Por Luis
Manuel Aguana
Resalto
esta parte de mi última nota del 2019: “Si
el régimen asalta la Asamblea Nacional a punta de corrupción (que
de alguna manera ya lo han hecho con el solo regreso a la Cámara de
los diputados ilegales del PSUV con la anuencia de Guaidó-G4/FA), a
la oposición oficial no le quedaría otro camino formal que
reaccionar de manera contundente y trancar la partida en la defensa
del único poder legitimo del país, so pena de desaparecer como
cuerpo colegiado. El
acto provocaría una crisis institucional que debería terminar con
una declaración de cierre de esa Asamblea Nacional tal y como la
conocemos, dando paso a una verdadera resistencia opositora, con
decisiones inmediatas que le den un vuelco al rumbo del país. Eso es
lo que debería pasar, en ese caso, si de verdad piensan en el futuro
de los venezolanos y en el fondo desean cambiar las cosas…pero no
olviden que tratamos con una oposición que quiere cohabitar, y no
sería extraño que volvieran a perder otra oportunidad para accionar
todo lo que se les pidió y no hicieron el año 2019.”
(ver Volver a comenzar, en
https://ticsddhh.blogspot.com/2019/12/volver-comenzar.html).
Lo
anterior no es una manera de decir “te lo dije”, sino uno de los
escenarios que esbocé como posibilidad para el 5 de Enero de 2020.
Les confieso que no esperaba que llegaran tan lejos como montar una
plancha de cohabitación. Es que estaban tan seguros que impedirían
la reelección de Guaidó, que imagino que fue un toque de desprecio
deliberado aprovechar la oportunidad de defecarse en el alma a todos
aquellos que todavía creen que están frente a políticos que
dialogan y respetan acuerdos, y no frente a delincuentes. Vean bien,
eso es lo que hacen los delincuentes y es lo que pasa cuando dejas
meter al enemigo en tu casa. Dejaron entrar a los Diputados del PSUV
a la Asamblea Nacional y esas son las consecuencias.
Lo que
ahora estoy seguro de esta jugada es que no es solo del régimen.
Ninguno de esos diputados -desconocidos hasta hoy por los
venezolanos- y dados sus niveles en la escala partidista en sus
respectivas toldas, actuarían por su cuenta sin el aval de sus jefes
políticos. Ninguno de los partidos a los cuales dicen pertenecer los
diputados “disidentes” designados como nuevos Directivos de la
Asamblea Nacional, hasta ahora han dicho que desconocen el proceder
de esos militantes. Luis Parra (PJ) Presidente, Franklyn Duarte
(COPEI), 1er. Vice Presidente, José Gregorio Noriega (VP), 2do.
VicePresidente, y Negal Morales (AD), Secretario, no son lo que
podríamos decir la primera linea dirigente de esos partidos. ¿Como
podrían haber tenido la iniciativa de ir ellos solos en contra de la
linea de Guaidó y lograr lo que lograron? A otro pendejo con esa
historia.
Sin una
declaración inmediata, firme y contundente del G4/FA y Juan Guaidó
desconociendo la actuación de esos diputados, concluiríamos que
actuaron en plena connivencia con sus jefes políticos para darle un
nuevo respiro a la gestión fracasada de Juan Guaidó y el G4/FA,
colocándolos como mártires del régimen. Causa mucha extrañeza que
esta plancha saliera a ultima hora sin ninguna reacción por parte de
un Julio Borges, un Henry Ramos Allup, ni siquiera del propio Juan
Guaidó, habida cuenta de la trascendencia de lo que se estaba
jugando allí.
Por
otro lado, tal y como mencioné el 31 de diciembre pasado, después
de lo sucedido Juan Guaidó debería darle
paso a una verdadera resistencia opositora si realmente es verdad que
no hay connivencia con esa “nueva Directiva”, invistiéndose
formalmente como Presidente Encargado, con el respaldo de los
diputados opositores que no pudieron ejercer su derecho a votar por
una nueva Directiva por responsabilidad del régimen, y formalizar un
Consejo de Gobierno para dar los pasos necesarios para desplazar a
Maduro y los delincuentes del narco régimen del poder, con la
colaboración y la fuerza de la Comunidad Internacional. Ese debería
ser el próximo paso luego de un “golpe al parlamento” como lo
han bautizado, realizado por el régimen y sus cómplices -hasta
ahora- de la oposición oficial.
Si
por el contrario vemos que la “nueva Directiva” de la Asamblea
continua operando sin el rechazo comprobado de la oposición oficial
estaríamos en presencia de un nuevo engaño a los venezolanos y un
truco para reflotar la imagen de Juan Guaidó que está en el
subsuelo. Las primeras declaraciones del “nuevo Presidente” de la
Asamblea Nacional apuntan a la designación de un CNE para unas
elecciones. ¿No les parece eso sospechoso?
En
todo caso, visto del lado de afuera el impasse le da la oportunidad
–construida o no– a la oposición oficial y a Guaidó para
reivindicarse ante el país. Si el régimen cometió el error de no
esperar el quórum reglamentario, ni dejar entrar a la Directiva de
Guaidó al Parlamento para instalar la Asamblea Nacional, mal puede
esperar un reconocimiento del mundo. Ya la Comunidad Internacional,
encabezada por los Estados Unidos ya rechazó el show del régimen,
en cabeza de Michael
G. Kozak, Secretario Asistente del Departamento de Estado para
Asuntos del Hemisferio Occidental de los Estados Unidos (ver
https://twitter.com/WHAAsstSecty/status/1213907956955336705)
al declarar como farsa todo el acto. Si lo que esperaban con una
nueva Directiva títere del régimen era negociar la suspensión de
las sanciones y unas elecciones chimbas, el show no les dará para
eso. Los norteamericanos siguen reconociendo a Guaidó como
Presidente Encargado como lo dice el mismo funcionario: “@Jguaido
sigue siendo el Presidente Interino de #Venezuela bajo la
constitución. La falsa sesión de la Asamblea Nacional de esta
mañana careció de quórum legal. No hubo voto” (ver
https://twitter.com/WHAAsstSecty/status/1213907955466350598).
Por
otro, si el acto fue la puesta en escena de una jugada entre el
régimen y su oposición, tampoco creo que les de resultado. El
régimen persistirá en su Directiva títere y Guaidó por más que
se reúna y se invista como Presidente reelecto en una plaza o en el
auditorio de El Nacional, no será reconocido por Maduro y sus
delincuentes. Será perseguido y la Directiva válida de la Asamblea
Nacional será para ellos la que eligieron hoy sin quórum y sin
votos, en una cohabitación plenamente aceptada de manera encubierta
por los partidos de esa Directiva de militantes del G4/FA que
salieron de la nada para seguir en los negocios de la corrupción con
el régimen como si aquí no hubiera pasado nada. El Presidente
Encargado ahora tiene la palabra y una segunda oportunidad. Es
la oportunidad que menciona el ex Embajador Diego Arria (ver
https://www.facebook.com/103324305197/posts/10162576161790198/).
Pero yo no seré tan exquisito como mi querido amigo diplomático:
O se pone las bolas y hace lo que tenia que hacer el 2019, o que
renuncie para que otro lo haga. Venezuela ya no puede esperar más
por él...
Caracas,
5 de Enero
de 2020
Email:
luismanuel.aguana@gmail.com
Twitter:@laguana
(aún suspendida)