Mostrando entradas con la etiqueta Movimiento Constituyente. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Movimiento Constituyente. Mostrar todas las entradas

lunes, 19 de enero de 2015

Obsesión sicopática


Por Luis Manuel Aguana

“Lo importante en la vida es tener un gran objetivo y
poseer la capacidad y la perseverancia para alcanzarlo”
Goethe

Es la que me atribuye mi buen amigo Alfredo Coronil Hartmann en su Carta Abierta a Roberto Gilles Redondo del 18 de Enero de 2015 (http://pararescatarelporvenir.blogspot.com/2015/01/pararescatarelporvenir.html). Agradezco a Alfredo la mención porque voy a aprovechar esta estupenda respuesta al joven Gilles para confirmar que tiene razón en lo de la obsesión, pero equivoca el objeto de ella. La obsesión no es por una Constituyente, es por hacer realidad un Proyecto de País contenido en 12 Ejes programáticos que he explicado en mis notas desde hace ya bastante tiempo (ver los artículos en Doce Ejes y un Destino http://www.mediafire.com/view/2gvcpk32hf1eg1o/Doce_Ejes_y_un_Destino.pdf).

Y también es posible que se haya hecho sicopática en todo este tiempo, al desgañitarme por tratar de explicar que el instrumento no es el fin sino el medio. Si ustedes tienen otro medio civil, pacifico y constitucional distinto al de una Constituyente para llegar al mismo objetivo, ¡por favor explíquenmelo! De esa manera dejo de hablar como un radio prestado de una Constituyente porque todo el mundo ve el medio y no el fin.

Me hace acompañar Alfredo en esa obsesión, en mucha menor medida y de acuerdo a su criterio, con otro amigo, Oswaldo Álvarez Paz. Eso es un honor que no creo merecer. Oswaldo no solo ha hablado de eso sino que fue uno de los primeros que a principios de los años 80 llegaron a esa conclusión en los tiempos donde nadie veía que el sistema entraba en colapso y era necesaria su urgente intervención (ver OAP, La Constituyente es el instrumento  https://infragon.wordpress.com/2013/06/23/desde-el-puenteoswaldo-alvarez-pazla-constituyente-es-el-instrumento/). Tener una visión de esa distancia hace de Oswaldo Álvarez Paz uno de los líderes más importantes y necesarios en lo que obligatoriamente habrá de venir en Venezuela.

Es verdad que el mundo ha estado lleno de obsesiones históricas sin las cuales la humanidad no se hubiera beneficiado. Cuentan que si Thomas Alba Edison no hubiese sido obsesivo compulsivo, no hubiera intentado mas de mil veces el experimento de la bombilla eléctrica. Otro obsesivo histórico fue Charles Darwin que sin su obsesión no se hubiera pasado la vida investigando la evolución de todas las especies. Hay que ser verdaderamente obsesivo para emprender tal cosa.

Pero ese es un aspecto de la obsesión. Hay obsesiones que construyen naciones. De acuerdo a Joshua Kendall autor del libro “America’s Obsessives: The Compulsive Energy that Built a Nation” (Los obsesivos de Estados Unidos: La energía compulsiva que construyó a una nación), desde la más profunda historia de los Estados Unidos, protagonistas como Thomas Jefferson, HJ Heinz, Melvil Dewey, Alfred Kinsey, Charles Lindbergh, Ted Williams, Estée Lauder y más recientemente Steve Jobs, fueron obsesivos y de no haber sido por esa condición otra hubiera sido la historia de ese país ¿interesante, no? Pueden ver la presentación del libro realizada por Kendall en C-SPAN (lamentablemente está en inglés pero es bastante entendible) en http://www.c-span.org/video/?314426-1/book-discussion-americas-obsessives/.

Pero lejos de atribuirme en lo personal tal condición, si creo necesario que muchas personas tiendan a tomarse los temas principales del país como si fueran obsesivo-compulsivos. Y eso es por una razón simple: no puede haber éxito sin perseverancia (lean de nuevo la cita de Goethe al comienzo). Y más aun en nuestro país, donde los temas se toman y se abandonan a los dos días como si fueran playeras que se quitan y se ponen de acuerdo a la estación.

Nuestra dirigencia política nunca se ha tomado un tema del país en serio, desmenuzándolo hasta el cansancio, decantando todas sus posibilidades, aunque pueda estar equivocada en su planteamiento. Ustedes ven que en otros países existen personajes que saben muchísimo de un tema, especialmente los dirigentes políticos. Si muchos tomaran uno y lo estudiaran seriamente, durarían años en perfeccionar ese conocimiento y el resultado sería extraordinario porque juntos tendrían la energía que indica Kendall, para construir una nación. Por eso ayuda mucho ser obsesivo.

Cuando hace mas de 10 años el MID Táchira comenzó el estudio del tema Constituyente no lo hizo pensando en hacer una, sino en entender porque Venezuela había llegado a este estado de postración teniendo los recursos más increíbles que el Creador pudiera dar a una nación. Al construir un modelo para ser aplicado al país estos gochos después de mucho estudio serio y obsesivo llegaron a la conclusión de que para aplicar el cambio que estaba contenido en ese Proyecto, era necesario pasar por un proceso Constituyente. La idea de una Constituyente no les cayó del cielo, fue producto de un estudio político como pocos se han hecho en Venezuela. Llegaron a la conclusión que ese debía ser el instrumento, la herramienta, la vía para que se pudiera realizar el Proyecto País que estaban planteando.

Pues bien, luego de muchas explicaciones, galones de tinta y toneladas de papel virtual, todavía estoy, no explicando en qué consiste el Proyecto-que es lo que debería estar haciendo una vez más obsesivamente-, sino explicando que la Constituyente no es para hacer una Constitución más, u otro papel que pueda ser violado por cualquier gobierno futuro, sino que es la conclusión firme de un largo camino de acuerdos que tienen como base un Proyecto de País que establece el modelo con la estructura política y económica del país que nos llevará al desarrollo.

Y que eso es lo que precisamente hace que no sea violada ni pisoteada porque es el Pacto sobre el cual quienes discuten la estructura acuerdan inequívocamente que ese será el camino que transitaremos unidos y reconciliados. Esa es la base sobre la cual se construyen naciones. Ojalá que en ese camino podamos encontrar a otros con la “obsesión sicopática” suficiente para lograr la energía que necesitamos para reconstruir a Venezuela.

Caracas, 19 de Enero de 2015

Twitter:@laguana

sábado, 17 de enero de 2015

De la despolarización a la reconciliación


Por Luis Manuel Aguana

En días pasados tuve la oportunidad de asistir a una nueva presentación del Proyecto País Venezuela (http://proyectopaisviaconstituyente.blogspot.com/), esta vez a un importante grupo de dirigentes políticos de partido. El peregrinar de esta cruzada pasa por darle a conocer a los protagonistas políticos de todos los partidos, sin distinción de ideologías, lo que estamos proponiendo, que no descalifiquen lo que no conocen, como dice uno de nuestros compañeros del Movimiento Constituyente.

Paradójicamente, de esa reunión la preocupación no fue el PPV, al cual dieron una inusual acogida, sino que veían un grave problema en su implementación por el ambiente de profunda polarización en Venezuela, así el proyecto hable de reconciliación y reconstrucción futura...Y tienen razón, pero como decían los policías en mis tiempos de estudiante, vas preso igual. Hay que pegarle el diente a ese problema que no se ha tratado lo suficiente en sus causas y sus posibles soluciones. Veamos.

Chávez fue el iniciador de ese proceso de división de la sociedad venezolana en dos toletes-Caldera dixit-, para imponer un modelo político, de eso nadie tiene dudas. Sin embargo, nosotros desde la otra acera hemos distanciado aun más esas diferencias, haciendo ese proceso auto sustentado. Si me odias, te odio tres veces más; si me excluyes te excluyo; si propones algo, eso es malo porque lo propones tú y viceversa; si tienes gente violenta, yo también la tengo; y así "ad infinitum". El oficialismo ha hecho de eso un piso de sustentación política, fomentando aun mas ese proceso de división de la sociedad que solo le es conveniente a ellos para el sostenimiento de una propuesta política no tiene arraigo en el pueblo venezolano. Un país no puede funcionar así. Cualquier propuesta de cambio y reconciliación pasa antes por resolver ese problema.

Pero la pregunta de las 64mil lochas, como decíamos antes, queda al descubierto ¿para despolarizar hay que reconciliar o para reconciliar hay que despolarizar? ¿Qué es lo primero?

No hay despolarización sin reconciliación, pero tampoco puede haber reconciliación sin que se abandone el estado de permanente polarización del país. Y no puede haber reconciliación sin un planteamiento que NOS UNA A TODOS PARA CONSTRUIR JUNTOS EL PAÍS. Creo que ese es el verdadero fondo del problema.

¿Cómo intentó Capriles ganarse a los chavistas, es decir a la otra parte del país, en sus dos campañas? Convertirse en el "Chávez" opositor, indicando que no "abandonaría las misiones", con una oferta populista electoral tradicional semejante a la del Eterno. Pero, al margen que yo piense que las elecciones en Venezuela están arregladas desde el año 2004, si yo fuera chavista, ante una copia mala prefiero al original. Y Chávez ganó de nuevo el 2012, repitiéndose el año siguiente la misma historia con el heredero ungido. ¿Qué dijo la base chavista?: Prefiero el original o al menos a quien le dieron en herencia "el proceso"...

Ese "aproach" para ganar a esa "otra Venezuela" fue simplón, sin contenido y por supuesto suicida. Más de lo mismo electoral. Chávez llego al poder diciendo que el sistema de partidos había colapsado bajo la responsabilidad de los adecos y copeyanos, y que se hacia necesario "cambiarlo todo" con una Constituyente. Una oferta tentadora pero vacía de contenido. Chávez NUNCA explico antes de las elecciones de que se trataba eso, ni como se cambiaria el modelo al que le echaba la culpa de los males de Venezuela. Nadie sabía que se traía en las manos, pero eso es otra historia.

El Galáctico ofreció un cambio de modelo Y LO CUMPLIO. Y antes de eso no le explico a nadie que era, ni como se comía. Luego en el poder se desarrollaron los pasos para clavarnos la estaca. Pero el cambio del modelo no fue por uno que resolviera los problemas al país, fue por uno que le permitiera quedarse para siempre en el poder.

Ese nuevo modelo trajo sus propios dispositivos para sustentarse. Aquellos que compraron el mensaje de Chávez han desarrollado un cambio en sus condiciones. A esos desposeídos se les dio algo que nunca les habían dado: atención o al menos la percepción de ella, que es a todas luces lo mas importante en política. Y esa masa de población descontenta y olvidada aun piensa que con Chávez obtuvieron la reivindicación de su estado social, que alguien desde el poder les prestaba atención. Y eso sumado a un histrión con dinero, con un show populachero todos los domingos, terminó de sellar un sistema absurdo de hacer las cosas que tarde o temprano debía colapsar. Era solo cuestión de tiempo…y dinero.

Y lo mas absurdo de toda esta historia es que los liderazgos de la oposición creen que ese debe seguir siendo el camino. Chávez tuvo razón en algo: había que cambiar el sistema. Como animal político lo intuía, lo olía. Pero no tenia ni la mas prístina idea de como, de allí su ensayo a el "socialismo" cubano. Tal vez solamente por eso el Galáctico se ganó un puesto en la historia de Venezuela.

Ahora bien, nuestros dirigentes políticos andan perdidos en el espacio. Al menos Chávez tenía claro el QUE (el modelo) pero no el COMO (un Proyecto de País), ni el detalle de su implementación. Cuando ya nos mete por el callejón cubano comunista para darnos la puñalada, ya tenía sus asesores del G2 que si sabían que había que hacer porque ese era su modelo, lo demás es historia.

Pero al grano: ¿Cuál es entonces el camino de la despolarización?, pero la genuina con el pueblo chavista, no con los traficantes del régimen. La respuesta es esta vez sí abrir ese COMO que no abrió Chávez en 1998. Permitir al pueblo venezolano tener un sueño de país y compartirlo con quienes están de manera genuina del otro lado de la acera porque este también es su país. Que comparen lo que tienen ahora con lo que podrían tener con un cambio del modelo donde ellos construirían su país.

En otras palabras, es llegar discutiendo lo que no se discutió en 1998 cuando se ofreció Constituyente. Explicarle a la gente como se come eso y qué significaría para ellos. Que aquí no es simplonamente dejar “las misiones” como se ofrece ahora en las campañas de la oposición, ni decir que Chávez fue un líder celestial para ganarse a la gente que lo siguió.

Es explicar con un Proyecto nuevo, que existe un futuro posible y extraordinario si lo hacemos juntos, apartando divisiones y rencores. Entonces el PPV se convierte en el bálsamo despolarizante que nos lleva a la reconciliación, transitando la construcción de un país con un nuevo modelo político junto a ese pueblo que abandonó el régimen. Esa es la verdadera reconciliación que le urge al país, con la gente, con los Consejos Comunales-oficialistas o no-, con las Asambleas de Ciudadanos, con los vecinos en todo el territorio nacional, no con los malandros que nos desgobiernan.

Entonces, un mensaje para nuestros jóvenes líderes que intentan desesperadamente parecerse a Chávez porque creen que si no es así están perdidos: la cosa no es “reproducir” al Eterno, ni las cosas que hacía o decía. Vayan a la raíz del problema que no es otro que tratar de buena fe de dar una respuesta creíble y honesta a los problemas del país, con un mensaje auténtico. Eso es lo que valoran las personas. Lo valoraron de Chávez en su campaña de 1998 cuando a ningún político se le podía creer ni el Padre Nuestro. Tal vez esa sea la llave que abra el portón que nos divide como venezolanos…

Caracas, 17 de Enero de 2015

Twitter:@laguana

sábado, 6 de diciembre de 2014

El verdadero reto


Por Luis Manuel Aguana

Vuelta a las explicaciones básicas. Me sigue llamando la atención que nos pregunten todavía: ¿Constituyente? ¿Con ese CNE? Eso significa que hay que volver al principio. Nuestro planteamiento en el Proyecto País Venezuela NO INCLUYE a los Poderes Constituidos. Es el llamado al pueblo venezolano a que pura y simplemente expresen su voluntad de ejercer su derecho a tener el gobierno que deseen, dentro de la mejor estructura institucional posible, rescatando para sí la soberanía que solo le pertenece a los venezolanos y que ha sido secuestrada por un régimen castrador de libertades. Parece sencillo pero la experiencia de estos meses nos ha demostrado que no lo es.

En efecto, y aunque no haya sido escrito en nuestra Carta Magna, el Pueblo como depositario de la Soberanía tiene el derecho a ejercerla. De eso se trató la famosa sentencia del la antigua Corte Suprema de Justicia que le dio paso al gobierno de Hugo Chávez para convocar a un proceso constituyente en 1999. Y luego esa sentencia se tradujo en el Articulo 347 de la Constitución vigente.

Si las encuestas indican que los venezolanos que desean un proceso Constituyente superan ya el 70%, entonces ¿por qué no se ha traducido eso en miles de firmas para el llamado constituyente de los amigos de Voluntad Popular (VP)? Porque la gente no es idiota y pregunta. Y el tema no es trivial. Aunque exista el dispositivo constitucional que nos permita ciertamente cambiar las estructuras institucionales del país y hacer “borrón y cuenta nueva” con un proceso así, ¿por qué no avanzamos más rápido en esa dirección? Hay entonces que ponerle una lupa a eso.

Ya habíamos explicado las razones para no apoyar la recolección de firmas para un proceso constituyente de acuerdo al planteamiento de VP (ver Réquiem para unas bases comiciales en http://ticsddhh.blogspot.com/2014/09/requiem-para-unas-bases-comiciales.html). Sin embargo más allá de esa situación, el tema importante allí era que no se estaba tocando el fondo del problema. Si activamos este proceso no es para “pedirle el favor” al CNE para que chequee unas firmas o conduzca el proceso, sino para ordenarle al Poder Constituido Electoral que actúe de acuerdo a lo que indique el Depositario de la Soberanía, o simplemente descartarlo como órgano actuante en este proceso porque no creemos en absolutamente ninguno de los Poderes Constituidos, entre otras razones porque se encuentran contaminados por un gobierno extranjero. Es un problema de principios.

Somos NOSOTROS quienes debemos tener la certeza que tenemos las suficientes voluntades para activar el proceso Constituyente, de acuerdo a lo que dicta la Constitución, con el fin de demostrarles a todos los venezolanos y al mundo entero, que más de 3 millones de venezolanos deseamos contarnos de una manera transparente. ¿Qué plantea el Movimiento Constituyente que impulsa el Proyecto País Venezuela Reconciliada Vía Constituyente? Organizar a la Sociedad Civil para eso en toda Venezuela.

En este sentido, hay dos importantes tareas que cumplir. La primera: si el Depositario de la Soberanía, ergo nosotros, nos vamos a empoderar de nuestra propia situación como Ciudadanos, entonces debemos explicarle al país y al mundo PARA QUE deseamos un proceso como este. Ese PARA QUE está contenido en el Proyecto que le estamos planteando al país desde hace más de 10 años y que se ha sintetizado en un Libro Resumen que ya estamos haciendo circular por Venezuela (ver Proyecto País Venezuela Reconciliada Vía Constituyente Libro Resumen, en http://goo.gl/s12exA); y la segunda: movilizarnos con el instrumento de recolección de firmas que hemos elaborado y el procedimiento para su empleo por todo el país, estableciendo en cada Estado la organización que seguiremos para acopiarlas. Y también en cada Estado, explicar los alcances de esto porque cada uno tiene sus propias particularidades.

Pero aquí no estamos pensando en un ejército de personas paradas en las plazas públicas deteniendo a la gente que pasa por allí para que firme. NO. Preferimos pensar en personas que entiendan muy bien EL PORQUE Y EL PARA QUE el país debe ir a un proceso constituyente, y el cambio hacia una forma federal del organización del Estado que planteamos para Venezuela y las razones que nos llevan a creer que esa es la solución.

Convencer en grupos cerrados a personas que se conviertan en facilitadores en toda Venezuela y que estos a su vez convenzan a otros y que las firmas se realicen en lugares de reunión y discusión ubicados en comunidades, y al final que  las personas se comprometan a defender esas firmas, no solo porque saben las razones por las cuales están firmando y para qué, sino porque es de todos nosotros el compromiso personal de salvar a Venezuela. Eso puede llevarse a cabo perfectamente en Asambleas de Ciudadanos, en las casas, en las comunidades, en pequeños grupos regados por todo el país.

Cada región decidirá cuál será su mejor momento para comenzar y nuestra labor es entregarles toda la información que requieran y contestar a todas sus inquietudes. Por eso estamos moviéndonos por toda Venezuela con grupos organizados de la Sociedad Civil en los Estados con la intención de hacer viral el planteamiento del Proyecto País. Aquí vamos lentos y con pie de plomo porque estamos muy apurados.

El plan, si es que se puede llamar de alguna manera, es llegarles a muchas personas y lograr que entiendan lo que deseamos hacer. Que internalicen la naturaleza de la profundidad del cambio que proponemos y que salgan a su vez a exponerla en sus propios niveles y con sus propias palabras. Si no logramos eso, no lograremos voluntades y en consecuencia tampoco esas firmas para un proceso constituyente como el que proponemos en el Proyecto. Si lo logramos, con solo informar organizadamente en todo el país el momento preciso, recogeremos esas firmas en muy corto tiempo.

Entonces se equivocan quienes piensan que el esfuerzo está en recoger unas firmas. El esfuerzo real está en convencer a la gente de la necesidad de cambiar de raíz un sistema  político disfuncional y que entiendan lo trascendental del planteamiento que hacemos desde el Proyecto País Venezuela, en especial en las regiones, explicándoles que pueden vivir mejor y cuál es la ruta para llegar a eso. El reto es convertir habitantes en ciudadanos, que se empoderen de una esperanza que puede convertirse en realidad, ejerciendo el poder que tiene un ciudadano consciente de sus derechos. Ese realmente es el verdadero reto.

Caracas, 6 de Diciembre de 2014

Twitter:@laguana