡Ya EGU está afuera de Venezuela! ¡Hay que continuar! ¿Qué es posible que el régimen se ensañe con su familia luego de haber establecido que luchará por hacer valer la Soberanía Popular, contrario a lo que decía el papel que firmó? Es posible. Pero EGU ya está más arriba de eso, y no solo es responsable del futuro de ellos SINO DE LOS MILLONES DE VENEZOLANOS QUE VOTAMOS POR EL que permanecemos también secuestrados con su familia en el país. Esa fue la pesada carga que aceptó cuando decidió representarnos en la elección del 28 de julio en lugar de María Corina Machado (MCM). Los votos fueron depositados por EGU para restablecer un modo de vida que nos arrebataron, y nos pertenece a los venezolanos.

Pero los responsables del intento de desprestigio de EGU al salir del país, siguen allí vivitos y coleando. Seguirán asechando, buscando, al igual que el régimen, una nueva  oportunidad para que fracase y con él, cualquier iniciativa dirigida a hacer valer el resultado de la elección del 28 de julio. Y estarán muy cerca de EGU porque saben que solo así pueden hacerlo fracasar. La sola presencia del verdadero representante de la Soberanía Popular venezolana en los escenarios internacionales le abrirá cualquier puerta, y eso lo resienten en el régimen y al parecer mucho más en la oposición que fracasó en el intento de  cerrarle el paso al sentimiento popular de cambio en el país. El enemigo seguirá allí asechando, aun cuando haya perdido las elecciones.

Es por eso que estando EGU ya afuera, el resto de los venezolanos solo debemos darle la oportunidad al Presidente Electo para hacer lo que tiene que hacer. Y eso me hace recordar un cuento que leí en alguna parte y que busqué sin éxito para hacerles la referencia. Mis disculpas anticipadas si alguno de ustedes lo conoce y no es exactamente como lo describo aquí. El cuento trata de alguien que le pregunto a Dios quién había sido el estadista más grande de toda la historia. Y Dios recorrió con él la historia desde el mismo principio, presentándole a Alejandro Magno, a Julio César, a Napoleón, a Bolívar, a Churchill y muchísimos estadistas y líderes de la historia humana. ¿Cuál de esos es?, preguntó el acompañante ansioso. Espera, todavía no llegamos, dijo Dios. Finalmente, llegaron a un pequeño taller donde un humilde zapatero trabajaba a la luz de una vela. Y Dios señaló: este es el estadista que buscas. La persona con asombro le dijo a Dios, ¿cómo puede ser un humilde zapatero el estadista más grande de la historia? Pues ese es -dijo Dios- solo que nunca le dieron la oportunidad...

No digo que EGU sea un estadista ahora, pero la historia y los venezolanos le hemos dado la oportunidad de serlo. Y solo Dios sabe que tendrá toda la ayuda desinteresada que pueda recibir de las mentes más privilegiadas de Venezuela regadas por todo el mundo. ¿Cómo podría fracasar? Si alguna oportunidad ha tenido Venezuela para resolver y salir adelante es esta si sabemos cómo aprovecharla, en especial si quien se encuentra al frente es un diplomático de carrera, cuya especialidad natural es la resolución pacífica de los conflictos.

Si de algo está seguro el régimen de Nicolás Maduro Moros es que no serán tolerados en el largo plazo en su condición de ilegítimos. Ya hay suficiente información oficial y extraoficial que indica que el régimen violentó la Soberanía Popular, y el cerco irá cerrándose implacablemente con el tiempo. Tendrán que negociar tarde o temprano.

Sin embargo, hay factores externos que los empujan a creer que pueden salirse con la suya. Es por eso que hay que abordarlos diplomáticamente. Por ejemplo, ¿cuál sería el problema que un equipo multidisciplinario encabezado por EGU, bajo la mentoría de EEUU y la UE, negocie con China y Rusia de manera directa una forma de convivencia que preserve sus intereses en el país, demostrándoles que un gobierno democrático con el respaldo mayoritario del pueblo venezolano presidido por EGU, sería más beneficioso para ellos que uno ilegítimo, dándole una salida democrática y pacífica al problema? Serían entonces los chinos y los rusos quienes le dirían al régimen que sería más conveniente para los intereses de todos que depongan su actitud y negocien una salida.

En el año 2020, ANCO le dirigió una comunicación al Presidente de Rusia, Vladimir Putin en ocasión de unas palabras que este pronunciara en el marco del Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF) en junio de 2019, reseñadas por el Diario Sputnik según las cuales “la crisis de Venezuela debe ser resuelta por el propio pueblo venezolano, y es el pueblo quien debe decidir si Maduro debe permanecer en el poder o no, mediante el dialogo, las consultas y la interacción entre diferentes fuerzas políticas” (ver ANCO entrega carta al Presidente de Rusia, Vladimir Putin, en http://ancoficial.blogspot.com/2020/02/comunicado-anco-anco-entrega-carta-para.html). En esa oportunidad abogábamos por una solución pacífica y electoral al problema venezolano.

Esta comunicación fue respondida oficialmente el 25 de mayo de 2020 a través de su Embajador en Venezuela, Sr. Sergey Melik-Bagdasarov, donde claramente se indicaba  en nombre del Presidente Putin, que “Rusia ha abogado por el arreglo en Venezuela por los mismos venezolanos” (ver carta de respuesta de la Embajada de Rusia, en https://tinyurl.com/ybwsehce). Mal podría entonces Rusia como país, luego de esas palabras del Presidente Putin en San Petersburgo en 2019, oponerse a que efectivamente los venezolanos hayamos decidido por una mayoría abrumadora el 28 de julio, que Maduro abandonara el poder por la vía pacífica y democrática. De la misma manera, China y el resto de los países que acompañan al régimen.

Es claro que nada de esto será fácil, pero China y Rusia son los principales pilares externos de sostenimiento del régimen. Los cubanos tendrían que alinearse a lo que allí se decida porque ellos serían seguramente protegidos en una negociación como esa. Si lo externo es abordado con éxito, los pilares internos que los sostienen no tardarán en ceder. Una personalidad como EGU, con el claro respaldo de la Soberanía Popular venezolana y de países como EEUU y los integrantes de la UE, puede llegar a acuerdos legítimos de ese calibre con esos países, y asegurar que este grave problema que tenemos se resuelva en muy corto plazo. ¿Imaginación mía? Tal vez, pero estas son solo ideas de alguien que de verdad cree que hasta un humilde zapatero puede llegar a ser un estadista si se le da la oportunidad…

Caracas, 22 de Septiembre de 2024

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana

martes, 17 de septiembre de 2024

La papa caliente del reconocimiento

Por Luis Manuel Aguana

English versión 

¿Por cuánto tiempo más la Comunidad Internacional seguirá exigiendo al régimen de Nicolás Maduro Moros que “presente las Actas” del 28 de julio para reconocer o no su condición de “gobierno legítimo”? La pregunta es pertinente porque hasta que eso no pase, Venezuela seguirá estando en un limbo perjudicial para todos los que vivimos en el país y en el continente.

Para este escribidor esa cuestión es tan importante que no solo amerita una discusión abierta acerca de este tema de todos los factores políticos nacionales e internacionales, sino de la presión generalizada del mundo para tomar una posición definitiva en ese muy importante asunto, ya que en eso se está jugando el futuro político cercano de Venezuela y Latinoamérica, y en consecuencia, de los principales actores políticos de cada país.

La cuestión no es tan simple como se ve superficialmente. Para la mayoría de los venezolanos que votamos el 28 de julio, el régimen simplemente le dio una “patada a la mesa” electoral y decidió alzarse con el poder, desconociendo los verdaderos resultados de la elección. Pero para la Comunidad Internacional que no vota en Venezuela, los procedimientos y los datos probatorios son importantes para un reconocimiento cabal del resultado. Y esos solo pueden salir de la entidad oficial que rige los procesos electorales en los países. Y como todos sabemos, esa entidad oficial no es más que la oficina de elecciones del régimen, que no podía dar otro resultado diferente al que dio en la madrugada del 29 de julio.

Siendo así, el juego pareciera estar trancado. Por el lado opositor, pareciera que el haber publicado las Actas de los testigos de la oposición en la elección, único documento oficial entregado de acuerdo a la ley a los participantes oficiales de una elección para constatar los resultados, pareciera no ser suficiente al mundo para aceptar el verdadero resultado. Por el otro lado, ni siquiera la entidad oficial electoral de Venezuela, el CNE, ha publicado los resultados ofíciales en la Gaceta Electoral, después de haber proclamado a Nicolás Maduro Moros como “Presidente Electo”, en los 30 días siguientes, tal y como lo exige la Ley Orgánica de Procesos Electorales y su respectivo Reglamento:

Artículo 155 de la Ley Orgánica de Procesos electorales de Venezuela vigente:” El Consejo Nacional Electoral ordenará la publicación de los resultados de los procesos electorales en la Gaceta Electoral de la República Bolivariana de Venezuela, dentro de los treinta días siguientes a la proclamación de los candidatos electos y las candidatas electas”.

Artículo 395 del Reglamento de la Ley Orgánica de Procesos Electorales vigente: “Los resultados electorales serán publicados en la Gaceta Electoral de la República Bolivariana de Venezuela, dentro de los treinta (30) días siguientes a la proclamación de las candidatas electas y candidatos electos”.

Así pues, si no han publicado los resultados a los que les obliga la Ley y su Reglamento, mucho menos publicarán las Actas que respaldan esos resultados.

A esto último debemos agregar que el CNE nunca ha publicado las Actas de ninguna elección, solo pública los resultados de cada circuito electoral que es lo que la ley les exige. Y este es un punto muy importante ya que la Comunidad Internacional está exigiendo algo que el CNE no está obligado a dar de acuerdo a la ley venezolana. A ellos simplemente les bastaría con publicar unos resultados sin respaldo de Actas para seguir sosteniendo que Nicolás Maduro Moros es el ganador de las elecciones del 28 de julio.

Pero, – ¡allí el bendito “pero” de nuevo!- las Actas fueron publicadas por la oposición. Si estuviéramos en un país con vigencia del Estado de Derecho, se podría demandar en un tribunal los resultados alterados así publicados por el régimen y revertir el resultado final de la elección, haciendo la respectiva comparación con las Actas que tiene el CNE por ley, con las que tiene la oposición. Pero este lamentablemente no es el caso. El régimen monto un teatro en su TSJ y llegaron unilateralmente a la conclusión de que Nicolás Maduro Moros fue el ganador “indiscutible” de la elección del 28 de julio, desatando al mismo tiempo una persecución política que todavía no cesa en contra de la oposición.

Entonces la Comunidad Internacional que nos metió en este predicamento electoral con el Acuerdo de Barbados - acuerdo que el régimen también ignoró flagrantemente- tiene una papa caliente en las manos y no podrá seguir sosteniendo indefinidamente que “Maduro presente las Actas” porque entre otras cosas no tiene porqué hacerlo. Tendrán que obligatoriamente tomar una DECISIÓN POLÍTICA de aceptar o no cualquier resultado que presente el régimen, si es que los presenta, más allá del show lamentable del Presidente del CNE en la madrugada del 29 de julio, y darse una fecha límite muy breve para hacerlo.

A estas alturas, es muy difícil que exista unanimidad en todos los países de aceptar la legitimidad del régimen de Nicolás Maduro Moros. Pero lo que no puede seguir existiendo es el “hasta que Maduro presente las Actas”. Ya deben decidir, a la mayor brevedad, aceptar o no a Maduro como Presidente legítimo. Y lo más importante, el futuro de nuestro país y el de Latinoamérica dependerá de la decisión de los países que  acepten o no a Maduro como tal.

¿Por qué digo esto? Porque todo se perfila a que los países que tomarán como legítimo a Maduro serán los de la órbita antioccidental, encabezada por China, Rusia, Irán y Cuba, seguidos por Nicaragua, y Bolivia, inscritos ya en ese eje, sin importar Actas o resultados. Colombia, Brasil, México, tendrán que tomar una decisión en breve. Incluso Pedro Sánchez en España, cuyo gobierno insiste en la cantaleta post 28 de julio “que Maduro presente las Actas”, tendrá que decidir pronto alinearse o no con su propio Parlamento. El trabajo de Edmundo González Urrutia (EGU) deberá estar enfocado ahora en la decisión del Parlamento Europeo de lograr que esa instancia de los 27 países de la Unión Europea lo reconozca como Presidente Electo legítimo de los venezolanos.

Esa papa caliente del mundo del reconocimiento a un gobierno en Venezuela se debe  resolver a la brevedad. Si los EEUU y el Parlamento Europeo reconocen a EGU como Presidente Electo legítimo, estarán dando pruebas válidas de la promesa que nos hicieron de que la vía de resolver el problema político de Venezuela se lograba mediante elecciones. Pues bien, ya no nos pueden salir ahora con otra cosa. Pero eso, aunque difícil, es necesario pero no suficiente. Les falta el paso trascendental de lograr que el eje antioccidental que ha logrado avances importantísimos en Latinoamérica, a través de la Venezuela de 25 años de Chávez-Maduro, Cuba, Nicaragua y Bolivia, retroceda en nuestro país.

Si la fuerza fundamental que representan las democracias de occidente logran con nuestra activa presencia ese paso con Venezuela –y no hay ninguna razón, ni económica, ni política, ni militar, para no lograrlo- se podrá restaurar el equilibrio perdido en Latinoamérica cuando los EEUU abandonaron su propia área de influencia natural dándoles paso a los principales abanderados de la multipolaridad del mundo. La recuperación de Venezuela para la democracia y la libertad del continente le conviene a todo mundo, inclusive a aquellos que pretenden un estilo de vida antinatural para nosotros. Es tarea de los venezolanos en cualquier lugar del mundo, hacérselos entender, en especial a aquellos que se les olvidó que esta es la tierra de Bolívar…

Caracas, 17 de Septiembre de 2024

Blog: TIC’s & Derechos Humanos, https://ticsddhh.blogspot.com/

Email: luismanuel.aguana@gmail.com

Twitter:@laguana