No sería la primera vez -ni la última- que me refiera a la poca calidad del liderazgo político venezolano, tanto de la oposición, y por supuesto del régimen que destruye consistentemente a Venezuela. Ese es un grave problema que no solo existe en nuestro país, pero aquí lo sufrimos en mayor profundidad en nuestra condición de nación destruida física y moralmente, precisamente a consecuencia de la mala calidad de las decisiones tomadas por ese mismo liderazgo político, desde hace mucho más de lo que el régimen castro-chavista-madurista tiene gobernando.
Alguien alguna vez tendrá que hacer un análisis y documentar la composición del actual liderazgo político responsable de las derrotas permanentes de la oposición. De donde vino ese liderazgo, que estudiaron, que hicieron para merecer tener la responsabilidad de tomar las decisiones que nos han afectado a todos. La apreciación que tenemos desde afuera se mide por los resultados. Mi ejemplo preferido es el de la gerencia de los equipos deportivos profesionales. Si tienes a un grupo gerencial que pierde y pierde juegos, lo menos que hace el dueño del equipo es sustituir a quienes toman las decisiones en el terreno. Vemos con mucha regularidad los cambios permanentes en la gerencia de los equipos deportivos profesionales porque allí si pierdes juegos, pierdes dinero. No se tolera a los perdedores.
Nosotros tampoco deberíamos tolerar perdedores en política, como dueños de la Soberanía que somos y particularmente de los “equipos” que conducen la República, porque aquí no está en riesgo ningún dinero (en el sentido comparativo a los equipos deportivos profesionales) sino está en juego algo mucho más importante para todos nosotros: la salud, la seguridad, la educación, la justicia, la economía, la integridad territorial, la paz social y pare usted de contar. Todas esas cosas están en Venezuela en manos de gente sin preparación, sin experiencia de vida y mucho menos experiencia de Estado. De allí los desatinos más increíbles que redundan hoy y redundarán mañana en graves perjuicios para la Nación.
En este sentido, en un claro ejemplo de lo anterior, los Diputados de la Asamblea Nacional de 2015 han rechazado de manera consistente aprobar el presupuesto 2021 de PDVSA Ad Hoc, destinado principalmente a la contratación y pago de las defensas jurídicas actuales y futuras necesarias en el exterior para litigar a favor de Venezuela, para no perder, o al menos detener hasta donde se pueda, que los demandantes de PDVSA en el exterior le pongan las manos a los activos expuestos por el régimen de Hugo Chávez y sus delincuentes posteriores.
No tendría nada de extraño que como suele suceder cuando ocurren esos desatinos, los abogados que se ocupan de las defensas emprendan demandas en el exterior por cobro de honorarios, con la consecuente tajada por retrasos y daños causados. Esa sería la guinda de una torta fabulosa de la cual no podrían tener responsabilidad quienes están recibiendo los golpes por ellos en el exterior, como la Junta Administradora Ad Hoc de PDVSA, pero que al final, como igualmente ocurre en estos casos, serían los responsables frente a la opinión pública sin importar lo que digan, porque esos mismos políticos absolutamente irresponsables que los pusieron allí, los crucificarán cuando se pierdan esos activos:
“Reiteramos de manera responsable que en noviembre 2020 sometimos el presupuesto correspondiente al año en curso, con información detallada sobre los conceptos en que se basa la gestión de PDVSA Ad Hoc. Durante el transcurso del año 2021, hemos solicitado respuesta y hemos exhortado a la Asamblea Nacional para alcanzar dicha aprobación. Durante nuestra presentación de resultados de gestión en junio de 2021, hicimos un llamado público a la Comisión Delegada para aprobar el presupuesto e indicamos los riesgos inherentes a la inacción y las graves consecuencias para el Patrimonio Nacional. De igual modo hemos observado en reiteradas oportunidades las solicitudes que, en este mismo sentido, ha hecho la Oficina de la Procuraduría Especial, sin que tampoco se haya obtenido respuesta hasta el momento. En este sentido, recordamos que la falta de recursos en la defensa de los derechos de la República, trae como consecuencia que los acreedores avancen en el intento de ejecutar activos de PDVSA” (ver Junta ad hoc de PDVSA exhorta a que se apruebe su presupuesto para continuar con la defensa de activos en el extranjero – Comunicado de PDVSA Ad Hoc a la Opinión Pública General – Tercer aspecto - 9 de Noviembre de 2021, en https://www.bancaynegocios.com/junta-ad-hoc-de-pdvsa-exhorta-a-que-se-apruebe-su-presupuesto-para-continuar-con-la-defensa-de-activos-en-el-extranjero-comunicado/).
Lamentablemente la Junta de PDVSA Ad Hoc quedó en el medio de una pelea de perros por la cabeza de Juan Guaidó y la situación de su Gobierno Interino, precisamente porque a los Diputados del G4 les importa muy poco –por no decir nada- lo que termine sucediendo con los activos de PDVSA en el exterior. Al menos pudieran lavarse las manos y ser honestos con los venezolanos, pero en un juego perverso de engaño continuado dejan correr las expectativas de que efectivamente están trabajando para evitar lo peor porque tienen a los pendejos que pagarán los platos rotos por ellos. Los miembros de la Junta de PDVSA Ad Hoc deberían darse un tiempo para denunciar públicamente esa conducta de los partidos y salvar su responsabilidad ante Venezuela. De otra manera serán igualmente culpables de lo que pueda suceder, aunque no lo sean…
Los Diputados están ocupados en una estrategia de mantener el parapeto del interinato y el Estatuto de la Transición, hasta que surja una nueva situación de equilibrio de poder con el régimen, que mal que bien ha mantenido Juan Guaidó con el Gobierno Encargado. Sin embargo, eso valdrá muy poco después del 5 de enero de 2022, al estar el G4 negociando con Maduro un Revocatorio que saben que van a perder, reconociendo al régimen a espaldas de los venezolanos y estirando la arruga hacia unas nuevas elecciones para el 2024. En esa nueva gestión se encuentran trabajando activamente los que siempre han apoyado a esa “oposición” tóxica, como las figuras principales que se montaron en la tarima del Aula Magna el 6 de marzo de 2018, fingiendo ser representantes de la sociedad civil (ver Dos actos, un mismo propósito: el relanzamiento de la MUD, en https://ticsddhh.blogspot.com/2018/03/dos-actos-un-mismo-proposito-el.html).
De allí que aquí no se hable de otra cosa que de elecciones, olvidando sospechosamente que no hay condiciones y mucho menos una democracia que las avale. Aquí no estamos solamente frente a un equipo “opositor” que pierde juegos porque es sumamente mediocre, sino que recibe beneficios por perder. De allí que la sociedad civil deba rechazar categóricamente esa conducta y salir directamente en la defensa de sus intereses, así sea asumiendo posiciones políticas porque sus representantes se vendieron.
Ese es el fondo y sustento principal del comunicado de la Alianza Nacional Constituyente Originaria, ANCO del 15 de Noviembre (ver Reagruparnos para Refundar la Nación: Un Compromiso Nacional, en https://ancoficial.blogspot.com/2021/11/comunicado-anco-reagruparnos-para.html). Allí se manifiesta: “…se hace necesario en lo político reagrupar las fuerzas democráticas y ciudadanas para superar los déficits de la conducción política. El 21 de noviembre de 2021 debemos cerrar el ciclo infructuoso de ésta errática lucha democrática”. ¿Y cuáles son esos déficits? La decencia que el país demanda para salir del régimen y la crisis que nos acompaña, y que definitivamente no es de su interés resolver. A partir del 21N Venezuela será entregada al régimen por la dirigencia política opositora. ¿Cómo creen ustedes que sean los niveles de impotencia y decepción de los venezolanos frente a esa dirigencia política opositora luego de comprobar que han vendido a Venezuela por un par de chancletas, esto es, por un cogobierno con Maduro?
Harán falta entonces muchas nuevas organizaciones, nuevas propuestas, nuevas caras, que le den esperanzas a los venezolanos de que todavía existen en este país reservas morales para salir adelante en un juego macabro que requiere mucho nivel, mucho amor y mucha entrega por este país. Al asumir ANCO y quienes le acompañan en la Conferencia Ciudadana para el Restablecimiento Constitucional y Democrático, un posicionamiento político frente al vacío en la conducción, lo hace porque no es posible alcanzar los objetivos de nuestra organización, entre ellos el más importante, la convocatoria del Poder Constituyente Originario, sin que exista la gente en la cual creer para el desarrollo futuro del país. Si no existe eso ahora en la conducción política, estamos dispuestos a construir otra a la altura del problema que enfrentamos, tardemos lo que tardemos, y conscientes de que sin eso nunca tendremos una República a la cual refundar…
Caracas, 17 de Noviembre de 2021
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