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martes, 24 de abril de 2018

La Consulta Popular como articulación de la protesta social

Por Luis Manuel Aguana

Una preocupación generalizada de todas las manifestaciones de la sociedad civil en contra de lo que sucede en el país, es como articulamos y canalizamos las protestas de todo el mundo para lograr la masa crítica necesaria para que algo pase en Venezuela.

Se han dedicado muchísimas horas a la discusión de cómo hacer para que las pequeñas “candelitas” –Maduro dixit- que se están dando en todo el país prendan en un verdadero incendio y se movilice toda una población que no ve el día cuando finalmente termine el régimen de Nicolás Maduro. Sin embargo el régimen ha silenciado los medios de comunicación y aunque al final se logra conocer que todos los días existe alguna protesta fuerte por alguna carencia en alimentos, salud, agua, transporte, seguridad, etc., en todo el país, la percepción general es que Venezuela se encuentra en una tensa “calma” cuando en realidad está en un hervidero permanente.

En una pasada nota de marzo de 2014, que publiqué en el tiempo de la plena refriega en las calles de ese año (ver Caída inevitable, en http://ticsddhh.blogspot.com/2014/03/caida-inevitable.html) reseñaba que de acuerdo a investigaciones serias realizadas en relación a la lucha No-Violenta en contra de regímenes como el que padecemos en Venezuela, se llegó a la conclusión técnica que ninguna insurrección civil No-Violenta había fracasado durante el período de estudio (1900-2006) después que se llegara a una participación activa y constante de solo el 3,5% de la población, y que históricamente se habían contabilizado insurrecciones exitosas con mucho menos porcentaje que ese.

De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas-INE, tenemos una proyección de población al 2018 de 31,8 Millones de venezolanos, con lo cual se requeriría mantener en las calles de una manera activa y constante 1,1 Millones de personas. Esas son las matemáticas internacionalmente comprobadas de la protesta cívica exitosa. En el año 2014 pensaba que podríamos lograr esa cifra en las calles ese solo año. Pero 4 años de golpes, fracasos, traiciones, muertes, persecuciones y éxodo masivo nos indican que lamentablemente será cada vez menos posible utilizar la calle como única metodología de lucha, por lo que hay que implementar nuevas formas abiertas, pacíficas y No-Violentas adicionales que nos permitan demostrar de una manera clara e inteligente y a la vez contundente, nuestro rechazo y repudio a este régimen, de cara a lograr desafiar su permanencia en el poder.

En la víspera de la próxima movilización del 1ro de Mayo, muchas organizaciones se lanzarán a la calle en la protesta justa buscando reivindicaciones que es imposible que este régimen pueda dar, no solo porque destruyeron todo el sistema de vida de la población sino porque no cuentan con alguna manera alternativa de poder mantener a flote al país sin el dinero de la renta petrolera, y que ahora resulta insuficiente.

Este cuadro deprimente entrará en un circuito vicioso. La población en la calle protestará y su solicitud será respondida con más violencia y represión, volviendo al inicio con más hambre y más miseria, lo que provocará a su vez mas protestas.

“Contra el hambre, la miseria, la corrupción y la represión” será la consigna de los gremios y otras organizaciones sindicales del país para el próximo 1ro de Mayo. ¿Cuántas personas se podrán movilizar en Venezuela por la protesta social? Todo nos indica que estamos en la presencia de un aumento significativo de la conflictividad social. De acuerdo con el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social las protestas aumentaron 40% en un año, exigiendo de manera inmediata la cooperación humanitaria, estando febrero de 2018 caracterizado por un “aumento de las protestas laborales, protestas por alimentos y medicinas, cierres de calle, concentraciones y paralizaciones como las principales modalidades de la protesta…” (ver Conflictividad social en Venezuela en febrero de 2018, en https://www.observatoriodeconflictos.org.ve/tendencias-de-la-conflictividad/conflictividad-social-en-venezuela-en-febrero-de-2018).

Los venezolanos que apostamos por el retorno al Estado de Derecho, al respeto de la Constitución y su acatamiento (hasta que podamos cambiarla por una mejor) estamos en la obligación con el país de plantear nuevas formas de organización y de lucha No-Violenta. La combinación efectiva de la protesta en la calle por reivindicaciones no cumplidas que por su por su propia naturaleza son completamente disimiles, con una ruta coherente de cómo resolver el problema político del país podría efectivamente dar la articulación que se requiere para que la suma de todas esas protestas se constituyan en esa masa crítica que se requiere para sostener el mínimo internacional requerido para el desplazamiento del régimen.

Las protestas aisladas –las “candelitas” que llamaba Maduro- sin un pegamento que les de un sentido de unidad política, seguirán siendo eso, “candelitas”. Pero todas ellas tienen algo en común: son la consecuencia de un sistema económico nefasto impuesto por una claque dirigente ideológicamente contraria a la mayoría del país. No hay ninguna protesta que no tenga su origen en algo que este régimen haya destruido en su afán de imponer el Socialismo del Siglo XXI a los venezolanos.

Una Consulta Popular que indique la ruta clara para desplazar del poder a Nicolás Maduro sumará en una sola masa crítica a todos los venezolanos que aún quedan en el país, tanto los que protestan activamente en las calles, como los que no lo hacen por razones de edad, salud, seguridad, etc., y que son la gran mayoría, dándole un mandato claro de mayoría a quienes nos desgobiernan, y un mensaje contundente a la comunidad internacional de que los venezolanos deseamos un cambio en paz y en democracia, e indicándole a quienes todavía ostentan la representación popular en la Asamblea Nacional que aún nos deben un Gobierno de Transición y Unidad Nacional.

Vista de esa manera, la Consulta Popular se constituye en una herramienta formidable que debería ser utilizada por aquellos que están intentando articular la protesta social en sus diferentes manifestaciones, dejando de entenderla como sustitutiva de ella. Ya va siendo hora de que usemos los canales de participación que están en la Constitución a favor de nuestra causa, antes que dejen de existir…

Caracas, 24 de Abril de 2018

Twitter:@laguana

domingo, 13 de abril de 2014

País secuestrado


Por Luis Manuel Aguana

Con mucho respeto disiento de Laureano Márquez. La idea no es aquí caerle encima como el mismo indicó en su artículo (ver Diálogo en http://www.noticierodigital.com/2014/04/dialogo-3/). Eso  sería injusto y exactamente el mismo comportamiento de los personajes de ese encuentro que vimos los venezolanos en cadena nacional. Todo lo contrario. Creo que ha vivido una experiencia traumática producto precisamente de esto que estamos tratando de quitarnos de encima, y que debemos lamentar, no solo por Laureano sino por todos los venezolanos que queremos algo mejor para nuestros hijos....

Ya ha sido largamente estudiado eso que se bautizó con el nombre de Síndrome de Estocolmo. Un estado según el cual los secuestrados ven con simpatía al secuestrador hasta el punto de creer que les hacen un favor dejándolos con vida, creando un vínculo afectivo con él (ver Síndrome de Estocolmo en http://es.wikipedia.org/wiki/S%C3%ADndrome_de_Estocolmo). Eso es lo que están viviendo los venezolanos quienes todavía piensan de buena fe que dialogar con delincuentes puede conducir a algo. Las naciones civilizadas del mundo concluyeron desde hace muchos años que no se puede negociar con terroristas. Siempre sale más costoso.

Gracias a Dios que en el caso personal de Laureano y en el de muchos otros en su situación, eso de “dialogar” con los delincuentes dio resultados. Pero me atrevería a asegurar que en la mayoría de los casos las personas no corren con la misma suerte. Personalmente conozco uno de un muchacho amigo, que luego de "dialogar" con unos motorizados armados quienes le pidieron las llaves del carro a las puertas de su casa, al arrancar los delincuentes con el vehículo, el motorizado que iba detrás saco una ametralladora y con una ráfaga lo dejo tendido frente a la mirada enloquecida de su madre. Esa "negociación" no resulto bien. Dejo una esposa y dos hijos muy pequeños y de los cuales él era el único sostén.

Esa y muchas experiencias no exitosas indican que la máxima sigue siendo que con terroristas no se puede negociar. La experiencia internacional es inmensa en ese tema. Y el problema no es que se puedan salvar uno o dos personas cuando se sigue una conducta que favorezca la negociación con delincuentes, sino que el saldo al final siempre es una generación de muertos.

Y eso es lo que tenemos. Un Estado terrorista que tiene secuestrada a Venezuela y para mantener su crimen finge "dialogar" para bajar la presión del mundo que, escandalizado, mira que ese secuestro no cesa.

Hagamos de cuenta que Venezuela es la casa donde vivimos y un día dejamos entrar pacíficamente a unos individuos porque pensábamos que iban a ayudarnos a arreglar nuestra casa. Al pasar el tiempo los individuos se adueñaron de la casa y lo relegaron a usted y a su familia a un solo cuarto e instauraron reglas draconianas para comer, usar el baño y circular por la casa. Cuando entraron a la casa los niños de la familia estaban pequeños y no entendieron lo que pasaba.

Al correr del tiempo, usted adulto aterrorizado porque los individuos están armados, no hizo nada para que esa situación cesara, echando de la casa a estos individuos como correspondía. Incluso hasta piensa que le están haciendo un favor dejándole vivir en su propia casa (Síndrome de Estocolmo). Pero los muchachos que habían crecido en el ínterin empezaron a entender que esa no era una situación normal y que en las casas de los vecinos las cosas no eran así. Pues empezaron a desobedecer las reglas impuestas, como generalmente hacen los muchachos cuando no ven que las cosas son justas. Y así empezó la vida de cuadritos para los secuestradores.

Entonces los secuestradores comenzaron a pegarles a los muchachos y a maltratarlos, incluso hasta matarlos. Y como los maltratos eran tan atroces entonces el vecindario escandalizado toca la puerta y por supuesto quien contesta es el secuestrador NO USTED, que es el dueño de la casa.

Los secuestradores les dicen a los vecinos que él quiere la Paz en la casa-que no es de ellos-, y le exige a usted que se siente a hablar con él para ver cómo hacer para ponerle coto a los desmanes de los muchachos. Usted se escandaliza porque en primer lugar  ¡¡¡LOS TIPOS SON LOS SECUESTRADORES!!! Que allí hay una situación de rehenes, y que los muchachos TIENEN RAZON de querer sacar a los secuestradores de la casa en primer lugar.

Y los secuestradores necesitan de usted, el pueblo de Venezuela, para hacer que se tranquilicen los muchachos. Pero como usted bien sabe es imposible sentarse con ellos porque la UNICA conversación valida es que SALGAN DE LA CASA INMEDIATAMENTE. Y que ahora no solo serán los muchachos quienes protestarán para que se salgan sino el resto de la familia, porque ya les perdieron el miedo. Miren lo que lograron los muchachos…

En el medio de ese brete, los secuestradores hábilmente llaman a una banda amiga con la que han hecho negocios durante su estadía en la casa y les piden que les ayuden a aplacar a los muchachos, haciéndose pasar por los de la familia que han secuestrado para engañar al vecindario y “negociar” la paz con ellos. Esta banda había hecho negocios antes con el vecindario pero no se había nunca atrevido a meterse en su casa. Algunos de la propia familia extrañamente apoyan eso pero los muchachos, que no son ningunos pendejos, se dan cuenta de la jugada y exigen ahora que TODOS salgan de la casa.

Amigo lector, a estas alturas imagino que usted ya habrá identificado a los personajes. ¿Qué haría usted si esta fuera SU casa (que en realidad lo es)? ¿Se sentaría con los secuestradores a “negociar” para que se tranquilicen los muchachos y ellos se sigan quedando con una casa que NO ES DE ELLOS? ¿O seguiría en la protesta con sus hijos indefinidamente hasta que llegue LA POLICIA ANTISECUESTROS? Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia…

Caracas, 13 de Abril de 2014

Twitter:@laguana